La llegada de la pandemia a la Argentina y el establecimiento del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) supuso un radical cambio en el día a día de millones de personas. En consecuencia, uno de los sectores que más sufrió el impacto fue el educativo y dentro de este universo, los estudiantes más vulnerables se llevaron la peor parte debido a las dificultades de las clases virtuales, los problemas con la conectividad y sobre todo porque perdieron el nexo con la institución que los contenía e incluso los alimentaba.
En este último punto, gran cantidad de chicos que recibían la copa de leche –la merienda escolar que consistía en un vaso de leche o una infusión junto a un panificado- perdieron el acceso a ese alimento asegurado. Así mismo, el panorama socioeconómico profundizó las necesidades de muchas familias, por lo que desde la Dirección General de Escuelas se optó por reemplazar la merienda que se daba habitualmente por un módulo alimentario, un bolsón con mercadería y que tiene cerca de diez productos: una caja de leche, aceite, azúcar, cacao, fideos, harina, entre otros. Dicho bolsón se entregó durante el 2020 en las escuelas públicas a los alumnos en situación de vulnerabilidad, según detallaron desde la DGE.
Ahora, con el retorno de la presencialidad a la educación surgió en varias escuelas la inquietud sobre el posible regreso de la copa de leche, o cómo se llevará a cabo teniendo el contexto de pandemia y las reticencias a manipular alimentos debido a la posibilidad de contagios.
La DGE asegura que la copa de leche volverá a la brevedad
Franco Pulido, director de Alimentación Escolar de la DGE, explicó a Los Andes que se espera cerrar una licitación para la compra de leche a fin de mes, con lo cual en abril la copa de leche regresará a las escuelas: “A partir de abril se entregarán durante cuatro días a la semana lácteos con un panificado, que puede ser turrón, tortitas, facturas o sanguche de queso”. Además, señaló que la iniciativa contempla llegar a los estudiantes de los cuatro niveles: inicial y primario (con refuerzo de lácteos); y secundario y adulto (infusión y panificado).
A su vez, el funcionario señaló que la entrega de módulos alimentarios continuará a lo largo de 2021: “Entre la última semana de febrero y la primera de marzo el bolsón se entregó en algunas escuelas, pero de los 2 mil establecimientos que tiene el gobierno, se están asistiendo a 1.500 con mercadería”.
Según Pulido, la partida presupuestaria para alimentos en las escuelas fue de $750 millones en 2019; $1.100 millones en 2020 y $1.380 millones lo estipulado para este año. En tanto, remarcó que entre este viernes y el lunes próximo quedará habilitada en GEM la solicitud para que los directivos soliciten al gobierno escolar la copa de leche.
Gabriel Sciola, subsecretario de Administración de la DGE, explicó que en el mes de febrero se entregaron 110 mil módulos alimentarios y se prevé que en marzo se reparta la misma cantidad. Además, remarcó que se está relevando los alumnos que recibirán los alimento: “Estamos haciendo un chequeo de listas de la cantidad de escuelas y la cantidad de chicos, porque, por la bimodalidad, aún no sabemos cuántos están cursando fehacientemente de manera presencial y cuántos de manera virtual”.
“La merienda se entregará por protocolo, es decir que irá en una bolsita individual para cada uno de los niños. Para esto están destinados unos 130 millones de pesos mensuales”, especificó.
Qué dice el SUTE
Desde el Sindicato Unido de los Trabajadores de la Educación mostraron una versión opuesta a la del gobierno. Laura Espeche, vocera del gremio, aseguró que “Con la excusa de la pandemia para no manipular alimentos, el gobierno retiró el año pasado la copa de leche, ese refuerzo alimentario, pero en las escuelas es necesaria. Dijeron que ahora van a hacer lo del año pasado de armar bolsones de mercadería para entregarlos a las familias, pero no tenemos respuestas de esto ni de otros temas”.
“El refuerzo alimentario es importantísimo ya que las familias de los estudiantes de escuelas públicas están atravesando una crisis gravísima, la realidad es bastante cruda”, detalló.
“La promesa del gobierno fue reemplazar la copa de leche con bolsa de alimentos como se hizo el año pasado, pero durante el 2020 se les entregó solo a algunas familias y con una ración alimentaria escueta”, cerró.
El testimonio de los docentes
Un directivo de una escuela de Las Heras, que pidió reserva de su nombre, indicó que en el mes de febrero hicieron entrega de la bolsa de mercadería a casi la totalidad de los alumnos: “Entregamos los bolsones a casi el 92% de los estudiantes. Algunas familias recibieron más de una porque son varios hermanos en la escuela, pero a veces vamos distribuyendo según las necesidades que vemos en cada caso. La mercadería no es cuantiosa, pero como nos dijo una madre ‘es una ayuda’”. Esta docente remarcó que no tenían información sobre el regreso de la copa de leche.
En tanto, en un establecimiento de nivel inicial y primario de Rodeo del Medio, una docente explicó que los bolsones no son para todos los alumnos, sino para los más necesitados. Además, reconoció que muchas veces les toca a los maestros decidir quién se lleva la mercadería: “Antes era por una planilla, pero ahora hay veces que al docente le toca la tarea ingrata de decidir, teniendo en cuenta que trabajamos en una zona muy postergada y con necesidades”, remarcó. Esta docente, que tampoco quiso dar su nombre, contó que sí recibieron información sobre el regreso de la copa de leche a partir de este lunes.