Luego de que la semana pasada se diseminaran los contagios de Covid-19 en lo que desde el Gobierno denominaran el “clúster Salud”, que involucra a trabajadores de hospitales, clínicas y sanatorios de Mendoza, la preocupación y los reclamos del sector no se hicieron esperar. Sólo en el hospital Lagomaggiore, la semana pasada la Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud (Ampros) contabilizaba a 19 trabajadores infectados y 58 aislados; mientras que los profesionales del lugar denunciaron que no se estaban cumpliendo los esquemas de trabajo de 14 días de guardia por 14 de descanso.
Luego de esta escalada de contagios -con polémica incluida-, el Ministerio de Salud difundió un memorándum donde se disponía el regreso del esquema “14 por 14” en los hospitales más importantes de Mendoza. Consiste, en la medida de lo posible, en dividir a los profesionales de distintos servicios en dos grupos y que trabajen dos semanas seguidas, para luego descansar otras dos.
Así se han organizado en el Lagomaggiore y en el Central durante los últimos días. El detalle es que es una realidad compleja y cambiante (como la pandemia en sí) y no todos los servicios pueden garantizar esta división y este esquema. Pero, de a poco, lo intentan aplicar.
“Todavía falta mucha gente en el hospital porque siguen dando positivos algunos médicos y personal de salud. Lo único que estaba funcionando completo era Maternidad y Neonatología, pero tuvieron que disminuir porque dieron positivos algunos casos en ese sector. Los que estamos yendo, la mayoría estamos haciendo el 14-14. Pero los demás sectores siguen sin funcionar”, indicó un grupo de trabajadores del mencionado hospital, quienes además lamentaron que haya tenido que hacerse todo el “ruido” público para retomar este esquema. “Hay algunos servicios que no han podido implementar el esquema porque no les da el personal y tienen a muchos aislados o positivos todavía”, advirtieron.
Entre los sectores que están cumpliendo con el “14-14” se destacan Neurología y Ginecología. No obstante -y según detallan- las áreas de Cirugía, Urología y Traumatología están cerradas; mientras que Clínica Médica está restringida y con poco personal. “A raíz de un contagio en la Maternidad del Lagomaggiore, se ha tomado la directiva de que Maternidad e Infancia definan las derivaciones. El hospital solamente va a atender los partos de menos de 32 semanas y el resto lo van a derivar”, indicó la titular de Ampros, Isabel Del Pópolo.
El regreso del esquema “14-14”
En el hospital Central -otro de los más importantes de la provincia- también se ha retomado en los últimos días el esquema de 14-14, aunque aquí el panorama no es tan crítico ya que han tenido a dos médicas contagiadas desde el inicio de la pandemia. Al igual que el Lagomaggiore, en este nosocomio el esquema de división en dos grupos de trabajo se aplicó a mediados de marzo, pero luego se levantó con la intención de poner al día cirugías programadas y otras prestaciones. No obstante, durante la última semana se retomó el esquema 14-14.
En el Central dicha metodología también se aplica en aquellos sectores que tienen el personal suficiente para hacerlo. Pero el servicio de Infectología no es uno de ellos. Y es que cuenta con sólo tres infectólogos, quienes trabajan con todos los recaudos indispensables para que no se registren contagios.
“Por ahora se ha implementado el ’14-14′ con el personal destinado a Covid-19, aunque el pedido de Ampros es que sea para todo el personal de salud en la provincia. Además, se ha conseguido que a estos profesionales se les haga el test serológico antes de ingresar a cumplir su guardia”, señaló Del Pópolo.
En tanto, desde el Ministerio Salud, Desarrollo Social y Deportes destacaron que se dispuso oficialmente el regreso al mencionado esquema para que existan profesionales de reserva en caso de que otros se contagien.
Descartan colapso en el Central
Las estadísticas son más que cambiantes en el contexto de pandemia. En sintonía con el ritmo y la evolución del coronavirus, la ocupación de las camas hospitalarias también es dinámica, por lo que es difícil fijar un número exacto de camas ocupadas y disponibles en tiempo real.
Sólo por poner un ejemplo, el lunes el hospital Central tenía 11 casos confirmados y 20 sospechosos internados en sus salas; mientras que ayer al mediodía quedaban hospitalizados cinco de esos confirmados, al tiempo que habían ingresado tres más.
En la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) también hasta ayer por la mañana había cuatro pacientes internados. El detalle es que en ese efector, cerca de 90% de los pacientes contagiados que llegan lo hacen en buen estado.
Si bien en las últimas semanas se incrementaron las intervenciones e internaciones, desde el establecimiento descartaron que estén cerca del colapso o del desborde. De hecho -y siempre con los números actualizados hasta el mediodía de ayer-, sólo contaba con cuatro plazas ocupadas de las 30 camas disponibles para pacientes críticos.
Y con un agregado fundamental: cuentan con los recursos ya listos para estirar la cantidad de camas de la UTI a 80, todas con respiradores.
En total, el Central cuenta con cerca de 400 camas para Covid-19 y “no Covid-19”. Además, el nuevo edificio del hospital es el que se ha destinado a enfermedades respiratorias.
“Tiene un ritmo mucho mayor al de antes, ya que a cada paciente que ingresa con una patología de ese tipo se lo recibe como si fuese Covid-19 hasta que se descarte. Pero bajo ningún punto de vista el hospital está colapsado o cerca de estarlo”, aclararon desde el Central.
Cuidados y controles
Además, especificaron que los cuidados preventivos y controles son muy rigurosos entre los mismos trabajadores, detalle que ha sido clave para que ninguna de las dos profesionales que se desempeña en el lugar y dio positivo en Covid-19 en estos meses haya contagiado a compañeros o pacientes del lugar.
También se ha montado un sector de triage al ingreso del establecimiento ubicado en calle Alem de Ciudad, con la intención de “filtrar” a quienes llegan con cuadros respiratorios. Allí se ha distribuido a técnicos, odontólogos y otros profesionales que han tenido algo de liberación de sus servicios.
Reacondicionan un predio de la Dinaf para “centro de externación”
Dentro de la estrategia encarada por el Ministerio de Salud para descomprimir los hospitales y reservar las camas de estos efectores para quienes estén en una situación más compleja en su tránsito por el coronavrius, el Gobierno ha dispuesto distintos puntos para pacientes leves o en proceso previo al alta.
La intención es ir descomprimiendo las camas hospitalarias y que estos pacientes asintomáticos o en recuperación sean derivados a módulos u hoteles dispuestos especialmente para ello.
En este sentido, Salud y la Municipalidad de Godoy Cruz firmaron ayer un convenio para reacondicionar un predio de la Dinaf -ubicado en el Corredor del Oeste y Armani- y que este espacio también sea destinado a un “centro de externación”.
La Provincia invertirá dos millones de pesos para las obras de recuperación y se estima que estará listo en los próximos 45 días. Este espacio se sumará a los módulos del Lencinas, del hospital Metraux, del Universitario y de los consultorios externos del hospital de Luján.
Acuerdos entre trabajadores y el Gobierno
La titular de Ampros, María Isabel Del Pópolo, destacó que siguen avanzando en las conversaciones con el Ministerio de Salud. Luego de mantener una reunión vía Zoom durante la mañana de ayer, la referente de los profesionales enumeró algunas medidas en las que han llegado a acuerdos.
Además del recupero del esquema de 14-14 para trabajar en turnos, Del Pópolo indicó que también se ha avanzado en la regularización de los primeros 120 profesionales que se encuentran en interinato.
“El compromiso de la ministra (Ana María Nadal) es que para fines de 2021 no exista la precarización y estén todos los interinos regularizados”, detalló Del Pópolo.
Durante la reunión, desde la Asociación de Profesionales también expusieron su preocupación por situaciones de hacinamiento en algunos hospitales (especialmente a la hora de comer) y solicitaron que se revisen los convenios con las empresas de limpieza para optimizar los controles y las medidas, entre otras cosas.
