El canal Jarillal nace en Benegas (zona límite entre Godoy Cruz y Luján), corre junto Boulogne Sur Mer y atraviesa la ciudad hasta Las Heras, entre casas, edificios, parques y barrios. Y continúa varios kilómetros más al norte de calle Roca hasta perderse entre fincas y los más antiguos viñedos de la provincia. Hoy es difícil imaginar el paisaje de hace más de 200 años, en tiempos de la preparación del Cruce de los Andes.
Las Heras tiene una serie de hitos históricos vinculados a la Gesta y, según los archivos, hay un lugar sobre el Jarillal donde existió un batán y molino construido por Andrés Tejeda. “Poco es lo que se puede ver, una casa muy antigua casi en ruinas, y aparentemente no quedan vestigios de lo que fue el batán. Creo que si no se indica el sitio pronto quedará cubierto de cemento o asfalto y pasaremos por encima años de historia”, comenta Eduardo Giro, historiador aficionado, exalumno del Liceo Militar General Espejo e integrante de la Fundación del Regimiento 11 del Ejército.
El empresario maderero, ya retirado, comenta que esta inquietud con voz de reclamo se inició cuando el grupo decidió visitar el lugar, una finca de calle Almirante Brown de Las Heras, unos 300 metros al este de Boulogne Sur Mer.
“Hemos vuelto al lugar y tenemos la intención de colocar por lo menos una placa recordatoria como referencia del lugar. En esta parte, el cauce presenta una pendiente pronunciada que genera una importante velocidad del agua. Por eso seguramente hicieron el molino aquí, que en esa época sería el fin del mundo, porque se necesitaba mucha fuerza hidráulica para mover el mecanismo”, imagina Giro.
La Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos tiene registrado este lugar declarado histórico en 1951. Allí señala que el “Molino del Estado”, a cargo de Andrés Tejeda fue remodelado para abatanar (engrosar) paños y teñirlos de azul y confeccionar los uniformes del Ejército de los Andes.
Y hace referencia a la ubicación: nombra las calles Santa Rosa y Almirante Brown, a 2 km de la plaza departamental.
“Nosotros, los vecinos de la zona hicimos hace unos años un estudio para poner en valor este sitio, y suponemos que han continuado las gestiones, porque el propio municipio, especialmente el intendente Daniel Orozco se mostró muy interesado en destacar los hitos sanmartinianos”, comenta Maximiliano Salgado, quien vive cerca del lugar. Y agrega que el canal Jarillal, después de atravesar la rotonda de Boulogne Sur Mer y Roca-Regalado Olguín, comienza a tomar dirección hacia el este y atraviesa campos y barrios nuevos y despúes del cruce de calle Almirante Brown, unos 700 metros hacia el este, mucho antes del cruce de Santa Rosa está el sitio preciso, en una depresión del terreno, que es donde estaba el molino.
Salgado comenta también que lo único antiguo en esta zona es una construcción de adobe, que formaba parte del casco de la antigua estancia y está ubicada sobre Almirante Brown (lado norte), justo frente al barrio Ángeles Gutiérrez. Señala que esta propiedad perteneció a la familia Correas hace mucho tiempo, luego pasó a manos de Pérez Colman y desde hace unos 50 años es de los Constantino.
Rubén Miranda, exintendente de Las Heras y exlegislador, explica que está al tanto de la situación puesto que además de ser vecino, ex funcionario, sarnmartiniano, es el esposo de Liliana Constantino, una de las propietarias del lugar.
“Se hicieron las gestiones correspondientes ante la Comisión Nacional de Monumentos, presentamos un estudio y la intención es poner en valor el lugar. Y para ello se debería hacer una donación de parte del terreno o buscar la figura para permitir un acceso público a un futuro emplazamiento y puesta en valor del sitio”, dice.
Miranda agrega que la antigua casona, que presenta un importante deterioro, también forma parte del proyecto, aunque seguramente su construcción es posterior al batán. El resto de terreno, un campo , se destinará a desarrollo inmobiliario. Finalmente señala que están a la espera de la decisión del la Comisión.
Viejo molino
En Coronel Díaz 104, sobre el sistema del canal Tajamar, que discurre por avenida San Martín, se observa la rueda de un antiguo molino de agua que hace referencia al Batán de Tejeda.
El recordado historiador y narrador Juan Draghi Lucero (santafesino radicado en Mendoza y autor del célebre libro “Las mil y una noches argentinas”) estudió los orígenes del lugar y es quien señaló ese emplazamiento, que estaba al noroeste del antiguo centro de la ciudad.
El texto explica que allí, hoy en el cruce con Federico Moreno, “se emplazaba un viejo molino donde San Martín dispusiera que fueran abatanadas las telas de los uniformes de los soldados del Ejército de los Andes, haciéndolas más adecuadas para el cruce de la Cordillera”.