Cómplices en todo o ‘rivales’ hasta en la última golosina, los hermanos son los compañeros eternos que la vida le regala a quien tiene la posibilidad de disfrutarlo. Pueden ser hermanos de sangre o hermanos que se eligen, pero siempre están ahí para brindar la compañía infaltable ante las dificultades o alegrías del día a día.
Como cada 5 de septiembre, hoy se celebra el Día Mundial del Hermano en muchos países –en Argentina esta es el 4 de marzo- en conmemoración del fallecimiento de la Madre Teresa de Calcuta, ocurrida el 5 de septiembre de 1997. Santa Teresa de Calcuta fue una monja de origen albanés que dedicó su vida a realizar obras solidarias y de caridad por las personas desfavorecidas de la sociedad de Calcuta, en la India, y luego en todo el mundo.
Teresa de Calcuta murió a los 87 años en dicha ciudad de la India, había fundado la congregación de las Misioneras de la Caridad en Calcuta en el año 1950. Junto a otras religiosas, llevó amor y fraternidad a las zonas más castigadas del planeta.
En homenaje a la tarea de la santa de Calcuta y de su enorme ejemplo, es que en todo el planeta se recuerda a los hermanos de sangre y aquellos que fueron elegidos por afecto y empatía. Es un símbolo de la fraternidad y de la unión que representa todo hermano.