El glaciar Thwaites, mejor conocido como “glaciar del juicio final”, está en la Antártida en una zona que no es reclamada por nadie y preocupa que colapse dentro de pocos años.
Si bien algunos especialistas indican que podría ser dentro de 10 o 50 años, este glaciar cuando colapse, hará que suba el nivel del mar, al punto de generar una reescritura mundial de las costas.
Este glaciar tan poco nombrado, mide 192.000 kilómetros cuadrados, es más grande que la provincia de Córdoba, que Mendoza o La Pampa.
Según indicó Clarín, en diciembre de 2021 un grupo de expertos confirmó que todo el infortunio del colapso, los desprendimientos de hielo, la consecuente suba del nivel del mar y la reconfiguración de las costas podría ocurrir dentro de poco tiempo.
La advertencia fue difundida por expertos de un consorcio llamado The International Thwaites Glacier Collaboration (ITGC), impulsado por Estados Unidos, Inglaterra, Alemania, Suecia y Corea del Sur. En una ponencia advirtieron que, según datos recientes, el estado del Thwaites es mucho peor del que se imaginaban.
Este grupo, realiza viajes permanentes a la Antártida y realiza profundos agujeros con la intención de determinar la densidad de las capas de nieve, la formación de grietas nuevas o el ensanchamiento de otras más viejas. Además, se encargan de pronosticar desprendimientos, de calcular su masa acumulada y perdida.
Cuando anuncian que el Thwaites está en muy mal estado, significa que la coraza de hielo que hace de barrera entre el glaciar propiamente dicho y el mar está amenazada: se deteriora a un ritmo más veloz de lo que se pensaba.
CÓMO AFECTA EN ARGENTINA
Sebastián Marinsek, jefe del Departamento de Glaciología de la Coordinación de Ciencias de la Tierra del instituto Antártico Argentino, explicó que: “si uno pudiera derretir toda la masa de hielo que hace de barrera del Thwaites, no pasaría nada... no subiría el nivel del mar porque la masa está en lo que se llama ‘equilibrio hidrostático’”.
Sin embargo, “la barrera de hielo, tanto en el Thwaites como en otros glaciares ubicados sobre el nivel del mar, está frenando otras caídas de hielo que sí generarían un aumento del mar. A esto apuntamos con los monitoreos que hacemos. Tal vez esto se acelere en 50 años. Tal vez, en 10″.
Marinsek recordó que The International Thwaites Glacier Collaboration, “el año pasado encontró que el Thwaites no solo tenía derretimiento arriba sino que también perdía masa por abajo y encontraron una aceleración”.
Pero su opinión es más conservadora: “Un colapso podría pasar a fin de siglo o en dos siglos. Son procesos lentos, hasta que llega un momento de desajuste y se dispara la desintegración”.
Asimismo, afirmó: “no existe la posibilidad de afirmar que en tal fecha se vaya a derretir, salvo que uno busque preocupar con una noticia. Además, cuando ocurra, generará cambios, pero no una inundación mundial”.