Fincas de San Vicente, así se llama el barrio privado donde viven Martín Insaurralde y Jesica Cirio. Un lugar donde se vive con angustia el positivo del funcionario ante el teste de COVID-19. En este complejo cerrado se emitió un duro comunicado en el que se pide restringir todo ingreso a la casa de Cirio: “excepto móviles de emergencias médicas, policiales o autoridad judicial”.
Además se llama a los vecinos a analizar el personal que comparten. ”A modo precautorio, si algunos de ustedes tienen como empleadores a las personas que se detallan a continuación, sepan que son empleados del lote en cuestión y que han tenido contacto entre ellos”, se detalla y se mencionan los nombres del jardinero, de la empleada, de quien limpia la pileta y del cuidador de perros.
El comunicado sigue con un reclamo directo a Insaurralde: “Como el Municipio no nos ha dado ninguna directiva a seguir, este Directorio ha tomado la decisión de no permitir el ingreso al barrio de las personas mencionadas”, se remarca.
El funcionario fue internado en el Hospital Municipal de Llavallol. Preocupado pidió a todos: ”que se queden en casa, que se laven las manos, que hagan distanciamiento social... la curva en este momento es la más peligrosa y el virus está circulando por todo el AMBA”.
Jesica Cirio fue testeada y por el momento su resultado es negativo. Angustiada y en su hogar ella manifestó que viven este momento en familia y que acompañan mucho a Martín.