Varones que se perciben como tales, identificados como varones cis, y adultos de mediana edad son quienes están impulsando la epidemia de Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) en Mendoza. Estos dos grupos, ya sea si se considera por identidad de género como por edad, son los que reúnen mayor proporción de las infecciones diagnosticadas este año.
Hasta el 15 de septiembre de este año se diagnosticaron 233 nuevos casos de VIH en Mendoza. De ellos, 37 evolucionaron a Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Este es la etapa en que la infección por VIH afecta gravemente el sistema inmunitario, aunque no todas las personas con el virus la desarrollan.
Lo que se observa es un ascenso constante de los contagios entre personas de mediana edad y los nuevos casos están empujados sobre todo por varones cis, que son 77% de los diagnósticos de este año, es decir, casi 8 de cada 10. Estos incluyen varones con prácticas heterosexuales como homosexuales.
Los varones cis son los que más casos reúnen y son 181 sobre el total. Se trata de una proporción similar a la del año pasado, cuando fueron 78,2%, los dos mayores registros desde 2010.
En segundo lugar quedan las mujeres cis (que se perciben mujeres), con 51 notificaciones y un caso de una mujer trans. No hay casos de varones trans ni personas de genero no binario este año y el 100% de los casos se contagiaron por transmisión sexual.
Los datos fueron elaborados por el Observatorio Epidemiológico del Programa de Respuesta al VIH del Ministerio de Salud de Mendoza y corresponden a personas con residencia en la provincia. Hoy es el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, ocasión en la que se busca poner el tema en agenda para generar conciencia.
Si bien esta infección cargó durante muchos años, sobre todo en sus inicios, con el estigma de estar asociada a prácticas de varones homosexuales, va ganado terreno en otros segmentos. Incluso, en Europa se advierte que alrededor de 30% de las infecciones corresponden a personas heterosexuales, según la Agencia Europea para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC).
De todas formas, en Mendoza, si se toman las prácticas sexuales de los afectados, 6 de cada 10 fueron prácticas sexuales entre varones cis (58,5%), relaciones gay, mientras que 4 de cada 10 (38,7%) fueron heteronormativas (varón-mujer). Asimismo este último segmento viene en baja si se toma en cuenta que en 2010 eran 60,8% de los casos.
En cuanto a la cantidad de nuevos contagios por año, el doctor Vícto Bittar, titular del programa, explicó que se registra un periodo de meseta desde hace varios años y para este se espera un número similar o quizás levemente superior al de 2022, cuando al registro le faltan cuatro meses.
Grupos con más impacto
Este año a mujeres cis corresponden 21,9% de las notificaciones, con una tendencia lenta al descenso. Sin embargo, el doctor Victor Bittar, titular del mencionado programa, dijo que la relación entre la cantidad de mujeres y varones con la infección es más alta en Mendoza que en el resto del país.
En la provincia, se diagnostican tres varones (3,5) por cada mujer, mientras que a nivel nacional esa relación es de 2,2, expresó. Es decir que en Mendoza los varones son el triple que las mujeres y en el promedio nacional son el doble.
El grupo más afectado es el de los adultos jóvenes, de entre 30 y 49 años. Ellos presentan la mayor proporción de nuevos casos sobre el total de nuevos notificados del registro histórico. Son 6 de cada 10 nuevos diagnósticos. Entre quienes tienen una vida sexual activa, es el grupo que ocupa el primer lugar y supera la suma de todas las demás franjas etarias, en tanto juntas reúnen 95 diagnósticos versus los 138 informados en la mediana edad. Así, reúnen el 59,2% de los casos.
“Es la edad más importante de actividad sexual de la población -dijo Bittar- pero lo que se toma para establecer la edad es la del momento del diagnóstico y hay que tener en cuenta que desde que se infecta hasta que se manifiesta pueden pasar varios años y por eso pedimos que la gente se testee con mayor frecuencia, ya que eso puede reflejar que hay personas de menor edad con VIH”.
Comentó que hay 140.000 personas en Argentina con VIH y 13% desconoce que lo tiene. Por eso hay que promover el testeo a todas las edades y saber que puede hacerse todo el año.
Por el contrario, sobre el mismo total, baja la proporción de contagios entre los jóvenes de entre 15 a 29 años y mayores de 60 años, lo que puede atribuirse a mayor acceso a información, una mayor concientización y más acceso a diagnóstico,
En segundo lugar afecta a quienes tienen entre 15 y 29 años, ya que fueron 64 las personas diagnosticadas con esa edad. En tercer lugar quedan quienes tienen entre 50 y 59 años, con 27 diagnósticos y luego los mayores de 60 con 4.
En particular se destaca un notorio descenso entre los mayores de 60 años, segmento que pasó de ocupar 6% del total de nuevos diagnósticos los últimos años a 1,7% en 2023.
La edad promedio del diagnóstico en Mendoza es 37,7 años y la proporción de infectados aumenta a mayor nivel educativo.