La familia Chirino vivió uno de sus días más tristes el día sábado 3 de enero, que se extendió hasta la madrugada siguiente, cuando Armando, de 88 años, falleció luego de una descompensación, y tras siete horas de espera de una ambulancia que llegó cuando ya era tarde.
El hecho dio lugar a la apertura de un sumario administrativo para establecer la responsabilidad de la empresa que presta el servicio de emergencia, y el PAMI evalúa las sanciones correspondientes que van desde multas económicas, hasta la rescisión del contrato.
El caso
El día sábado 2 de enero, Armando Chirino de 88 años se descompensó, al llegar su hijo a buscarlo, cerca de las 22.12 horas, comenzaron los llamados para obtener la atención médica.
“Me atendieron luego de algunos minutos de música clásica muy bonita y tomaron mi reclamo. Cerca de las 23.30 con la ayuda de una vecina, enfermera, empezamos a notar una mayor descompensación en mi padre. A las 23.47 me llaman de numero privado, PAMI y me hacen una serie de preguntas según ellos de protocolo, todas medicas las consultas, les dije que se apuraran porque mi padre estaba descompuesto. La enfermera me pide que haga nuevamente el reclamo y a las 00.08 vuelvo a comunicarme y pido una mayor urgencia en el servicio del médico y ambulancia”, explicó Gustavo, el hijo del afiliado a Pami, quien además es periodista.
El cuadro evolucionó, y alrededor de las 0.30 horas, Armando entró en estado de “agonía”. “Realizamos llamados a privados pero lógicamente por la hora no logramos respuestas. Volvimos a llamar a PAMI, cerca de las 1.36, con una demora importante otra vez en la atención, nos dijeron que ya llegaban. Volvimos a insistir a las 2.47 y a las 4.13”, agregó. Gustavo explicó que en el estado en que se encontraba su padre, la misma enfermera le recomendó no intentar trasladarlo por cuenta propia, porque podía empeorar las cosas.
“Finalmente mientras volví a insistir a las 5.13 porque ya no sabíamos como seguía esta historia lamentable. El médico y la ambulancia llegaron cerca de las 5.30 aproximadamente. Es decir 7hs después. Le dije: ‘tranquilo doctor, mi padre falleció hace varias horas’, le mostré los llamados y se sorprendió, me dijo que eso no puede pasar, que porqué pasaron tantas horas…., le respondí, comuníquele esto a sus superiores esto es una vergüenza, es abandonar una persona, el PAMI no tiene plan b, nadie te llama para darte otra solución, para tener alternativas, etc.”, agregó.
Además de afrontar el proceso de duelo, Gustavo contó que le preocupa que esa situación la vivan más jubilados, que no tengan los mismos medios o conocimientos que él para hacer los reclamos correspondientes; y que algunos, como su madres (de 86 años), entiendan que no van a ser atendidos si les sucediera algo similar.
“Vivimos una situación lamentable y solicitamos explicaciones a quienes corresponda”, señaló.
Gustavo se contactó, además de con PAMI, con el defensor de la tercera edad, Eugenio Semino, quien, además, le dijo a Los Andes, que en casos como estos, “hay que hacer una denuncia a la Unidad Fiscal”, para que se inicie una investigación.
La respuesta de PAMI
Al respecto, Martín Sevilla, gerente regional de la obra social en la provincia (Programa de Atención Médica Integral es una obra social de jubilados y pensionados), señaló que se puso en contacto con la familia para que ratifiquen la denuncia. “A prima face, los elementos apuntan a que hubo negligencia del prestador, que es Emergencias”, explicó.
El caso se encuentra en etapa de investigación, en donde las partes expresan sus motivos, las razones y circunstancias y a partir de ahí se toman las decisiones administrativas, porque al ser PAMI quien contrata al servicio, también debe pedirle explicaciones a la empresa prestadora, ante una presunta negligencia.
“Tenemos que terminar un sumario, ver qué pruebas existen, y con ello dar compulsa al ministerio Público Fiscal. Además de lamentar profundamente la muerte de un afiliado, y de acompañar el dolor de una familia, tenemos que esclarecer el hecho. Pami tiene 236 mil afiliados, y todos ellos tienen plena cobertura”, agregó Sevilla.
El titular de la obra social en Mendoza señaló que a la empresa (Emergencias), le podrían caber desde multas económicas, hasta la rescisión del contrato. De ser así, se inicia un proceso de licitación desde Buenos Aires para encontrar un nuevo prestador.
“Haremos todo lo que esté a nuestro alcance, somos financiadores y la cobertura (el servicio de emergencia y traslado), lo estamos pagando. Pami escucha fue cumpliendo con cada una de las etapas del caso, como sucede cada vez que un afiliado llama al 138, y si pasan de las 9 de la noche y hasta las 7 de la mañana, el servicio se cubre desde Buenos Aires, y desde allí se hizo todo como corresponde, y se envió al servicio de Emergencias con atención las 24 horas, pero estamos en etapa de investigación para ver qué sucedió”, agregó.
Para cerrar, Sevilla quiso dejar en claro que la obra social investigará el caso, y mantienen el compromiso de esclarecer el hecho y tomar todas las medidas (sanciones) que haya que tomar.