La Cámara de Ópticas de Mendoza (CADOME) hizo pública durante la mañana de hoy una denuncia que, destacan, es preocupante y que tiene que ver con la situación actual en la provincia. Según denunciaron en un comunicado, se ha advertido un marcado crecimiento ilegal en las tiendas de ópticas que trabajan de manera clandestina y que no adhieren a leyes nacionales y provinciales que rigen (Ley 6.321/95 y decreto 1.388/97), normas que establecen reglas claras para realizar la actividad en estas tiendas y comercios.
“La ley, establece que cada óptica debe contar con un técnico óptico matriculado responsable de la actividad óptica que allí se realice. Además, la ley exige contar con aparatos tecnológicos y materiales que posibilitan una tarea responsable a la hora de confeccionar un anteojo recetado. La misma ley establece que sea el Ministerio de Salud la autoridad de aplicación responsable de controlar a las ópticas, mediante la formación de un ‘Cuerpo de Inspectores’”, detalló la CADOME en un comunicado.
El problema -y riesgo, según advierten- es que ese cuerpo de inspectores es inexistente en Mendoza, lo que ha derivado en que surjan muchísimas ópticas que no se ajustan a la ley. “Sin contar con profesionales ópticos responsables, expenden artículos ópticos, lentes recetados, lentes de sol y lentes de contacto de muy baja y mala calidad y de desconocida procedencia u origen. En esa situación, las ópticas que funcionan ‘a derecho’, lo hacen en notable desventaja competitiva con aquellas que no cuentan con Ópticos Profesionales responsables”, agregaron.
Riesgos para la salud
Según indicaron desde la Cámara de Ópticas de Mendoza, la carencia de estos controles termina por repercutir en la visión y en la salud de la gente.
“El utilizar un anteojo recetado que no cumpla con la graduación prescripta por el médico oftalmólogo y no cumpla con las características de calidad mínima del lente a utilizar, puede causar daños irreparables en la visión de la persona. Tal es el caso del expendio de anteojos de sol sin filtro UV o lentes de contacto estéticas o terapéuticas que se venden ‘sin control’, por páginas web, Marketplace, redes sociales o en ópticas no controladas y clandestinas”, advirtieron desde la entidad.
En ese sentido, desde la CADOME recomendaron a la ciudadanía hacerse atender en ópticas que acreditan el correcto funcionamiento de acuerdo a la ley, al tiempo que solicitaron al Ministerio de Salud, que tome cartas en el asunto ante las reiteradas solicitudes “para que se haga cumplir la Ley en beneficio de la salud visual de nuestra población y de quienes nos visiten”.
El Ministerio de Salud no cuenta con un registro de habilitación para ópticas
En la página web del Ministerio de Salud Mendoza (https://www.mendoza.gov.ar/salud/dependencias/departamento-de-fiscalizacion-y-habilitaciones/documentacion/) hay un listado de habilitaciones que pueden solicitarse y tramitarse para distintos consultorios, centros asistenciales y laboratorios de temas relacionados a la salud.
No obstante, entre las opciones habilitadas no hay ninguna orientada a ópticas.
Hace varios años, en Mendoza y en otras provincias, se prohibió la venta callejera de anteojos recetados. Hasta entonces era muy común encontrar a vendedores ambulantes con esta mercadería exhibida en mostradores y paneles de telgopor. Más allá de la prohibición, esto no significa que -de forma clandestina- no se sigan vendiendo.
La recomendación de los especialistas es, por supuesto, no adquirir tampoco estas gafas que se ofrecen en la venta callejera y ambulante, ya que no cumplen con los requisitos ni garantías sanitarios.