Durante el pasado fin de semana en Mendoza se repitió casi sin descanso en partes oficiales y en grupos de WhatsApp un número: el 98. Esa cifra identifica al paciente con coronavirus que desató una cadena de contagios que involucra a más de 100 familiares, amigos y compañeros de trabajo, la mayoría con residencia en Maipú.

El famoso “98” es un hombre de 37 años que trabaja en el área de distribución de la bodega Viejo Viñedo, del grupo RPB (carril Rodríguez Peña, en Coquimbito) donde se envasan los vinos ‘Uvita’ y jugos ‘Baggio’.

Para el Gobierno provincial el paciente cero en esta cadena fue alguno de los transportistas que entran a esa fábrica, y que circulan por lugares con el virus activo entre la comunidad, como Chile o Buenos Aires.

Por el momento son tres los trabajadores de RPB, todos operarios, infectados con Covid-19, además del paciente de 37 años hay dos hombres de 47 y 52 internados en el hospital Español. Si bien el caso 98 fue el primero en ser detectado, no se puede establecer cuál de los tres fue el nexo local cero.

Lamentablemente, la emergencia sanitaria “saltó” las paredes de la bodega maipucina y llegó a la comunidad, provocando una segunda cadena de contagios que preocupa y que ya lleva otros seis casos detectados y más de 100 personas en investigación epidemiológica.

Asados prohibidos en cuarentena, la génesis del alerta actual

Cuando el test en el trabajador de 37 años, domiciliado en Luzuriaga, dio positivo los peritos que rastrean los nexos epidemiológicos se encontraron ante una tarea titánica. El hombre infectado había sido parte de muchos asados y reuniones con más de 10 personas. Ante esta violación, el Ministerio de Salud de la provincia radicó una denuncia penal en la Oficina Fiscal 10.

“Está la situación laboral y la social. Por un lado se está investigando todos los nexos de la bodega y por otro el del aspecto social. Como tres de sus amigos han dado positivo todo conduce a una juntada que se ha dado entre el 4 y el 5 de junio donde todavía estaba en pleno aislamiento preventivo obligatorio”, explicaron a este diario desde ese ministerio.

Algo para remarcar es que el “98” desde un principio dijo la verdad sobre sus movimientos y contactos durante los días previos a enterarse que portaba el virus, aun sabiendo que había infringido la cuarentena. Las mentiras de los casos positivos para “cubrir” a amigos y evitar sanciones es la mayor dificultad con la que se encuentran los peritos que buscan encapsular a la población en riesgo.

Cuando el caso salió a la luz, se encendió la alarma en Luzuriaga: dos pacientes con Covid-19 de los confirmados residen en ese distrito (uno en el barrio González Galiño y otro en calle Rawson), aseguraron desde el municipio.

Además, varios de los jóvenes aislados y en observación son del barrio Ferroviario y de calle Castelli. Esto marca un gran conglomerado en peligro focalizado en el centro de Luzuriaga.

Si bien la segunda cadena de contagios que nació en la bodega está centrada en Maipú, los casos no se limitan a ese departamento. “Una joven de 22 años que ayer dio positivo es de Guaymallén”, confirmaron autoridades sanitarias.

Nueve casos y más de 100 sospechosos

Los contagios en la fábrica “parecen estar controlados”, analizaron desde el ministerio de Salud. El problema ahora es la ramificación hacia el entorno de los trabajadores de la bodega, sobre todo del caso 98.

Los reportados como positivos de la empresa Baggio son tres: los trabajadores del sector de envasado de 37, 47 y 52 años, internados en el hospital Español.

Respecto a los casos vinculados al “98” y los asados ilegales son seis: tres jóvenes de 28, 26 y 22 años, aislados en el hospital de Maipú. Y otros tres hombres de 34 (en el Español), de 33 (Lencinas) y 34 (hospital privado).

Para hoy se esperan los resultados de otro grupo de jóvenes que estuvieron en estas juntadas durante la cuarentena.

Situación en el distrito maipucino

Las autoridades municipales contaron a Los Andes que ya desinfectaron las zonas de los dos pacientes confirmados y que esperan conocer los resultados de los análisis del resto de los involucrados para continuar con el cronograma de prevención en la vía pública. Aunque esta mañana los vecinos de los barrios mencionados advirtieron el trabajo de camiones sanitizantes.

“El municipio nunca disminuyó las desinfecciones ni los controles en los comercios durante toda la cuarentena. Desde la etapa más rígida se viene manteniendo un esquema de trabajo igual al de ahora”, remarcó el delegado municipal de Luzuriaga, Fabricio Ruggeri.

“Ahora estamos a la espera de los resultados informados por el ministerio da Salud para focalizar aún más los trabajos preventivos”, agregó Ruggeri.

Los vecinos de Luzuriaga están asustados. Los grupos de WhatsApp de los barrios “explotan” con mensajes alarmistas, en muchos casos con información falsa. Lo cierto es que lo único beneficioso y útil es extremar las medidas preventivas. “Pedimos a los vecinos que no pierdan la calma y que respeten los protocolos en los comercios, uso de tapabocas e higiene en sus hogares”, concluyó el delegado distrital.

Mendoza cuenta con 108 casos confirmados. Son 43 casos importados –gente que ha llegado de otros países–, 58 por contacto estrecho con alguien que vino de otro país o dio positivo de COVID-19 y 7 en investigación epidemiológica.