En pleno tránsito de la temporada de patologías respiratorias se presentan cuadros que se extienden más de lo esperado. Entre otros síntomas que persisten, aún después de haber superado la instancia más crítica, es habitual escuchar comentarios de quienes aseguran sentirse cansados durante semanas o que tienen una tos que se resiste a irse.
“Tuve diagnóstico de gripe pero no me hisoparon para descartar Covid, no fue muy grave la situación pero me dejó en cama varios días por el dolor de cuerpo y un gran decaimiento. Después de tener el alta y volver a trabajar, todo me ha costado bastante porque me canso rápido, se me va la energía”, contó Cintia.
Marcela, profesora de Educación Física en un gimnasio, también ha detectado las consecuencias: “Estas últimas semanas hubo mucha gente que no vino porque estaba enferma, después retomar les cuesta bastante a varios porque estuvieron sin actividad y porque están con menos energía”, comentó.
El médico neumonólogo Pablo Schervobsky señaló que se ven cuadros respiratorios pero pocos hisopados, entonces no se determina que sea Covid, lo que desde su punto de vista es lo que está determinando estos procesos que se extienden en el tiempo.
Lo que estamos viendo en muchos casos son cuadros similares a la que antes de la pandemia conocíamos como síndrome gripal: cuadros de catarro nasal, dolores de garganta, con fiebre variable -de febrícula a fiebre alta- tos seca y en algunos casos con flema”, explicó. “Muchas veces, ante la duda, para saber si es un cuadro de gripe, algún rinovirus o Covid, solicitamos hacer un test de Covid y los pacientes o no quieren gastar dinero, o no se lo quieren hacer solos (por su cuenta), prefieren no salir de la casa o simplemente no tienen ganas de saber qué tienen. Entonces estamos teniendo cuadros virales que no sabemos si corresponden a otros virus comunes como la gripe o Covid”, advirtió.
Explicó que en muchos de estos pacientes, el cuadro se prolonga durante casi una semana, persistiendo durante las dos o tres semanas siguientes tos seca alta a nivel de la laringe, de la garganta, sensación de cansancio, de astenia. Refirió que a veces logran descifrar que es Covid, quizás porque aparece la característica pérdida de olfato pero subrayó: “Es verdad que en muchos casos estamos manejándonos a ciegas”.
Además agregó: “A veces cuando el cuadro lo amerita, si sospechamos que hay neumonía, solicitamos una tomografía y a veces podemos hacer a través de ella el diagnóstico
pero verdaderamente es un desafío médico la presencia de los cuadros virales, que años atrás era más sencillo, para saber frente a qué nos encontramos y si le sumamos algunos cuadros de personas con historia de alegrías y alergias de la época se complica aún más”.
Con menos ansiedad
Cabe señalar que desde enero, el Gobierno de la Provincia dispuso que los testeos deben realizarse a ciertos grupos, lo hizo en el contexto de la tercera ola en que la alta contagiosidad llevó a una sobredemanda de estos diagnósticos y escasez de los recursos para realizarlos. Luego, la influenza comenzó a circular de manera anticipada a la temporada habitual, y dado que comparten síntomas se hace imposible diferenciarlas sin este análisis.
Asimismo, los cuadros de Covid que se están presentando son menos agresivos y la gente, ya más adaptada, no tiene la ansiedad que tenía antes frente a la enfermedad.
Hace un par de semanas, la ministra de Salud de la provincia, Ana María Nadal, aseguró que por los cuadros que provoca la variante que circula de manera predominante en el país, se observa que es menos agresiva que la circuló en enero. “El virus a medida que va multiplicándose va transformándose más en endemia y generando una enfermedad más benigna”, apuntó.
Para las autoridades locales no se aprecia un marcado incremento en las consultas, asociado esto a que probablemente muchos han dejado de asistir. Tampoco se observa un ascenso notorio en la ocupación de camas críticas ni en el número de fallecidos, ya que los cuadros no evolucionan a condiciones graves.
“La gran diferencia en esta ola va estar en la inmunidad, en la cantidad de personas inmunizadas, en la cantidad de personas con refuerzos, ahí está la diferencia frente al virus: en tener inmunidad natural por la enfermedad, tener esquema completo y haberse aplicado el primero y el segundo refuerzo, es la clave real”, subrayó la funcionaria.
“La gente está empezando a entender al coronavirus como parte del panel viral o de la circulación del invierno”, agregó respecto de que ya no se genera la ansiedad de las infecciones anteriores.
Un estudio publicado en la revista Nature, expresó que la mitad (49,5%) de los casos leves de coronavirus presentaron signos de Covid prolongado, tal cual reflejó recientemente Infobae. En el 52% de esta población se extendieron por una mediana de 29 días y los síntomas más comunes son trastornos del olfato, trastornos del gusto y tos.