Es muy probable que en el momento en que Tina Tosolini y Alicia Cabral regresaban de su caminata hacia la cada vez más popular Cascada del Ángel (Potrerillos) durante última hora de la tarde del domingo ni siquiera hayan imaginado la sorpresa que les deparaba la naturaleza. Pero la vida también está hecha de esos imprevistos, de esas escenas que -probablemente- solamente se registren una sola vez. Y a las dos mendocinas les tocó ser testigos de una de estas situaciones impactantes y mientras practicaban trekking.
Y es que fueron ellas dos las primeras en observar a un imponente cóndor andino recostado en el suelo de esa zona montañosa de Potrerillos. Evidentemente afectado -aunque se desconoce con exactitud el por qué-, el ave no podía emprender vuelo, por más que lo intentaba una y otra vez. Y por ello mismo se la veía un tanto inquieta.
Sin pensarlo dos veces, las dos mujeres que estaban haciendo ejercicio en esa localidad cordillerana de Luján de Cuyo se comunicar al teléfono de emergencia de la Fundación Cullunche (ONG). Y desde allí, tras dar aviso al departamento de Fauna Silvestre de la Secretaría de Recursos Naturales Renovables, se articuló todo el operativo de rescate del ejemplar.
“Luego de que ven al cóndor realizando movimientos extraños a la tarde noche, cuando regresaban del trekking y dan aviso al teléfono de emergencia de la Fundación Cullunche, se nos da aviso a nosotros. Nosotros nos comunicamos de inmediato con el Destacamento de Gendarmería de Los Árboles (camino a Uspallata) y se hizo un primer rastrillaje ayer por la noche (por el domingo). Pero como no había luz, se interumpió hasta primera hora de la mañana de hoy”, explicó el director de Recursos Naturales Renovables, Sebastián Melchor.
A primera hora de este lunes, con los primeros rayos del sol, gente de Fauna Silvestre regresó para rastrillar la zona y fue allí que dieron con el cóndor, que seguía sin poder levantar vuelo.
“Se lo trasladó siguiendo todo el protocolo de Fundación de Cóndor Andino, para evitar cualquier riesgo. En el primer control intervino la gente de Ambiente y luego se derivó a la Fundación Cullunche. La cadena funcionó perfecto desde el avistaje hasta que se lo rescató”, resaltó Melchor.
EL RESCATE Y EN OBSERVACIÓN
Tras llegar personal de Fauna al lugar señalado por las mujeres que primero vieron y dieron aviso a las autoridades a primera hora de hoy, el majestuoso ejemplar de cóndor andino fue trasladado al centro de recuperación y rehabilitación de Cullunche, Ya durante el transcurso de la mañana, la veterinaria Jennifer Ibarra se encargó de realizar una primera revisación exhaustiva, intentando determinar las causas por las que el ave se encontraba en el suelo y no podía levantar vuelo.
Según explicó la veterinaria, y de acuerdo a los primeros estudios que se le hicieron, aparentemente el cóndor habría presentado una intoxicación. Además, descartó la presencia de perdigones (proyectiles y restos de disparos) en la radiografía. Durante la mañana del hoy también se sedó al ave con anestesia inhalatoria y se tomaron muestras de sangre. Junto con la radiografía, se le colocó al ejemplar el microchip, se lo medicó con protocolo para intoxicación y también se lo hidrató.
De acuerdo al último parte, el cóndor se encontraba un poco más estabilizado y desde Cullunche estaban analizando trasladarlo a un recinto un poco más amplio para seguir observando su evolución.
Si bien no hay confirmaciones precisas aún, la principal hipótesis tiene que ver que el cóndor pueda haber quedado tendido y con un principio de intoxicación tras ingerir alimento envenenado que -de acuerdo a testimonios de pobladores- algunas personas estaban colocando en el lugar para que coman los perros de la zona. Desde hace ya varios años, entidades ambientalistas y vinculadas a la protección de la fauna y del medio ambiente reclaman por una ley que, a nivel nacional, permita la trazabilidad de los agrotóxicos. Esto permitirá tener no solamente los datos de cualquier persona que los adquiera sino, además, conocer dónde y con qué fines los utilizan. No obstante, al no avanzar la normativa, episodios de este tipo son cada vez más comunes (y riesgosos).
Además de personal de Fauna Silvestre y de la Fundación Cullunche, del traslado y operativo de rescate participó, también gente de Gendarmería Nacional. Fue personal de Fauna quien se encargó de la parte operativa del rescate. Cumpliendo todos los protocolos y medidas de seguridad, accedieron hasta el lugar donde estaba el cóndor y, con un doble par de guantes y barbijo -ante la posible intoxicación- se encargaron de sujetarlo correctamente para, sin ponerlo en peligro, poder concretar el traslado. Hasta tanto se determine el estado de salud integral del ejemplar, quedará en observación.
