Es una acción sencilla, en sintonía con todo el contenido que entrega la Hemeroteca de la Biblioteca Pública General San Martín, donde diariamente estudiantes, historiadores y representantes de otras áreas de la cultura abrevan en revistas y diarios añejos en la búsqueda de información para tesis, investigaciones u otros fines académicos.
En la pequeña sala del primer piso del edificio de San Martín 1843, el encargado del sector, Juan Mazzella, recibe semanalmente a los visitantes con dos pequeñas representaciones de sucesos históricos.
La semana pasada, la evocación recayó en un suceso local, como fue el Día del Santo Patrono de Mendoza, Santiago Apóstol. Montado en un pequeño atril, Mazzella colocó información que recordaba la festividad a través del tiempo.
En otro extremo de la habitación, la figura que se recordó fue María Eva Duarte, Evita, al cumplirse el viernes pasado otro aniversario de su fallecimiento, el 26 de julio de 1952.
El empleado desplegó la revista “Todo es Historia”, de Félix Luna (número 14 de 1968), un suplemento del diario Uno, del 26 de julio de 2012, y otro, “El observador”, edición especial de la editorial Perfil, cuando se cumplieron 55 años de la desaparición de la llamada “Abanderada de los pobres”. También se pudo apreciar la Revista “Ñ”, de Clarín, del 4 de mayo de 2019, con notas evocativas del nacimiento de Evita (7 de mayo de 1919).
Otro detalle, pero triste por la incultura que significa: la colección de Los Andes de julio de 1952 no tiene la portada del día 27 de julio de 1952, jornada siguiente al fallecimiento de la segunda esposa de Juan Domingo Perón. Un ‘lector’ desconocido y desaprensivo cortó prolijamente la portada. Afortunadamente, las páginas interiores del matutino fueron preservadas y se puede acceder a la repercusión que produjo el suceso en el país, pero principalmente en Mendoza.
Como esa portada está en las colecciones de la propia empresa editora del decano de la prensa cuyana y en otros archivos de la provincial, no será tarea difícil fotocopiar esa hoja y añadirla a la colección mutilada de la biblioteca mayor de la provincia.
Mazzella probablemente prepare nuevos stands evocativos en agosto, un mes en el que se recuerda el paso a la inmortalidad del general San Martín, el fundador de la institución de los libros de la Alameda.
Una investigadora, María Lourdes Murri, profesora de Historia, opinó sobre el trabajo del dependiente de la biblioteca.
“Destaco -dice la profesional- el trabajo de Juan y la pasión que le pone a su profesión, su manejo de los contenidos de la hemeroteca mayor y menor y una excelente predisposición a facilitar el material”.
Y añade: “La idea de rescatar algunos hechos, acontecimientos, etc. relevantes a modo de efemérides locales y nacionales a través de una selección de notas de la época que se recuerda y posteriores es una gran iniciativa…Nos trae un pedacito de historia y de memorias a quienes nos acercamos a la sala. Rescato el manejo cuidadoso del material y el buen estado en que se conservan”.
Otra valoración de esta educadora es la necesidad de generar más espacios de recuperación, reconstrucción y divulgación de nuestra historia local y nacional, “porque existen fuertes olvidos que terminan siendo funcionales a algunos grupos. Particularmente, la historia de Mendoza tiene mucho para aportar a nuestra identidad colectiva, pero sin embargo, permanece poco explorada por la academia y, en el mismo sentido, poco transmitida en las aulas. Nuestra historia no se reduce ni a la gesta del general San Martín ni a la llegada de los bodegueros, aunque muchas veces pareciera que es así”.
