El Paso Internacional Cristo Redentor, vital para la conexión entre Argentina y Chile, ha permanecido cerrado, generando complicaciones significativas para el tránsito de personas y mercancías. A pesar del anuncio inicial de apertura para hoy, las autoridades chilenas comunicaron la cancelación debido a supuestos controles de avalanchas en la zona.
Usuarios afectados han expresado su frustración, señalando que Chile ha permitido acceso a su centro de esquí en Portillo y despejado la ruta hasta allí, privilegiando el turismo interno en lugar de facilitar el tránsito internacional. La presencia de nieve en tramos específicos entre la Aduana vieja y la entrada del túnel se ha citado como motivo oficial del prolongado cierre, iniciado el pasado 13 de junio.
Este impasse ha acarreado pérdidas económicas considerables para Argentina, con más de 4000 camiones varados y una estimación de pérdidas diarias que supera los 30 millones de dólares.
La Asociación Propietarios de Camiones de Mendoza (APROCAM) ha intensificado esfuerzos para abordar la situación, mientras que las autoridades continúan evaluando la viabilidad de abrir el paso en condiciones seguras.
El impacto humano también ha sido notable, con informes de dos choferes fallecidos y más de 300 personas atendidas por problemas de salud relacionados con las condiciones extremas de altura y clima.
