El ordenamiento territorial y la priorización de desarrollos sustentables son dos de los principales ejes sobre los que está asentado el plan de reactivación urbana que presentó esta mañana el intendente de la Ciudad de Mendoza, Ulpiano Suárez: y que estará vigente hasta el 30 de junio del año próximo.
Entre los datos más llamativos, sobresalen beneficios fiscales -exención de tasas de construcción, y también municipales y comerciales- para quienes elijan construir en las zonas donde más “pasivos urbanos” hay (baldíos, casas de adobe, playas y otros sectores) y focalizados en la Primera, la Tercera y la Cuarta Sección. Para quienes presenten e inicien sus emprendimientos antes de fines de junio del 2021, los beneficios consisten en la exención de entre 50% y 100% de las tasas de derecho de construcción y de aquellas municipales y comerciales y -siempre de acuerdo a la zona- se pueden extender durante uno o dos años.
Además, se creará un registro de contenedores de escombros y desechos con la intención de que el destino final de estos residuos no sea el piedemonte capitalino.
Beneficios según la zona
Suárez destacó que la comuna modificará la ordenanza de Gestión de suelo, y que lo hará planificando el crecimiento de la ciudad en base al Plan de Ordenamiento Territorial. En ese sentido, detalló que se apuntará al concepto de “ciudad compacta”; que busca crecer y poblarse en aquellas zonas grises del casco urbano que ya cuenta con una intensa densidad demográfica.
En ese sentido -y de acuerdo al estudio encarado por la comuna capitalina-, se ha identificado a la Primera, Tercera y Cuarta Sección como la zona con mayor cantidad de “pasivos urbanos” que podrían aprovecharse para ser renovados con flamantes obras. De hecho, según el municipio; 25,6% de los espacios tienen estas características en el sector. Y las casas de adobe son, en ese total, la mayoría (43,5%).
Para quienes desarrollen emprendimientos inmobiliarios a estrenar en todo el departamento de la Ciudad de Mendoza, se otorgará una exención en el aforo de construcción (uno de los ítems que se deben abonar) de 50% para otra obra que se pueda tener planificada. Y si se trata de una propuesta de más de cuatro unidades habitacionales, la eximición del aforo para otro proyecto será total (100%). En tanto, si estos emprendimientos están planificados en las secciones uno, tres o cuatro; los desarrolladores se verán beneficiado además con otro 50% de exención y que podrán aplicar en la primera obra.
La eximición impulsada también incluye a tasas -municipales o comerciales, según el proyecto-; y será de 50% durante un año desde la finalización de la obra en todo el departamento (se extenderá a dos años en los proyectos con más de cuatro viviendas). Pero si la obra se encuentra en las tres secciones ya detalladas, esa exención de pago de la mitad de las tasas se extenderá durante dos años. Y si es de cuatro unidades habitacionales en la Primera, la Tercera y la Cuarta, la exención de tasas será de 100% durante dos años.
Construcción sustentable
También habrá eximición para quienes construyan adaptándose a los estándares mínimos de construcción sustentable (en lo referido a iluminación, aclimatación y gestión de residuos). En este caso, se aplicará un beneficio del no cobro de hasta 100% de las tasas (de acuerdo al nivel de sustentabilidad). Y se aplicará tanto en construcciones nuevas como en remodelaciones de viviendas antiguas.
Control del piedemonte
Otra de las bases es ordenar el piedemonte capitalino. Po esto mismo, el intendente indicó que se creará un registro de empresas de contenedores de residuos. “No queremos que el piedemonte se convierta en un basural a cielo abierto. Por esto mismo es que a las empresas que se encarguen de la recolección de escombros se les va a exigir un certificado de deposición que certifique el destino final de los escombros”, concluyó Suárez.
