La abuela de la menor mendocina que murió en un parque acuático en Córdoba durante su viaje de egresados escribió una carta donde confirmó que su nieta falleció por “muerte súbita”.
“Dios nos la prestó solo por 12 añitos, pero en este tiempo solo sembró amor. Nos dejó un sendero lleno de rosas, el cual transitaremos hasta que Dios nos llame para reencontrarnos con ella”, arranca la carta redactada por la mujer.
En el escrito la abuela detalló que se pudo constatar que Francesca Mazza falleció por “muerte súbita” mientras bajaba por el tobogán de agua hacia la pileta, donde la niña ya cayó sin vida. En medio de un escenario de tristeza, la mujer también aprovechó la carta para pedirles perdón a la empresa de turismo y al predio de atracciones por las acusaciones que surgieron en un comienzo.
“Nadie tuvo la culpa de lo ocurrido”, sostuvo y expresó que, hasta el final, su nieta “disfrutó feliz junto a sus compañeras de curso”. A su vez, agradeció el apoyo que la familia recibió por parte del colegio Sagrado Corazón y de la empresa turística de viajes de egresados.
“Como abuela salgo a pedirles perdón”, remarcó.
La autopsia
El resultado de la necropsia preliminar al cuerpo de Mazza reveló que sufrió un infarto masivo, que no tenía agua en los pulmones, así como tampoco golpes en su cuerpo. De este modo se confirma que la menor no murió por ahogamiento, sino que durante la caída de uno de los toboganes de agua sufrió el infarto que derivó en su fallecimiento.