No es la primera vez que hablamos de empanadas y cuál es su “verdadera” receta, sin embargo, hay una discusión interminable sobre los ingredientes que esta preparación típica debe llevar. Si bien existe el dicho “sobre gustos no hay nada escrito”, pero, nos hacemos la pregunta ¿cómo prefieren la empanada los argentinos?
La pasa, esta pequeña fruta jugosa que se seca tradicionalmente al sol o en hornos especiales hasta quedar achicharrada, es uno de los ingredientes en cuestión a la hora de preparar empanadas. Para muchos, la pasa de uva como parte del relleno es un sí rotundo, pero para otros, simplemente es una abominación.
¿Qué empanada prefieren los argentinos?
Hace unos años, una encuesta realizada por una de las aplicaciones de delivery más reconocidas en el país arrojó que casi un 80% de los consultados querían su empanada sin pasa de uva. Como muchos sabemos, para que realmente exista una grieta, deben existir dos bandos de importancia equivalente.
Probablemente, esta grieta se esté cerrando debido a que la mayoría ha dado su veredicto. Es así, como la pasa de uva lentamente se despide de su lugar en las recetas de las empanadas argentinas, incluso en las provincias donde supo ser parte de su tradición histórica. Son malas noticias para los amantes de lo agridulce, un sabor que de acuerdo a los especialistas no está del todo asentado en nuestra cultura.
Variantes en el país
Bonaerense: la provincia de Buenos Aires se adjudica la invención de la empanada de jamón y queso, aunque lejos de eso, este tipo de relleno tiene su origen en Francia y España. Sin embargo, es una de las preferidas por los bonaerenses, sobre todo en la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires.
Salteñas: están entre las más conocidas del país y son una de las representantes de la empanada argentina en el mundo. A diferencia de las demás empanadas de carne cortada a cuchillo, estas incluyen papa hervida, cebolla de verdeo y, en algunas partes de la provincia, también incluyen arvejas. Se las puede conseguir tanto fritas como cocidas en el horno de barro.
Tucumanas: las empanadas de la “Cuna de la Independencia” son las más parecidas a las que se consumían en la época de la Revolución de Mayo, contienen carne cortada a cuchillo, huevo duro picado, cebolla, pimentón y mucho comino. La receta original exige freírlas en grasa de pella (muy refinada, es la que recubre los órganos de animales como las vacas), aunque en la actualidad es muy difícil conseguirla.
Córdoba: Esta es una de las provincias donde se prioriza lo agridulce, ya que a un relleno bastante regular (carne, cebolla, comino y pimentón), se le espolvorea azúcar impalpable antes de llevar al horno.
Patagonia: en la amplia región del sur existen dos variantes clásicas, en la zona cordillerana las rellenas de cordero, mientras que en la costa son famosas las empanadas de mariscos con puré de tomate, casi como una cazuela.