La Nación autorizó a Las Heras a colocar controladores de velocidad – también llamados informalmente radares- sobre la ruta 40 (en lo que corresponde al acceso Norte mendocino), lo que avala la postura del municipio respecto a esta medida de seguridad vial y abre la puerta, una vez más, a la polémica ya instalada sobre el propósito del uso de esta tecnología.
Recordemos que en los últimos tiempos se ha acusado al municipio comandado por Daniel Orozco de tener un “fin recaudatorio”, ya que las multas rondan los 15 mil pesos, respecto del uso de controladores de velocidad o cinemómetros y no como una medida que busque reducir la siniestralidad vial. Lo cierto es que, con la novedad publicada en el boletín oficial de ayer, el municipio ya cuenta con un aval para llevar adelante esta acción.
Ante esta resolución favorable, otros municipios también podrían incorporar radares. Por ejemplo, desde Luján indicaron que aunque aún no se van a aplicar, existe un proyecto para colocarlos en los accesos y sobre ruta 7. En tanto, desde San Martín, un departamento que utilizó este sistema, rechazaron volver a implementarlo. “El tema de los radares en San Martín fue un programa de la gestión anterior implementado más que nada en la ruta 7. Cuándo asumió el intendente Rufeil desactivó ese programa y no hay interés en reinstalarlo”, dijeron desde esta comuna.
Seis controladores
La disposición 295/2022 de la Agencia de Seguridad Vial (ANSV) brinda más detalles respecto de lo autorizado. Allí se señala que los dispositivos estarán ubicados en la ruta nacional 40. Uno de ellos en la intersección con la calle Ameghino, en la intersección de la calle Juan José Paso y en el kilómetro 3.337 de la mencionada ruta nacional. En todos los casos, será tanto en el sentido ascendente como descendente, es decir para ir hacia el norte o hacia el sur.
En detalle, el texto normativo señala que: “Homológase y autorízase el uso por parte del municipio de Las Heras, provincia de Mendoza, de dos (2) cinemómetros controladores de velocidad de instalación fija marca IVERO, modelo V2-VIP, nros. de serie 138 y 139, en el Km. 3.304,5 de la Ruta Nacional N°40 (sentido ascendente y descendente en intersección con calle Ameghino, respectivamente)”.
También explica que los otros dos, marca IVERO, modelo V2-VIP, nros. de serie 140 y 141, estarán “en el Km. 3.303 de la Ruta Nacional N°40 (sentido ascendente y descendente en intersección con calle Juan José Paso, respectivamente) y que los dos restantes de las mismas características pero con número de serie 142 y 143 estarán “en el km. 3.337 de la Ruta Nacional N°40 (sentido ascendente y descendente respectivamente)”.
Es importante señalar que la disposición aclara que el municipio de Las Heras, deberá acreditar ante la ANSV en el plazo de Treinta (30) días la colocación de cartelería de tipo fija que indique la presencia de un radar en el corredor señalado, como medida adicional para reducir la siniestralidad vial.
También señala que la ANSV podrá solicitar informes en forma periódica, y realizar relevamientos estadísticos y de infraestructura vial del tramo autorizado “a fin de determinar la continuidad de la autorización otorgada o su reemplazo por otras medidas de seguridad vial que garanticen un correcto cumplimiento de los objetivos de reducción de siniestralidad vial en dicha jurisdicción”, indicó. Esto, por ejemplo, en relación a una efectiva reducción de la siniestralidad por sobre lo recaudatorio.
Un punto a tener en cuenta
El articulo cuatro de la mencionada disposición indica que se debe “posibilitar” la notificación de la comisión de presunta falta dentro de los diez kilómetros del lugar donde se hubiere verificado. Esto quiere decir que el conductor debe ser notificado en un radio de 10 kilómetros del lugar de donde está instalado el controlador de velocidad para que la “falta” sea válida.
En tanto, la disposición asegura que “cuando este procedimiento fuera imposible por circunstancias acreditadas debidamente por la autoridad local competente, será válida la notificación fehaciente al domicilio del presunto infractor de modo que quede garantizado el derecho de defensa y debido proceso de estos, con sujeción a la normativa vigente en materia de tránsito”.
La polémica
En su momento, Los Andes indicó que muchos vecinos de la zona que “sufren” los radares se quejaron porque se denunció que los radares no son precisos para detectar la velocidad en tanto que otros denunciaron que se trataba de una maniobra para lograr mayor recaudación.
Al respecto, Fabián Tello, secretario de la Intendencia de Las Heras, indicó que “Cuando lo implementamos en octubre, se hacían entre 700 y 800 multas por día y hoy el número fluctúa entre 40, 80, otros días 30. Eso demuestra que no se trata de recaudación porque con ese nivel de disminución no sería un negocio rentable para nadie”.
Resta señalar que el juzgado Vial de Las Heras se encuentra en calle San Miguel y Espejo, para que quienes lo precisen puedan realizar reclamos. En el caso de desconocer la infracción, hacer el descargo correspondiente y poder observar las cámaras.