Día de María Auxiliadora: por qué se celebra el 24 de mayo y la oración para invocarla

Su fecha está ligada a la figura de San Juan Bosco, un destacado sacerdote italiano y fundador de la congregación salesiana.

Día de María Auxiliadora: por qué se celebra el 24 de mayo y la oración para invocarla
María Auxiliadora: por qué se celebra el 24 de mayo

María Auxiliadora es considerada una figura de intercesión divina, especialmente en momentos de adversidad y desafíos.

Este 24 de mayo se celebra a la patrona de todos los cristianos que se la llama así porque es “la que trae los auxilios venidos del cielo” y es también protectora de los enfermos y de las personas que sufren.

Por qué se celebra el 24 de mayo el Día de María Auxiliadora

En 1814, el Papa Pío VII, prisionero de Napoleón, prometió que si recobraba su libertad, establecería la fiesta de María Auxiliadora el día que llegara a Roma. El 24 de mayo de ese año, el sumo pontífice fue liberado y llegó a Roma, estableciendo así el 24 de mayo como el día de María Auxiliadora.

María Auxiliadora
María Auxiliadora

Historia de María Auxiliadora

La devoción a María Auxiliadora tiene una larga historia que se remonta a diferentes momentos y lugares. El título de “Auxiliadora” fue utilizado por primera vez por San Juan Crisóstomo en Constantinopla en el año 345, refiriéndose a la Virgen María como un poderoso auxilio de Dios.

A lo largo de los siglos, se registraron varios testimonios y eventos en los que la Virgen María, bajo la advocación de “Auxiliadora”, fue invocada e intervino en favor de los fieles.

En el año 532, San Sabas relató la existencia de una imagen de la Virgen María llamada “Auxiliadora de los enfermos” en Oriente, ya que se atribuían numerosas curaciones a su intercesión.

En el año 749, San Juan Damasceno difundió la jaculatoria “María Auxiliadora, rogad por nosotros”, destacando que la Virgen es auxiliadora para evitar males y peligros, así como para obtener la salvación.

En Ucrania y Rusia, se celebra la fiesta de María Auxiliadora el 1 de octubre desde el año 1030, cuando la Virgen liberó a la región de la invasión de bárbaros paganos.

En 1572, el Papa San Pío V ordenó que en todas las letanías se incluyera la invocación “María Auxiliadora, rogad por nosotros” debido a que, en ese año, la Virgen María protegió a la cristiandad en la batalla de Lepanto contra un ejército otomano.

En el siglo XVII, durante la guerra de los 30 años y la invasión de los protestantes en el sur de Alemania, los católicos hicieron una promesa a la Virgen de honrarla con el título de Auxiliadora si los libraba de la invasión y ponía fin a la guerra. La Virgen respondió a sus plegarias, y comenzaron a erigirse capillas dedicadas a María Auxiliadora.

En 1683, después de una gran victoria en Viena contra los enemigos de la religión, se fundó la Asociación de María Auxiliadora en agradecimiento.

Por qué los católicos celebran hoy María Auxiliadora
Por qué los católicos celebran hoy María Auxiliadora

Cuándo apareció María Auxiliadora

En 1860, la Virgen se apareció a San Juan Bosco y le pidió que se le honrara con el título de “Auxiliadora”. Bajo la protección de María Auxiliadora, se construyó la Basílica de María Auxiliadora en Turín, Italia, en la que Don Bosco afirmó que cada ladrillo era un milagro de la Virgen.

Según relatos, en esa visión la Virgen le reveló a San Juan Bosco que ella sería la auxiliadora de la Iglesia y de todos los cristianos en tiempos difíciles.

La devoción a María Auxiliadora se extendió ampliamente gracias a Don Bosco y su obra salesiana. Don Bosco veía a María como Auxiliadora del Pueblo de Dios y promovió esta devoción entre los jóvenes y la Iglesia.

Hoy en día, los salesianos continúan difundiendo la devoción a María Auxiliadora a través de sus obras y actividades evangelizadoras en todo el mundo, como ejemplo de amparo y estímulo en la evangelización de los pueblos.

Bendición de María Auxiliadora compuesta por Don Bosco

Nuestro auxilio es el nombre del Señor.

Que hizo el cielo y la tierra.

(rezar un Ave María)

Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios, no desoigas las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades; antes bien, líbranos siempre de todo peligro, Virgen gloriosa y bendita.

María Auxilio de los cristianos.

Ruega por nosotros.

Señor, escucha nuestra oración

Y llegue a ti nuestro clamor.

Oremos:

Dios todopoderoso y eterno, que con la ayuda del Espíritu Santo, preparaste el cuerpo y el alma de María, la Virgen Madre, para ser digna morada de tu Hijo; al recordarla con alegría, líbranos por su intercesión de los males presentes y de la muerte eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Amén.

La bendición de Dios Todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo,

Descienda sobre nosotros y permanezca para siempre.

Amén.

Seguí leyendo:

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA