El caso de sarampión detectado en Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ha encendido ciertas alarmas pero, hay que decirlo, las autoridades sanitarias ya advertían sobre el riesgo. En diversos países ya se observaban brotes de esta enfermedad que en algún momento se consideró erradicada de la región. Brasil, es uno de ellos y, se sabe, el tránsito con ese país es fluido aunque la pandemia lo haya atenuado.
La campaña de vacunación contra el sarampión y la vigilancia epidemiológica son las dos grandes estrategias con las que las autoridades sanitarias de Mendoza afrontan este escenario.
Los casos sospechosos de sarampión deben notificarse y verificarse o descartarse mediante estudios.
En tanto, el Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes anunció el 22 de marzo que realizará una campaña de vacunación combinada Covid-19, sarampión y gripe, la última de las cuales se adelantó ante un inicio temprano de la circulación.
Pero lo cierto es que la campaña de vacunación contra el sarampión está habilitada desde hace años, la vacuna está incluida en el calendario oficial y es gratuita, para niños y adultos.
De hecho, en la dirección de Inmunizaciones local tienen una particular cruzada respecto del tema ya que su directora, Iris Aguilar, desde hace mucho advierte sobre el riesgo de reinserción de sarampión y la necesidad de extender la cobertura. Finalmente, pasó.
“Estamos trabajando bastante en la concientización de la población para que se vacune”, dijo la ministra de Salud Ana María Nadal respecto del sarampión al anunciar la campaña conjunta.
“El objetivo es que no vuelvan a surgir casos de sarampión, que es muy complicado sobre todo en personas adultas. Además, la tasa de contagios de sarampión es muy alta: una persona con sarampión puede contagiar a nueve personas”, detalló la funcionaria.
“Los bloqueos geográficos y territoriales de esta enfermedad son muy complicados, de ahí la importancia de la vacunación. Por lo tanto, es un tema que está en agenda en el ministerio”, subrayó.
Además, destacó los resultados de esta campaña que ya lleva mucho tiempo: “Llevamos 10 mil adultos vacunados contra el sarampión”.
“América había certificado la eliminación de sarampión para el año de 2016 y luego aparecieron brotes en Venezuela y Brasil, en 2021 hubo más de 600 casos en Brasil y dos defunciones”, señaló la directora de Epidemiología, Andrea Falaschi, a LVdiez.
“Tenemos la posibilidad de erradicarla si tenemos buena cobertura de vacunación”, subrayó, aunque dijo que debe ser amplia, cercana al 100%, para tener los contagios controlados.
Refirió que rubéola y sarampión se vigilan juntos y que debido a la vacunación, los síntomas pueden ser más leves y confundir una enfermedad con otra que de síntomas similares.
Por ello, dijo que si se presenta fiebre y exantema (manchas rosadas en la piel) se debe concurrir al médico. Luego se hace toma de sangre, hisopado nasofaríngeo hasta el día 7 de aparecidos los síntomas o análisis de orina hasta el día 14 luego de aparecidos los síntomas.
Alerta
El Ministerio de Salud de la Nación informó el domingo que se registró un “posible caso” de sarampión en la Ciudad de Buenos Aires”. Ante la notificación, la cartera de Salud emitió un “alerta epidemiológico” con el objetivo de “informar y sensibilizar ante la posible importación de casos”.
Se trata de una mujer de 25 años, gestante de 9 semanas, que fue atendida en un centro de salud privado con sospecha de Covid-19 y “presentó serología (IgM) positiva para sarampión”. Había estado de viaje por diferentes países, entre ellos Maldivas y Brasil, donde hay un brote de esta enfermedad y regresó a Argentina el 4 de marzo.
No tiene antecedentes de vacunación contra el sarampión ni la rubéola.
Qué es el sarampión y qué lo identifica
Falaschi destacó que el sarampión puede darse en niños y adultos, aunque puede ocasionar cuadros más graves en niños pequeños.
“Es grave en niños pequeños, inmunocomprometidos y desnutridos”, advirtió.
El sarampión es una enfermedad viral, eruptiva-febril de transmisión respiratoria y altamente contagiosa, que se disemina rápida y fácilmente de persona a persona. Las manifestaciones clínicas son: fiebre alta, manchas rojas en la piel, secreción nasal, conjuntivitis y tos. Sus complicaciones son respiratorias como neumonía y neurológicas como meningoencefalitis. No tiene tratamiento específico y es mortal en 1 a 2 casos cada 1000 personas que tienen la enfermedad, informa el Ministerio de Salud de la Nación.
“Es una enfermedad inmunoprevenible es decir que hay vacunas que la previenen y por ello es erradicable del planeta “, dijo Falaschi.
Detalló que tiene entre 10 y 12 días de incubación y que el contagio se produce entre las 48 horas previas a la aparición de síntomas y el día 6 posterior a ello.
Quiénes deben vacunarse contra el sarampión
El Calendario Nacional de Vacunación incluye 2 dosis de triple viral a los 12 meses y a los 5 años de edad. Se trata de un segmento que, por hábito suele tener amplia cobertura. Pero la estrategia apunta especialmente a los adultos nacidos después de 1965 a quienes se pide que, si no tienen certeza de haber tenido la enfermedad o haber sido vacunados con esquema completo en algún momento de su vida, acudan a vacunarse nuevamente. Las autoridades subrayan que no hay contraindicación de recibirla nuevamente si ya se recibió y se desconoce.
No están incluidos los nacidos antes de 1965 porque antes de ese año, la circulación del virus era endémica y había brotes frecuentes por lo que se consideran protegidos debido a las altas probabilidades de que hayan estado en contacto con el virus.
Por ello, la sugerencia para los nacidos después de ese año es que cuenten con constancia o certeza de haber recibido el esquema completo, que requiere dos dosis de doble o triple viral, o haber tenido la enfermedad. Cabe señalar que en este último caso los anticuerpos duran toda la vida.
De este modo, según detalla el ministerio de Salud de la Nación, la protección adecuada sería:
- De 12 meses a 4 años inclusive: deben acreditar una dosis de vacuna Triple Viral (sarampión-rubéola-paperas).
- Mayores de 5 años, adolescentes y adultos: deben acreditar al menos dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión y la rubéola aplicada después del año de vida (doble o triple viral) o contar con serología IgG positiva para ambos virus. Esto es, realizar un estudio que permita verificar que se cuenta con anticuerpos por haber estado en contacto con el virus salvaje o haber tenido la enfermedad.
- Las personas nacidas antes de 1965 no necesitan vacunarse porque se consideran protegidas por haber estado en contacto con el virus.
- Personas nacidas después de 1965: contar con anticuerpos por la enfermedad o dos dosis de vacuna doble o triple viral.
- Personal de salud: Todas las personas que trabajan en el nivel asistencial (mesa de entradas, limpieza, seguridad, laboratorio, planta médica y de enfermería, etc.) deben acreditar dos dosis de vacuna contra el sarampión y la rubéola aplicada después del año de vida (doble o triple viral) o contar con serología IgG positiva para ambos virus.
Contraindicaciones de la vacuna contra el sarampión
El ministerio de Salud de la Nación detalla que la vacuna contra el sarampión está contraindicada en:
- Personas gestantes
- Niños menores de 6 meses
- Personas con antecedente de reacción alérgica grave (anafilaxia) a componentes de la vacuna
- Personas inmunocomprometidas
- Personas con infección por VIH con recuento de CD4 < 15% o < 200/mm3
- Personas con inmunosupresión por drogas
- Personas trasplantadas de órganos sólidos o precursores hematopoyéticos
