Los “soldaditos” entrenados por una persona, que ya dieron pelea y ganaron la guerra contra el Covid-19, pasan a otra para ayudarla a enfrentar al mismo enemigo. Una metáfora que sirve para explicar en términos simples las bases del tratamiento con plasma de convaleciente que desde hace unos meses está en boca de todos.
Es que si bien todavía es considerado un procedimiento experimental, por lo que se sabe está dando buenos resultados en pacientes con la enfermedad que provoca el virus de Sars-Cov-2. Uno de los casos conocidos es el de Martín Insaurralde, intendente de Lomas de Zamora, a quien le aplicaron esta terapia y -a pesar de sus enfermedades preexistentes- obtuvo el alta en menos de dos semanas.
En Mendoza el tema estaba en estudio desde hacía tiempo, pero recién estos últimos días el gobierno provincial comenzó el reclutamiento de donantes. Así es que a partir del lunes pasado desde el Ministerio de Salud, empezaron a contactarse con pacientes recuperados para invitarlos a sacarse una muestra y determinar si pueden participar en el proceso.
Se trata de personas con dos tests PCR negativos, que fueron dadas de alta hace como mínimo 14 días y hasta un mes y medio. El plasma recolectado será almacenado (puede durar hasta un año) y quedará a criterio de cada hospital su utilización en pacientes, desde los cuales también deberán elaborar protocolos sobre lo ya autorizado por la Nación.
Pedro Ruiz, director del Centro Regional de Hemoterapia de Mendoza, recalcó que la transfusión de plasma para estos casos todavía está en una etapa de investigación a nivel mundial, y que en nuestro país se están realizando ensayos clínicos aleatorios para evaluar su seguridad y eficacia. “Hay que manejar el tema con mucha cautela, ya que se espera que recién a mediados de julio podrían estar los primeros resultados de estas investigaciones”, adelantó.
Por esa razón, desde el gobierno local están centrados principalmente en la extracción de este material. “Con las teorías que tenemos empezamos el reclutamiento de donantes que hayan tenido la enfermedad”, comentó. Además de los mencionados requisitos, las personas deben tener entre 16 y 65 años, buen acceso venoso, entre otros. “Les vamos pidiendo los datos al hospital, siempre que el paciente lo autorice y los llamamos. Luego pasan por una entrevista médica y se les toma una muestra”, señaló e informó que será una campaña personalizada y no masiva. En esta instancia se busca comprobar que el paciente no tenga otras enfermedades (HIV, chagas, hepatitis B o C, entre otras) y que efectivamente posea los anticuerpos para luchar contra este tipo de coronavirus.
Para extraer el plasma (uno de los cuatro componentes de la sangre, junto con los glóbulos rojos, blancos y plaquetas) se conecta al paciente a una máquina de aféresis por 30 minutos. La misma saca de la sangre del paciente este material biológico necesario y devuelve el resto. Por el momento en la provincia este procedimiento se realiza en el Centro Regional de Hemoterapia, en el hospital El Carmen y en el Central.
A la hora de utilizar este plasma, el director del Centro Regional de Hemoterapia aclaró que cada centro asistencial debe diseñar su propio protocolo, siguiendo los lineamientos de nación. En tanto remarcó que no será parte del tratamiento habitual a nivel provincial, lo que implica que el paciente no puede solicitarlo a voluntad y que se le otorgue. Una vez que se conozcan los resultados de las investigaciones clínicas del país este tratamiento podría avanzar más en Mendoza. “Puede que sea un éxito rotundo como en la fiebre hemorrágica argentina o puede que no. Saberlo toma tiempo, lo que es habitual en todos los procesos de investigación”, remarcó el experto.
Experiencia médica
Desde Chile la médica Lucía Nóbile, mendocina por adopción, relató que en la clínica donde trabaja realizan este procedimiento desde mayo. “Tenemos protocolos muy rigurosos que nos indican en qué pacientes utilizarlo”, explicó la profesional a la vez que detalló que se trata de personas que presentan neumonía grave por Covid-19 con ventilación mecánica invasiva, las cuales no hayan respondido a los tratamientos indicados.
Según su experiencia con una cantidad limitada, prácticamente un 80% ha respondido bien y ha dejado de necesitar el respirador pasados entre tres y cinco días. “Se notan mejorías en la recuperación pulmonar, se le va bajando el oxígeno de a poco hasta sacarle el ventilador mecánico. Además en su recuperación se sienten más vitales”, contó Nóbile. A su vez precisó que los efectos adversos son los propios de la transfusión (fiebre y erupciones locales), pero no han observado otros.
Sobre los donantes, relató que desde la clínica chilena se los contacta a los 14 días para hacerles el PCR y si les da negativo se les repite a las 48 horas. También se le realiza un estudio previo a la sangre y si están de acuerdo se los extrae usando el método de aféresis. “No pueden donar embarazadas, ni pacientes a los que antes se les realizó una transfusión de plasma”, informó la médica.
Aspectos a tener en cuenta en la ley de donación de plasma
Mientras la Cámara de Diputados de la Nación le dio media sanción al proyecto de ley para la donación de plasma, en nuestra provincia se sigue de cerca el tema. Mariano Garavaglia (médico de familia), realizó observaciones al respecto. “La ley de plasma está buena pero tiene aristas a tener en cuenta”, aseguró.
La primera es que apunta a que la donación voluntaria. “Si esperarmos que el argentino promedio done plasma, no va a ser exitoso: no tenemos cultura de donar. Tendríamos que convencerlos por una cuestión moral y si no se puede hacerlo de forma compulsiva hacerlo, tal vez como contraprestación si un paciente se atendió en el sistema público”, expuso. Por otro lado apuntó a la elección de los pacientes para usar este recurso limitado. “Habrá que tener criterios para que no exista discrecionalidad”, advirtió.