Los cardiólogos intervencionistas del país han dispuesto una nueva medida por la cual restringirán la atención. En Mendoza, los médicos adherirán al reclamo y no harán intervenciones programadas este miércoles y jueves.
Se trata de una demanda de larga data y por la cual ya habían tomado una medida similar a comienzos de julio. La disposición fue informada por el Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI) y por ello suspenderán la colocación de stents y las angioplastias programadas y sólo atenderán urgencias. La disposición obedece a la falta de respuestas ante la crítica situación que atraviesan.
La adhesión local fue confirmada por el doctor Joaquín Larribau, secretario de la comisión directiva del CACI y referente en la provincia. “En Mendoza se aplicará. Es una medida que se había dejado en suspenso debido a que el CACI había iniciado conversaciones a nivel nacional”, apuntó el profesional.
“Habida cuenta que el tiempo transcurre y no hubo una respuesta concreta se decidió efectivizar la medida -continuó- la misma consiste en no realizar tratamientos con implantes de stents en forma programada, es decir que en los pacientes se encuentran en condiciones de esperar un turno programado”, detalló.
Pero por otra parte, tal cual había hecho en la medida anterior, llevó tranquilidad: “Se garantiza que aquellas personas con necesidad de recibir tratamiento con stent con carácter de urgencia serán atendidos con normalidad. El CACI desea transmitir tranquilidad en ese sentido”.
El médico aclaró que la medida se limita a los cardiólogos intervencionistas y no afecta a las prácticas de radiología ni electrofisiología intervencionistas.
Por qué reclaman los cardiólogos
Larribau hizo referencia a las causas de esta decisión, tal cual argumentó el CACI. Señaló que el problema es el desfasaje económico que hace cada día más difícil ejercer la especialidad. “Para decirlo vulgarmente, no faltan insumos en el país, lo que falta es dinero para adquirirlos, para el mantenimiento de los equipos y salarios del personal.
La entidad nacional advierte que el sector atraviesa una “tormenta perfecta”, asociada al deterioro inflacionario, el aumento exponencial de los costos para realizar las prácticas médicas y el costo de los insumos.
Los altos costos de sus insumos, las dilaciones en la pago por parte de obras sociales y prepagas y una reducción en el monto que perciben por su atención, se suman a la emigración de especialistas por lo que temen que se vean afectados los servicios y su calidad.
El médico detalló que en Mendoza se hacen 3 a 4 stent y angioplastias por día en el caso de urgencias mientras que en forma programada se realiza un número similar. Es decir que, de aplicarse la medida, unos 8 pacientes verán postergadas sus intervenciones esas dos jornadas.
En tanto, dijo que los insumos que utilizan han tenido un incremento por encima del 400% en un año y señaló que 90% son importados.
Los especialistas advierten que estas intervenciones evitan 200.000 muertes al año en Argentina por problemas cardiovasculares y explican que por lo pronto, obras sociales y prepagas no se han hecho eco de sus demandas.
