Se estima que en Mendoza cada habitante genera 8 kilos de residuos electrónicos por año. Sin embargo, se recicla solo 1%. Si se toma en cuenta que de acuerdo al censo 2022 Mendoza tiene 2.043.540 habitantes, esto implica que se producen 16.348.320 kilos, o 16.000 toneladas.
Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) son un verdadero desafío para la sostenibilidad del medio ambiente. Su uso se instala cada vez más, en particular el de aquellos vinculados a consumos digitales e informáticos que son la mayoría de ellos. Sucede que tienen un altísimo potencial contaminante y, por ello, los especialistas advierten que no deberían desecharse a la basura como cualquier otro residuo, sino que deben tener un tratamiento especial. De hecho, de ellos se rescatan metales, como oro, cobre y plata, que conforman lo que se conoce como minería urbana.
Sin embargo, el dato de la escasísima proporción de ellos que logra el tratamiento adecuado pone de manifiesto que se está muy lejos de tomar conciencia. De todas formas, quienes trabajan en el asunto reconocen que hay cambios alentadores en los últimos años y de hecho, los municipios han logrado escalar la cantidad de estos residuos que logran rescatar.
La empresa Reciclarg Recycling Technology S.A, que es la que se ocupa de su tratamiento, elaboró un ranking de los departamentos de Mendoza que han logrado rescatar mayor cantidad de residuos este año. Luján de Cuyo se posicionó en el podio, ya que recuperó 8.011 kg. En segundo lugar quedó Guaymallén, con 6.290 kg, luego Godoy Cruz, con 5.200 kg y la Ciudad de Mendoza con $4.988 kg. Le siguen, muy lejos, Maipú con 1.622 kg, Rivadavia con 1.103 y Lavalle con 617.
Desde el centro de reciclado señalan que es un trabajo que llevan adelante desde hace 14 años y que en ese lapso han logrado avanzar en la cantidad que recuperan pero sin embargo no logran superar los objetivos que se fijan.
Desde aquel entonces, Luján ha sido también el departamento mejor posicionado ya que ha logrado recuperar 40.980 kg, le siguen Guaymallén con 37.517, Godoy Cruz con 34.245 y la Ciudad de Mendoza con 34.057.
Cuánta basura se genera
Ese 1% que se recupera, sin embargo, no está muy lejos de lo que se recupera a nivel mundial, que también es muy bajo: tan solo el 3%.
Hay varios factores que inciden en la cantidad que puede recuperarse y que tiene que ver con la conciencia de la ciudadanía respecto de esta necesidad y el compromiso de los usuarios para darle una correcta disposición a estos residuos. Por otra parte el compromiso de la parte pública por generar estrategias, no solo de concientización sino de recuperación adecuada.
Pero más allá de las estrategias también hay otras variables como la cantidad de población que tenga un determinado territorio y el acceso que tengan a la tecnología. También influye el poder adquisitivo ante la posibilidad de adquirir dispositivos o hacer un recambio para descartar los anteriores. De hecho, quienes trabajan en el tema notaron un aumento de los desechos en 2021 lo cual puede interpretarse como una inversión que se realizó durante la pandemia de Covid ante la necesidad de mejorar la conectividad y del acceso a internet.
Mendoza produce prácticamente la mitad de desechos electrónicos que Buenos Aires, donde cada habitante tira de esta “basura” 15 kg por año. Igualmente Buenos Aires queda muy por detrás de uno de los consumidores por excelencia, Estados Unidos, donde se desechan 25 kg anuales por habitante.
¿Por qué no se logra superar ese 1%? “Por un lado creo que es por falta de conciencia y que la gente desconoce el daño que genera el residuo electrónico si va a parar un vertedero”, analizó Farid Nallim, Co-fundador y CEO de Recyclarg, la organización que se ocupa de los residuos que recolectan las comunas entre otras entidades. “Realmente es grande el daño que genera el electrónico en sí, tiene metales pesados que contaminan nuestras tierras o sea que nos estamos comiendo los metales pesados”, agregó.
Otro aspecto que consideró que incide es que lo ambiental no es tan tangible como otras cosas y mencionó que últimamente han surgido discursos, sobre todo de políticos, que cuestionan la existencia del calentamiento global. “En el ciudadano de a pie creo que no se toma todavía tanta conciencia del daño que implica tirar un residuo electrónico a la calle o al camión municipal, que lo termina llevando un vertedero, y creo que en el sector público faltan políticas públicas a largo plazo, que no sean por gestiones”, esgrimió entre las causas. En ese marco, que se designe presupuesto para este fin es un recurso necesario, con el que no se cuenta si no se tiene en cuenta.
Estrategias
Nallim dijo que buscaron aliarse con los municipios para apuntar juntos al objetivo de juntar 20.000 kg por departamento. Parte de esto es avanzar en una fuerte campaña de concientización en la ciudadanía y apuntar a la reutilización y reciclaje de los residuos. De hecho, Recyclarg en una primera instancia busca reacondicionados para dar oportunidad de acceso a los dispositivos a menor costo.
Jorge Gisbert, subdirector de Planificación Ambiental de Luján, contó que trabajan en esto desde 2014. Ese primer año reunieron 4.800 kilos. En 2021 se llegó a 10.000 kg y en 2022 y 2023 hubo una caída y fueron unos 3.000 kg cada año.
“El residuo electrónico tiene en su interior materiales valiosos con valor económico, como plata, bronce, incluso oro y que se tienen que aprovechar para volver a reinsertarlos en los circuitos productivos”, explicó. Pero además, también tiene elementos peligrosos, como metales pesados, gases tóxicos, plásticos, vidrio. “Entonces uno tiene que ser cuidadoso a la hora de desarmar y desensamblar ese aparato, aprovechar lo que se puede aprovechar, tratar con el cuidado que requieren esos elementos peligrosos, que tienen que ir a un gestor ambiental determinado, y reciclar también otros elementos más comunes, como el vidrio y el plástico, en las cadenas de valor correspondientes. Pero si uno lo dispone en un baldío o en un relleno sanitario, se liberan al ambiente elementos muy tóxicos. Un aparato puede tener plomo, gases de mercurio, cosas muy nocivas para el ambiente”, subrayó.
Mencionó que se ha trabajado en una campaña para concientizar al vecino y a lo largo de esta década se han generado más canales de contacto. “Hoy Luján cuenta con una plataforma digital de higiene urbana que se llama Limpiando Luján, donde el ciudadano fácilmente accede, identifica los residuos y ve qué opciones tiene para disponerlos adecuadamente”, destacó. Hay dos opciones para el ciudadano: contenedores de residuos electrónicos fijos en puntos estratégicos del departamento y campañas itinerantes con un camión para que los vecinos se acerquen a llevar sus residuos electrónicos.
En Guaymallén, se inició la parte operativa en 2012, desde cuando han reunido 9.500 kg promedio anual. Juan Correa, director de Ambiente y Energía del departamento, dijo que desde entonces han reunido 35.000 kilos y que parte de ir logrando objetivos es haber sostenido la continuidad de la política.
Hacen campañas de recolección de determinados días para llevarlos y hay programas para sacarlos de los domicilios. Además, junto con la empresa tienen otra acción en escuelas, a la que se han sumado 50. La intención es sacar los aparatos en desuso en los depósitos y otorgarles un certificado libre de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.