Desde la madrugada, Paula Gutiérrez y Luciana Gómez, ambas nietas de inmigrantes que se radicaron en Mendoza, hicieron una larga fila para acceder al turno y obtener la ciudadanía española en el consulado de la calle Agustín Alvarez, en Ciudad como indica la Ley de Nietos o Ley de Memoria Democrática.
Si bien las puertas abrieron a las 8, desde la noche anterior muchos decidieron aguardar con carpas, reposeras y el infaltable mate.
“Así y todo estamos lejos de que nos otorguen un número porque sólo dicen que atenderán a los primeros 50″, señalaron a coro las jóvenes, que no se conocían. Paula y Luciana coinciden en algo: el país no tiene futuro y pronto, si acceden a esa documentación tan anhelada, probarán suerte en alguna ciudad de España.
“Tengo 34 años, soy soltera, no tengo hijos y mi mamá falleció. Como empleada de comercio y emprendedora, no me alcanza. No veo futuro. Esta es la oportunidad que tengo para poder irme”, reflexionó Paula, sentada en el cordón de la vereda.
Un cálculo estimativo indica que eran unas 300 personas las que a esa hora esperaban para ser atendidas. La mayoría eran mendocinos, pero la sede consular ibérica en nuestra provincia también atiende los trámites de personas de San Juan y de San Luis. Asi, se espera que la demanda sea importante durante los próximos días
Los postulantes resistieron, incluso, el frío de la noche. Muchos, como Paula y Luciana, se hicieron confidentes.
“Estamos número 15 de la tercera lista. Nadie sale a aclarar qué va a pasar con los que quedamos fuera de los primeros 50 y estuvimos acá desde la madrugada. Entran de a uno o de a dos y las demoras son eternas. Todo está muy desorganizado”, se quejó Luciana quien asegura que su proyecto, a futuro, es irse: “En el país ya es muy difícil sobrevivir. Soy estudiante y trabajo en un estudio contable, pero tengo el deseo de crecer y acá no puedo. En la Argentina vivo el día a día y no es justo”, opinó.
Son voces del primer día en que el Consulado de España en Mendoza entregó turnos para hijos y nietos de españoles que quieran obtener la ciudadanía amparándose en la llamada “ley de Nietos” que permite a los descendientes de emigrados españoles acceder a la nacionalidad de sus abuelos, muchos de los cuáles dejaron España en tiempos de la guerra civil o, luego, durante la larga dictadura de Francisco Franco.
El sistema implementado por el Consulado hace que a primera hora se entreguen 50 números y, luego, se comience con la recepción de las solicitudes. Según dispone la ley, habrá un plazo de dos años para presentar la documentación.
Lo que sucedía en Mendoza era un reflejo de lo que pasaba en otras sedes consulares. Por ejemplo, según el diario La Capital, en Rosario pasaron de recibir 100 consultas diarias a 250, ya la semana pasada.
Los beneficiados
La posibilidad de acceder a la ciudadanía es para quienes hayan nacido fuera de España y tengan o hayan tenido padres o abuelos españoles que perdieron o renunciaron a la nacionalidad como consecuencia de haber sufrido exilio por razones políticas, ideológicas, de creencia y/o de orientación e identidad sexual. También a quienes hayan nacido fuera de España -de madre española- que haya perdido la nacionalidad por haberse casado con un extranjero antes del 29 de diciembre de 1978.
Asimismo alcanza a personas mayores de edad que sean hijos de padre o madre españoles a quienes se les haya reconocido la nacionalidad de origen en virtud del derecho de opción de la Ley 20/2022 (Ley de Memoria Democrática) o con la Disposición Adicional 7º de la Ley 52/2007 (Memoria Histórica).
“Amo mi país”, exclamó, con la mano en su corazón, María Fernanda Macri, que tiene 50 años, vive en Carrodilla, Luján de Cuyo, y se instaló a las 4 de la mañana frente a la sede consular, para poder obtener un turno y lograr que sus hijos, todos descendientes de inmigrantes españoles, puedan probar suerte en ese país.
Con su carpeta aferrada, esta docente pidió el día en su trabajo para poder ayudar a sus tres hijos. Dos de ellos son profesionales y el otro estudiante y todos tienen el mismo deseo: partir lo antes posible “porque la Argentina no da para más”, dice.
A pesar de haber permanecido durante horas, Fernanda no tenía al mediodía una respuesta clara. Ningún empleado ni autoridad del consulado salió para aclarar si los que quedaron afuera del listado de los primeros 50 postulantes debían regresar en las próximas horas.
Pese a estar desde las 4 de la mañana, Fernanda llegó tarde para ser atendida. “Tengo el número 84 y van por el 16″, dijo a Los Andes, resignada. Y agregó: “Si me voy nadie me asegura que mañana o más tarde tendré mi lugar. Nadie nos dice nada”.
Los Andes intentó durante todo el día obtener información oficial de la repartición diplomática, pero, hasta el cierre de esta nota, había sido imposible lograrlo.
Nieto de inmigrantes españoles, Mario Gómez trabaja de manera independiente y ya probó suerte afuera, en Estados Unidos. Ahora busca volver a sus orígenes.
“Me fue bien, pero claro, no estaba en regla. Ahora estoy haciendo todo para poder partir lo antes posible. Voy a armar mi vida en otro lado porque estoy cansado de remarla. Veo que en la Argentina los ricos seguirán siendo ricos y nosotros, la clase trabajadora, cada vez más empobrecidos”, sostiene Mario.
Qué se necesita para sacar la ciudadanía española
Para información sobre requisitos y documentación para sacar la ciudadanía española, hay que ingresar a la página web www.exteriores.gob.es y de ahí dirigirse al apartado de Embajadas y Consulados y posteriormente seleccionar: Argentina > Mendoza.
Los interesados deben asistir al consulado español en Mendoza, ubicado en Agustín Álvarez 455, de la ciudad de Mendoza, a partir de las 8.