La empatía y solidaridad de Brisa Moyano (43) parece no conocer de límites, sobre todo si de ayudar a los niños y familias que menos tienen se trata. En la Zona Este –Brisa vive en Junín-, la referente social es conocida por ser la coordinadora del merendero María Silvia (nombre que le puso en honor a su madre) en Phillips, mientras que –cuando puede- también prepara, lleva y distribuye alimentos a los niños de las zonas más vulnerables de Costa Canal. Y es precisamente en este asentamiento donde ya comenzó a concretar su sueño de abrir un segundo merendero. ¡Aunque ello le haya implicado deshacerse de su auto, el mismo que tenía para movilizarse y llevar a sus dos hijos a la escuela (entre otras cosas)!
“Me quedé a pata, pero estamos todos muy felices. ¡Incluso mis hijos! Yo les pregunté a ellos y mi hijo, Junior, me respondió con calma que el auto era mío y que hiciera lo que sintiera, que él me iba a acompañar. ¡Y Almita se puso feliz de saber que iba a haber otro merendero!”, resume Brisa, con una mezcla de humildad y optimismo.
Porque, ya con el terreno a disposición y con los trabajos de limpieza y zapada en el lugar (lo que ha permitido preparar todo para instalar los blocks y comenzar a levantar las paredes), ahora resta la segunda parte del desafiante objetivo que se ha propuesto Brisa: conseguir material de construcción y fondos para que el Merendero María Silvia tenga su propio salón en Costa Canal.
“A los chicos de acá les estamos entregando comida hace ya un tiempo. Pero lo tenemos que hacer a la intemperie, o a veces en la casa de una de las mamás que ofrece sus casas para cocinar y repartir los platos. Por eso es que ahora estamos entusiasmados con tener nuestro propio salón”, resume la mujer, quien ha levantado una piecita y se ha ido a vivir al lugar para que nadie le robe las cosas del lugar.
Un auto por un terreno
En invierno del año pasado, ya viendo que la situación era desoladora –sobre todo porque no siempre conseguía una casa para poder cocinar y repartir los platos de comida-, Brisa Moyano le preguntó a una de las mujeres que vive en el asentamiento Costa Canal si sabía de alguien que tuviera un terreno a la venta en la zona. “Andá a preguntarle a ese señor, que el otro día dijo que lo quería vender porque se tenía que ir”, le contesto esta mujer a la coordinadora del merendero (hasta ahora, con sede fija en Phillips y con sede itinerante en Costa Canal).
Y hacia allí fue Brisa, acompañada de sus dos hijos, a hablar con el dueño del terreno. “Fui, le pregunté el número que pedía por el terreno y, cuando me respondió, se me vino el mundo abajo. Me di cuenta de que nunca iba a poder juntar esa plata. Me di media vuelta y volvía re triste cuando, de repente, se me ocurrió ofrecerle el auto, y se lo comenté a mis hijos –Junior, de 16 años y Alma, de 6-, quienes estuvieron de acuerdo. Entonces le dije al señor que, aunque no tenía la plata, tenía el auto en el que había ido a verlo. Él salió, lo miró y me dijo que le interesaba hacer el trueque del terreno por el auto. ¡Fue una alegría y una tristeza a la vez! Pero sobre todo alegría”, rememora la mujer, quien regresó al día siguiente con los papeles de compra – venta y concretó el intercambio.
El auto que Brisa Moyano entregó es un Dodge 1500, modelo 1981 (“¡Pero vos vieras cómo anda!”, destaca, orgullosa, la mujer). Lo había conseguido en febrero de 2021, luego de cambiárselo a su ex dueño por una motito de 110 cc más algo de dinero.
“Tenía el autito ese, al que me había costado mucho llegar. Al principio había conseguido una motito para llevar a los chicos a la escuela, pero en invierno hacía mucho frío y era muy difícil, por lo que necesitaba un auto. Así fue como pude cambiar la moto por el auto. Y ahora, después de analizarlo bien, me di cuenta de que podía estar sin auto. ¡Pero los chicos necesitan el merendero!”, reflexiona en voz alta.
Más cerca del sueño: cómo ayudar a construir el merendero
Durante los últimos 30 días, con ayuda de vecinos del lugar, Brisa pudo limpiar el terreno y completar lo que se conoce como “zapata” (el hormigón de base que se coloca para dejar el terreno listo para la construcción).
“Estoy feliz, ahora veo los avances, veo la base. Es poco y es mucho lo que hemos hecho ya. Lo principal y más necesario lo tenemos, que es el lote. Ahora necesitamos blocks, hierro, palos, machimbre, ventanas, puertas y todo lo que se necesita para la construcción, como membrana, aislante asfáltico ruberoid y dinero para la mano de obra”, enumera Brisa Moyano, quien entre Phillips y Costa Canal da de comer periódicamente a más de 500 chicos.
Qué se necesita
-Blocks.
-Hierros de construcción.
-Palos.
-Machimbre.
-Puertas y ventanas.
-Membrana.
-Aislante tipo ruberoid.
-Dinero para la mano de obra de albañiles.
Cómo ayudar
-Cuenta Banco Nación CBU 0110438130043809127397
-Mercado Pago moyanobrisas@gmail.com
-Brisa Moyano: +54 9 2634 68-3980