En las últimas horas, el Arzobispado confirmó una noticia que muchos fieles del catolicismo esperaban: vuelven las misas en Mendoza. A través de un comunicado, el obispo Marcelo Daniel Colombo celebró esta noticia y expresó que esta medida comenzará a regir a partir de este sábado.
“En horas del mediodía nos reunimos con el Señor Gobernador de la Provincia. Fue un encuentro cordial, con buena disposición recíproca de escuchar los distintos puntos de vista, acerca del régimen de las celebraciones religiosas para el Gran Mendoza, a partir del reciente Decreto de Necesidad y Urgencia Nro. 792”, comienza el comunicado de Colombo.
Y agregó: “El Gobernador nos expresó que había solicitado a la Nación la pertinente autorización para poder reanudar las celebraciones. En nuestro caso, pudimos explayarnos, según nuestra interpretación, acerca de las facultades del gobierno provincial para mantener el régimen vigente hasta el domingo. Inclusive llegamos a dialogar sobre la posible revisión, en el futuro, del criterio del número por una complementación con el criterio de porcentaje de ocupación, a partir de la existencia de Iglesias y templos muy grandes”.
Luego, continuó: “En ese clima de diálogo, nos despedimos a la espera de la oportuna definición del gobierno provincial en horas de la tarde, luego de un pronunciamiento de la autoridad sanitaria. Y hace unos minutos, nos ha llegado de parte de las autoridades, el texto de la Resolución respectiva, que saldrá publicada esta noche, restableciendo la plena vigencia del decreto provincial Nro. 763/20. Volvemos a las Misas con treinta personas a partir de mañana. Como Iglesia, reiteramos nuestro compromiso de seguir aplicando rigurosamente los criterios de seguridad e higiene para evitar la circulación del virus”.
Y concluyó: “Agradezco a la feligresía en general, por la espera paciente de estos días, luego de conocida la noticia de la suspensión de las celebraciones, después de mi reclamo del pasado lunes 12. Especialmente quiero agradecer al Obispo auxiliar, Mons. Mazzitelli, y a los miembros del Consejo Presbiteral, que respaldaron con convicción y comunión, mi posición respecto a la necesaria reanudación de las celebraciones. En esa línea de comunión convencida, se expresaron apoyando, nuestros diáconos permanentes y la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa. ¡Gracias a todos!”