La calle Guardia Vieja, en la zona de Vistalba (Luján de Cuyo) y que vincula la ruta Panamericana y la parte oeste de ese departamento con Chacras de Coria y la ciudad de Luján es uno de los grandes pulmones verdes de la zona. Su imponente y tupida arboleda no solo le da una identidad paisajística única al lugar sino que, además, asegura mejores condiciones desde el punto de vista climático, de la calidad del aire (y de vida) y desde la biodiversidad también.
Por ello mismo fue que los recientes trabajos de la Municipalidad de Luján de Cuyo pusieron en alerta a un grupo de vecinos cuyas casas y barrios se encuentran a la vera de esta concurrida e importante vía. Y es que durante los últimos días la comuna dio inicio al retiro y la tala de una considerable cantidad de árboles ubicados al costado de Guardia Vieja (52 para ser precisos).
Según indicaron desde la Municipalidad, se trata de trabajos autorizados por la Dirección de Recursos Naturales de la Provincia e involucra a ejemplares que están enfermos y decrépitos. Incluso, desde la comuna destacaron que es todo parte del plan de mejoras de la zona y se comprometieron a plantar 3 árboles nuevos por cada uno retirado.
No obstante, los vecinos del lugar insisten en que son especies que no estaban en malas condiciones, al tiempo que sospechan que puede haber algún interés de fondo como, por ejemplo –y según detallan- la construcción de nuevos barrios privados en la zona.
Denuncian tala indiscriminada
Gabriela vive en uno de los barrios que tiene entrada por calle Guardia Vieja, en ese sector de Luján de Cuyo. De acuerdo a sus propias palabras, el jueves salió de su casa y, cuando regresó por la noche, faltaba toda la “cortina verde” que estaba al frente del barrio.
“Me encontré con que no quedaba ninguno de todos los árboles que estaban uno al lado del otro, los habían quitado a todos. Así fue durante los últimos días con varios árboles de calle Guardia Vieja”, destaca la comunicadora social, quien agregó que los árboles que estaban en la entrada de su barrio estaban sobre el margen este y que tenían hasta un canal que los regaba. “No eran árboles decrépitos, como nos dijeron desde la Municipalidad”, destacó Gabriela.
Ante esta situación, y viendo que la comuna avanzó con la tala de forestales, un grupo de vecinos y vecinas de Luján de Cuyo (de calle Guardia Vieja, inmediaciones e, incluso, otros que suelen utilizar esta vía para despejarse y hacer actividad física) se autoconvocaron para “pedir explicaciones al Municipio de Lujan de Cuyo por la tala indiscriminada de árboles”, según ellos mismos explicaron.
En tal sentido, pidieron a la comuna que presente la resolución de aprobación de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) y la categorización del proyecto por el cual se está llevando adelante la tala. Además, sostienen que hubo un incumplimiento del Acuerdo de Escazú. “Ningún vecino tuvo acceso a la información antes ni durante el momento de extracción. Nunca se nos avisó o notificó que iban a proceder con la tala y nos enteramos cuando ya había empezado y, en muchos casos, terminado ya”, resume Gabriela.
Otro de los reclamos tiene que ver con que, según sostienen, la autorización era para erradicar 52 ejemplares de sauce, aunque se avanzó también sobre álamo y aguaribay.
“El municipio eleva la solicitud de erradicación a Recursos Naturales por estado ‘decrépito a seco’. Pero vecinos y profesionales afines constataron que gran parte de los erradicados estaban vivos y en buen estado, sin presentar riesgos públicos”, se explayaron en la presentación. En ese sentido, agregaron además que se observó un incumplimiento de la resolución provincial que exige que haya un ingeniero o ingeniera agrónoma forestal a cargo del retiro de árboles.
“Los vecinos consideramos que se ha destruido un patrimonio (autodefinido por los vecinos) natural, cultural y paisajístico característico de Luján de Cuyo. La resolución de Recursos Naturales exige la reforestación con 3 especies por cada árbol erradicado, y la especie propuesta por la Municipalidad es Celtis australis, especie de segunda magnitud (altura muy por debajo de los previamente existentes), y porte globoso, lo que no respeta ni valora el paisaje histórico. Además, los vecinos consideramos que la reposición de sólo 3 especies no es suficiente para compensar el impacto, por lo que se solicitó una restauración ecológica que amplíe la medida de compensación”, detallaron.
Por último, se refirieron al gran impacto que generará la pérdida de biodiversidad asociada a los forestales, si se tiene en cuenta que son hábitat de muchas especies importantes de aves y micromamíferos.
“Si bien yo no vi ni hice una evaluación previa de los árboles, te puedo decir que por el estado en que estaban los fustes (NdA: madera del árbol sin considerar la corteza) se veía que estaban en buen estado. Y eso es algo que se termina de confirmar con las declaraciones de los vecinos que veían esos árboles todos los días. Eran ejemplares vivos, con una tendencia de caída de hojas dada por falta de riego”, destacó a su turno la ingeniera en Recursos Naturales Renovables, Josefina Segura, quien –además- es habitué de la calle Guardia Vieja como usuaria para disfrutar de actividades al aire libre.
“La reunión de los vecinos con la gente de la Municipalidad de Luján de Cuyo fue bastante confusa y hasta un poco contradictoria. Por un lado dicen, que tiene que ver con los estados del árbol. Y, por otro lado, hablan de obras de cloacas y de toda la calle. Al final no sabemos en qué quedamos”, concluyó.
La explicación desde Luján de Cuyo
El jefe de Gabinete de la Municipalidad de Luján de Cuyo, Esteban Allasino, dio detalles de los trabajos que se están haciendo en calle Guardia Vieja y descartó rotundamente que se trate de una “tala indiscriminada”.
“Estamos haciendo un recambio de forestales dentro del marco de arreglos en calle Guardia Vieja. Y en lo que tiene que ver con ello y todo lo referido al cumplimiento de leyes vigentes, se ha cumplido y está todo aprobado y autorizado por la Dirección de Recursos Naturales de la Provincia”, detalló Allasino ante los cuestionamientos vecinales.
El funcionario lujanino destacó, además, que los 52 árboles que se han erradicado estaban “enfermos, deteriorados y en estado decrépito”.
“Todo se está haciendo con la sana intención de mejorar y aumentar la cantidad de árboles. Y es que, por cada uno que se saque, se van a replantar 3 árboles nuevos. Recursos Naturales Mendoza nos autorizó a sacar 52 árboles, que equivale a cerca de 7% del arbolado de calle Guardia Vieja. Por ello, como mínimo, vamos a plantar 156 nuevos, aunque creemos que van a ser más. Porque el replante va a ser en zonas que históricamente perdieron forestales y hace años no tiene”, explicó el jefe de Gabinete lujanino.
Allasino indicó, además, que los árboles erradicados estaban en inminente riesgo ante temporales, fuertes tormentas y viento Zonda. De hecho, agregó que “afortunadamente” y hasta el momento, solo se han reportado daños materiales en la zona por caídas de ramas.
En ese sentido y en lo referido a las especies con que se van a reemplazar las especies erradicadas, el funcionario agregó que se han seguido las recomendaciones de Recursos Naturales. “Ellos sugieren árboles de importante tamaño, pero que se adapten más al contexto de crisis hídrica. En la zona siempre ha habido mucho álamo y sauce, pero se van a plantar acacias y otras especies”, destacó Allasino, quien resaltó que actualmente faltan más de 100 ejemplares en la zona.
Los trabajos en el lugar comenzaron en diciembre del año pasado y la intención es que, en su totalidad, esté terminada para entre octubre y diciembre de este año. De acuerdo a los plazos previstos por la Municipalidad, la intención es que en octubre esté lista 95% de la obra, que incluirá –entre otras cosas- la modernización del alumbrado (tendrá led en las farolas de ambos lados).
“Es parte de toda una obra integral que incluye el drenaje urbano e irrigación de los árboles en zona de calle Guardia Vieja. Se van a hacer, además, cunetas regularizadas, nichos de arbolado y plantación de árboles nuevos. Toda la obra comenzó en diciembre y tiene el componente de agua y cloaca (por primera vez la calle Guardia Vieja va a tener cloacas en el margen oeste). Además se están renovando los acueductos al este y oeste, se van a hacer a nuevos los 8 paradores de colectivos (hoy son postes nomás, pero van a tener refugios) y se va a hacer toda una integración peatonal para que la gente no tenga que caminar por la calle”, destacó Allasino.
En ese sentido, agregó que se trata de una ruta que era provincial y que pasó a manos de la jurisdicción municipal, e hizo hincapié en que la intención es –además- reducir la velocidad de circulación para que se integre al concepto de un parque lineal y vial, con convivencia, orden y ciclovía integrada.
