Covid-19 se ha complejizado los últimos días: el récord de 44 positivos del martes encendió la alarma tras el incremento sostenido de casos desde el 12 de junio. Por eso, el gobierno de Rodolfo Suárez definirá hoy cómo seguir y, en ese contexto, si se aplican nuevas restricciones.
Estarán en evaluación las reuniones familiares. Tras habilitarlas el 22 de mayo para fines de semana y feriados, ya habían sido restringidas la semana pasada a sólo los domingo de 11 a 19. También estará en juego la continuidad del turismo interno, algo que preocupa particularmente a intendentes de departamentos donde no hay casos o tienen pocos.
Una fuente del Gobierno admitió que se está hablando pero hasta anoche no había un decisión tomada.
Una de las opciones en estudio es la estrategia “on-off” que ya se ha aplicado en otras provincias. Se trata de administrar las restricciones y autorizaciones según el escenario que se presente, lo que implicaría cambiarlas cada cierta cantidad de días. Lo beneficioso del sistema es que permite controlar los contagios para evitar la saturación del sistema sanitario.
“Se está evaluando todo”, comentó el funcionario consultado y agregó: “Más allá del número alto de ayer (por el martes) eran todos clúster, perfectamente podía saberse de dónde venía el contagio, no es algo que sea imposible de controlar”.
Pedidos de endurecimiento
Tras el pico, las consultas y reuniones se sucedieron desde el mismo martes por la noche, cuando el Gobernador mantuvo contacto con los jefes departamentales.
Ayer dos intendentes pusieron sobre la mesa avanzar en restricciones, en particular al turismo interno. Uno directamente decidió aplicarlas: Juan Manuel Ojeda, de Malargüe, tras las protestas que hubo el fin de semana e incluso las amenazas que recibió, anunció el cierre de la actividad en el departamento debido al aumento de casos en el Gran Mendoza.
En el mismo sentido se manifestó el lavallino Roberto Righi, quien solicitó restringir en su departamento, desde ayer y hasta el 31, el turismo interno y las reuniones familiares. Además, pidió que se restrinjan las ceremonias religiosas y que bares y restaurantes sólo trabajen con las modalidades “pase y lleve” y delivery.
Hay que recordar que, por pedido del intendente Emir Félix, San Rafael fue el único departamento que nunca habilitó el turismo interno desde que se permitió en toda la provincia.
Arturo González, presidente de la Cámara de Turismo, consideró que, de avanzarse en esa medida, afectaría a una parte del sector pero no cambiaría la situación de la totalidad que se ha visto gravemente afectada. “El turismo interno impactaría en hospedajes de alta montaña, Valle de Uco y Malargüe, en ese segmento, pero el 95% de la estructura turística hotelera está cerrada”, apuntó.
“La situación del sector es literalmente terminal”, subrayó e insistió en la necesidad de que se avance en una ley de emergencia nacional para los prestadores turísticos que evite que sigan cerrando empresas.
Amigos restringidos
Si hay algo sobre lo que ya hay certezas es en controlar el traslado de grupos de amigos. Desde el Gobierno ven que el movimiento turístico de estos, en particular de jóvenes, se ha incrementado notoriamente y buscan ponerle un freno. En realidad no estaba permitido pero se había tomado con cierta laxitud, algo que llegará a su fin.
Así, luego de un exitoso fin de semana turístico tanto con hospedajes como restaurantes con su capacidad permitida colmada, se viene un Día del Amigo distinto. Si bien las consultas y reservas en locales gastronómicos ya comenzaron a para el viernes, sábado, domingo y lunes, el Gobierno de Mendoza dispuso prohibir el alquiler de cabañas a grupos de amigos para este fin de semana.
De esta manera, y más allá de que en algunos destinos ya contaban con reservas del 100% de las plazas para alojamiento, los amigos mendocinos podrán únicamente reunirse en bares y restaurantes. La medida responde a que estos encuentros tengan lugar en comercios habilitados porque hay más exposición a los controles que garantizan que se respeten los protocolos sanitarios y de seguridad. Por otra parte, los asistentes firman una declaración jurada y así es más fácil el seguimiento en caso de contagios.
Movimiento, de a poco
Aunque expectantes a lo que pueda oficializarse en las próximas horas, en el centro mendocino, también ya han un movimiento intenso. “Generalmente tomo las reservas hasta tres días antes, para evitar que si las hacen con tiempo, finalmente se caigan o la gente no vaya. Pero desde el jueves y viernes pasado ya me empezaron a pedir mesas para el fin de semana del Día del Amigo; por lo que ya las estoy tomando”, destacó Gonzalo Rodríguez, propietario de Believe Irish Pub (calle Colón, de Ciudad).
En el lugar están trabajando con dos turnos diferenciados -no sólo para el Día del Amigo, sino desde que se reanudó la actividad-: un primer turno de 18 a 20:30 (no muy demandado, aunque con promociones y happy hour) y un segundo de 20:30 a 23. “Se ha ido moviendo de a poco el tema de reservas, por eso ya empecé a tomarlas. El poder reabrir nos ha servido como ayuda, aunque con limitaciones. Pero al menos podemos abrir, si se compara con otras provincias. Y eso es algo bueno”, sintetizó.
Desde la sede Mendoza de la Asociación de Empresarios Hoteleros y Gastronómicos de Argentina (AEHGA) también se mostraron optimistas y cautos. “Hasta ahora, la gente está haciendo muchas consultas. Pero son cautos, todavía no se registran tantas reservas. Va a ser importante que la gente pueda organizar las salidas durante todo el fin de semana y repartirlas a partir del viernes; y no esperar todos al lunes que es 20 de julio”, indicó Edmundo Day, de la comisión directiva de la asociación.
También en Alta Montaña se están manejando con cautela, priorizando por sobre todas las cosas los protocolos, la salud y la seguridad. “Estamos tomando reservas ya para todo el fin de semana. Lo cierto es que no he visto mucha diferencia de pedido de reservas en comparación con los primeros fines de semana, desde que se abrimos. Creo que las familias eligen más la montaña y los jóvenes los bares de la ciudad”, destacó el propietario de la cervecería Jerome (El Salto), Eduardo Macari.
“Para el Día del Amigo estamos tomando reservas con mucho recaudo, por los protocolos municipales. Si bien tengo mucho espacio en el jardín, la verdad es que evito los grupos de más de una mesa; principalmente para evitar el descontrol. Prefiero seguir trabajando a media máquina y no que por culpa de un grupo me clausuren”, se sinceró el emprendedor. Además, dejó bien en claro que su principal preocupación es la salud de quienes trabajan en la zona.