Aunque parezca una eternidad, hace sólo diez meses que el mundo conoce el virus Sars CoV-2 y por eso se desconocen, hasta el momento, las verdaderas implicancias que tendrá sobre la salud de las personas a mediano y largo plazo.
Justamente por eso, en el camino andado con el ilustre desconocido es que se han dicho y desdicho cosas, entre ellas, sobre el impacto que tiene sobre las embarazadas y los recién nacidos que se contagian.
Por eso, desde la Dirección de Maternidad e Infancia de la provincia se han propuesto hacer un seguimiento de los bebés que hayan nacido en este contexto hasta sus dos años de vida. La intención es asegurarles la atención de la salud adecuada y oportuna y conocer su evolución, en particular si presentan alguna complicación asociada.
Se incluirá a aquellas mujeres que hayan transitado su embarazo durante la pandemia, a quienes se acompañará durante la gestación y el puerperio. Se trata de prevenir y atender tempranamente cualquier complicación.
Si bien en un primer momento de la pandemia se había asegurado que las embarazadas y sus bebés no corrían mayor riesgo ante la Covid -19, en agosto la Organización Panamericana de la Salud sostuvo que deben incluirse en los grupos de riesgo.
La sospecha es que quienes transitan un embarazo tienen más posibilidades de evolucionar a un cuadro grave. Tampoco hay certezas sobre transmisión vertical, de madre a hijo, ni del impacto que la infección puede tener en el desarrollo del niño.
Por ello, a través del “Protocolo de seguimiento de hijos de madres Covid positiva durante embarazo”, se abordará a todos aquellos que se detecten tanto en el sistema público como en el privado.
Seguimiento
“No queremos alarmar a las embarazadas sino que, como es una enfermedad nueva, recién ahora han empezado a nacer los bebés de quienes se han quedado embarazadas durante la pandemia”, señaló Mónica Rinaldi, directora de Maternidad e Infancia. Explicó que los bebés que nacieron al comienzo de la pandemia no tendrían mayores riesgos ya que el impacto en el desarrollo puede producirse durante los primeros meses de gestación.
Quieren saber “si afecta el desarrollo del bebé y asegurar los cuidados preventivos, como controles médicos y vacunas, porque si se detectara algún trastorno del desarrollo o hipoacusia, por ejemplo, la idea es llegar a tiempo”, detalló.
Iris Pandolfo (25) tuvo a su bebé hace un mes, justo el mismo día que cumplía 12 días de aislamiento por Covid-19. En diálogo con Los Andes contó que vivió los momentos previos muy intranquila porque cuando fue diagnosticada estaba en la semana 38 de embarazo, casi en fecha para el parto. Para su tranquilidad, llegó dos semanas después.
“Me sentía mal, me hicieron el hisopado y fue muy chocante enterarme; lloré mucho al principio”, relató.
“No pude hacerme monitoreo y no podía ir a la clínica, salvo por una urgencia. Los primeros tres días no lo podía creer, estaba aislada y me sentía muy mal. Tenía miedo de que le pasara algo a mi bebé, aunque me explicaban que hasta ahora no había casos de complicaciones. Lo que más me preocupaba era que naciera antes de terminar la cuarentena; me daba miedo contagiarle el virus”, continuó.
Cuando la criatura nació y vio que estaba bien, Iris se tranquilizó aunque es mamá primeriza, por lo que eso se suma a la inquietud de la Covid y hace que esté todo el tiempo atenta a lo que observa en su hijo. Tiene sus temores por posibles secuelas.
Por eso asegura que le ha dado tranquilidad saber que le harán un seguimiento y tener dónde acudir ante las dudas. “Fue una sorpresa que se contactaran conmigo de Maternidad y al mismo tiempo me ayudaron especialmente con la lactancia. Me contactaron con una nutricionista y gracias a eso lo logré”, mencionó esta mujer que cuenta con obra social.
Cómo se hará
Dado que la Covid es una patología de notificación obligatoria, el sistema detecta los pacientes al ser ingresados al Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentina (SISA) por los efectores de atención pública y privada.
Es desde allí que el equipo que realizará el abordaje hará la identificación y, a través de los datos que dejen -entre ellos un teléfono-, se comunicarán. Pero dado que a veces esto demora, también se ha hecho una particular solicitud a los hospitales para que informen sobre estos casos y así se entrecruzará la información.
Empezaron a implementarlo hace un mes y, ya con algunos ingresos, elaboraron un informe (ver aparte). La intención es tener uno por mes. Ya tienen 140 embarazadas y 40 recién nacidos ingresados.
“Nuestro objetivo no es hacer un trabajo de investigación sino un informe y se puede hacer una sala de situación para saber cómo van aumentando los casos y cómo se presentan”, señaló Mónica Rinaldi.
La idea es que durante el primer año de vida del bebé reciban una llamada trimestral y el segundo año, dos llamados. Además, se les da un teléfono de contacto para que evacúen dudas y pidan ayuda, entre otras cosas, cuando les cueste conseguir turnos médicos.
Se revisará con los padres la libreta de salud y se constatará que tengan vacunación completa, examen auditivo y pesquisa metabólica (prueba del talón) realizadas. Además se buscará sostener la lactancia hasta el sexto mes como mínimo y preferentemente hasta los dos años del niño.
En el caso de las embarazadas, se busca tener datos fehacientes, como un contacto, fecha probable de parto y efector donde se realizará. Además que se cumplan adecuadamente los controles prenatales, lo cual consideran esencial y piden hacer sin temor al contagio. También son asesoradas en pautas de alarma.
Rinaldi advirtió que los niños nacidos de madre positiva mantienen un aislamiento de 14 días y eso complica los controles, por eso buscan garantizarlos. Además, muchas mujeres se enteran de que son positivas al internarse para el nacimiento.
La funcionaria señaló que en el mundo ha habido casos de embarazadas que terminaron en cuidados intensivos. Sin embargo, esto ha estado asociado mayormente a patologías como diabetes, hipertensión, obesidad y en mayores de 40 años.
“También se pensaba que no había transmisión vertical. Esto no ha sido probado aún, pero sí se ha encontrado en algunos casos el virus en la placenta y eso nos da indicios de que podría haber transmisión al bebé”, concluyó Rinaldi.
Resultados del primer informe
Según informaron desde la Dirección de Maternidad e Infancia provincial, hasta ahora se han detectado 143 pacientes embarazadas Covid positivas.
“El 9,3% de las embarazadas presentaban comorbilidades, siendo las más frecuentes: obesidad, asma, hipertensión y ex fumadoras”, detallan en el primer informe que han realizado.
A esto, la directora del área, Mónica Rinaldi, agregó que la mayoría de las pacientes han presentado cuadros leves, cuatro han estado en unidades de terapia intensiva y una embarazada con comorbilidades falleció. Además, la mayoría de los recién nacidos ha tenido buena evolución.
“La mayoría de los bebés no han presentado complicaciones por Covid, salvo uno que tenía otras patologías pero probablemente por el cuadro clínico que tenía hubiese fallecido”, apuntó Rinaldi. Dijo además que otro niño que nació muy grave pero la mamá no tuvo Covid en el embarazo sino que lo adquirió después. Sin embargo, el recién nacido tenía otras enfermedades de base.