A más de dos años de que comenzó la pandemia, Rodolfo Suarez anunció el pasado sábado que el uso del barbijo en la provincia para prevenir el contagio de Covid-19 será optativo para todas las personas. Este anuncio fue acompañado por su ministra de Salud, Ana María Nadal quienes, de todas formas, recomendaron que las personas en riesgo de contagio deben seguir usándolo.
De esta manera, Suárez anunció que en los próximos días se verá la modificación de la norma que actualmente rige en Mendoza sobre el uso obligatorio del barbijo en ambientes cerrados, y se pasará a una etapa “de mayor responsabilidad individual” con el uso optativo del tapaboca.
Una vuelta a la “normalidad”
La infectóloga Victoria Codina dijo, desde su opinión personal, que la recomendación de la opcionalidad del barbijo viene de la mano de una “vuelta” a la normalidad, aunque no dejó de recordar que la pandemia aun no ha terminado. “Ahora se toma esta decisión porque la tasa de contagios si bien está en aumento, no se refleja en un sufrimiento del sistema de salud. No hay ocupación demasiado importante, y tampoco mortalidad”, explicó la especialista.
Recordemos que según el último parte del ministerio de Salud de la provincia, en la última semana se registraron 54 casos de Covid-19 y hubo un fallecido. Además sigue siendo la franja etaria de 15 a 59 años donde más se producen contagios, es decir, fuera del rango etario de más riesgo.
Por otra parte, el informe indica que respecto del factor ocupacional de camas UTI, para el Gran Mendoza es del 11,76% y el 7,69% en todo el territorio mendocino. Esto es otro de los indicadores tomados en cuenta para la decisión de retirar la obligatoriedad en el uso del barbijo.
“Está haciendo efecto la vacuna. Disminuye la gravedad de infecciones y también baja circulación viral. Una persona que circula es poco probable que entre en contacto del virus. Igual, la recomendación es que las personas de grupo de riesgo opten por usarlo. La posibilidad de contagio no es cero. Pero la probabilidad es que sea poco grave”, remarcó Codina.
Continuando, dijo que es posible que aumente la tasa de contagios pero este tipo de medidas son dinámicas y se cambia según el escenario epidemiológico. “Si se relajan las medidas y eso repercute en la infección y casos graves tal vez se vuelva al barbijo obligatorio. Pero si siguen siendo leves y no hay ocupación UTI tal vez siga con la opción barbijo optativo”, indicó recordando que la campaña de vacunación, el lavado de manos y la consulta temprana en caso de síntomas siguen siendo claves. “También es bueno que quien no está de acuerdo lo siga usando”, cerró.
Optativo en todo el territorio
El pasado sábado Suárez dijo que con la modificación de la se va a pasar a una etapa de mayor responsabilidad individual con el uso optativo del tapaboca. “Desde la semana que viene sacaremos una norma para hacer optativo el uso del barbijo con algunas salvedades de recomendación para aquellas personas vulnerables, mayores de edad, pero la obligatoriedad ya no existirá.
Por otro lado, en diálogo con Los Andes, la ministra de Salud, Ana Nadal amplió este anuncio y dijo que la próxima semana se formalizará el uso optativo del barbijo en Mendoza. “Sin embargo, seguimos recomendando que las personas de riesgo lo utilicen”, dijo en redes sociales. Además, Nadal expresó que en los hospitales y centros de salud “seguirá siendo obligatorio”.
“Los centros de salud y los hospitales son lugares donde hay situaciones de riesgo, circulación de microorganismos, bacterias y virus”, marcó, por lo que concluyó que “no sólo hay que proteger al personal de la salud, sino que el personal de salud también debe proteger a quienes están internados y a los pacientes en general. El barbijo forma parte del equipo de protección personal para todos”.