Tal cual dispuso el gobierno nacional, desde hoy es obligatoria la implementación de la receta electrónica a nivel nacional.
Es que comienza a regir la nueva reglamentación de la Ley Nacional de Receta Electrónica, dispuesta a través del Decreto 345/2024.
La normativa establece un cambio en la modalidad de las prescripciones de medicamentos, órdenes de estudios y prácticas indicadas por profesionales de la salud. El área resume que se trata de aquellas órdenes que fueron realizadas tradicionalmente en papel y comenzarán a efectuarse a través de plataformas digitales. La iniciativa contempla un período de adecuación para el registro de las plataformas digitales de 180 días y garantiza el acceso a medicamentos y prácticas médicas, tal cual sostiene la cartera. El asunto es que este recurso ya se venía implementando por parte de algunas prepagas y obras sociales, como Pami y Osep. Ahora se debe avanzar en que el resto de las prestadoras pueda contar con la plataforma digital que se requiere para la implementación. No sólo eso, sino que pese a que se le reconocen beneficios, como mejorar el acceso y la trazabilidad de los medicamentos, la estrategia cuenta con un gran desafío: la accesibilidad a recursos digitales y la conectividad.
En Mendoza, la implementación será paulatina, tal cual han asegurado desde el Ministerio de Salud de la provincia. Es que han señalado que las jurisdicciones tienen cierta autonomía al respecto y en el caso de Mendoza tiene su propia legislación por lo que hará sus propios procesos.
Cómo se aplicará la receta electrónica en Mendoza
Ya se aplica en algunos efectores públicos que tienen más avanzada la digitalización, concretamente, implementada la historia clínica digital. Paulatinamente irá ampliándose al resto del sistema. Uno de los desafíos es que hay zonas más alejadas en las que la conectividad no es buena o hay menos desarrollo. Todo esto se da en paralelo con una estrategia del Ministerio de Salud local, que ya había comenzado a fortalecerse en la gestión anterior y que apunta a avanzar en la digitalización del sistema de salud.
La idea del Ministerio local es contar con un sistema propio en el que confluya la información y que se vincule con otros sistemas. Es decir que cada obra social o prepaga tendrá su plataforma para la emisión de recetas, y la intención es que los distintos sistemas dialoguen entre sí. Es parte de los requisitos estipulados por Nación: que los sistemas que se utilicen sean “interoperables”.
“El año pasado adherimos a la ley 27.553 a través de una ley provincial y al tener nuestra propia ley nos estamos obligados a cumplir los plazos de Nación(...) tenemos nuestros propios plazos que están enmarcados en todo lo que es el plan de transformación digital, y dentro del cual uno de los puntos importantes es la prescripción”, señaló a Los Andes Cecilia Orueta, directora de Farmacología de la provincia.
Luego se espera pasar de los efectores públicos a los privados. Orueta explicó que primero se utilizará para medicamentos de venta controlada, los estupefacientes y psicotrópicos. En otra etapa se espera avanzar en la incorporación del resto del vademecum en función de la integración con los sistemas.
José Lodovico, presidente del Círculo Médico de Mendoza (Cimesa) detalló cómo será el sistema: “Ante una solicitud de una receta, yo como médico tengo que ingresar a la plataforma correspondiente. La plataforma tiene que tener mi firma legal y cuando yo hago la receta, la receta está firmada legalmente, es una firma electrónica: a partir de allí el paciente puede disponer de la receta entrando a la plataforma o directamente la entidad la distribuye con la farmacia, eso es individual, cada entidad lo hará de forma igual o distinta, son distintos programas, no hay un programa nacional”. En definitiva, la receta estará disponible en un sistema digital a través de una red por lo que el paciente podrá retirarla en cualquier farmacia.
Nueva página web
En ese marco, el Ministerio de Salud de la Nación lanzó una página web para que los usuarios puedan evacuar dudas al respecto.
Para acceder, se ingresa a través de una solapa con el nombre “Receta electrónica” que se encuentra en el sitio oficial del Ministerio. Allí se encuentra información detallada sobre la implementación segmentada, ya que tiene información general y específica para la comunidad, farmacias y profesionales de la salud. En la página también se ofrecen instructivos y se describen requisitos de inscripción, normativas, gestión de trámites, entre otros datos de interés.
Además, el área informó que creó distintos espacios de consulta con modalidad presencial para las provincias, y para la comunidad una línea telefónica 0800 (0800-222-1002), y una casilla oficial de correo electrónico receta@msal.gov.ar.
Describe que se trata de “un avance hacía la digitalización del sistema de salud que simplifica los procesos administrativos y facilita la trazabilidad del circuito de prescripción y dispensa de medicamentos”.
En tanto, el Ministerio de Salud de la Nación tiene en agenda -para esta semana- comenzar un plan de capacitación con las distintas jurisdicciones para avanzar en la adecuación y registro de plataformas digitales, de profesionales y de recetarios. Se informó que las actividades se realizarán a través de conversatorios y talleres.
Reparos
En un comunicado, los médicos a través de Cimesa, enumeraron ciertas cuestiones que consideran que podrían afectar la calidad de la atención médica y la autonomía profesional de los médicos.
“La receta electrónica puede ser una herramienta valiosa para mejorar la atención médica en Argentina. Sin embargo, su implementación debe realizarse de manera responsable, priorizando la calidad de la atención, la autonomía profesional y el bienestar de los pacientes”, afirman.
Entre los aspectos que señalan como probables dificultades o desafíos menciona:
- La brecha digital
- La falta de una reglamentación nacional clara sobre la implementación
- La dependencia excesiva de plataformas tecnológicas
- La despersonalización de la atención
En ese marco, la entidad instó a las autoridades a avanzar en este proceso de manera responsable.
