Finlandia fue elegido como “el país más feliz del mundo” por quinto año consecutivo. Esta clasificación la realiza el “World Happiness Report” (Informe sobre la felicidad mundial). Sin embargo, Argentina cayó 10 lugares en relación con la medición realizada hace tan solo un año. Este ranking se basa, en gran medida, en las evaluaciones de vida de la Encuesta Mundial de Gallup.
Con una nota de 7,82 sobre 10, Finlandia volvió a liderar el listado de la publicación de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Le siguieron Dinamarca, Islandia, Suiza y Países Bajos. “Los tres avances más importantes fueron los de Serbia, Bulgaria y Rumania. Los retrocesos más fuertes se dieron en Líbano, Venezuela y Afganistán”, según el estudio financiado por la ONU que se realiza hace diez años.
La evaluación se basa en sondeos en los cuales les preguntan a las personas sobre su sensación de felicidad. Luego cruzan estas informaciones con datos del PBI, de los niveles de libertad individual o de la corrupción, entre otros. En esta edición 2022, la Argentina se ubicó en el puesto 57 con un puntaje de 5,97. El país sigue su tendencia descendente, ya que en 2020 rankeaba en el puesto 47 y en el promedio de 2017-2019 el lugar número 45. Otros países que se ubicaron con un puntaje similar fueron: Japón (54°), Honduras (55°), Portugal (56°), Grecia (58°), Corea del Sur (59°) y Filipinas (60°), detalla Infobae.
Entre los países latinoamericanos, se destacan Costa Rica (23º), Uruguay (30º), Brasil (38º), Chile (44º) y México (46º). El peor situado es Venezuela, posicionado en el lugar 108, debajo de Irak. En tanto, en el grupo de naciones calificadas como menos felices se incluyen las africanas Lesoto, Botsuana, Ruanda, Zimbabue. Mientras que en el oriente medio están el Líbano y cierra Afganistán, con el 146º puesto (el último).
Los argentinos, entre los más pesimistas de la región
Según la 45ª Encuesta anual de fin de año de Gallup Internacional (GIA) y Voices!, entre los argentinos reina un pesimismo abrumador ante las perspectivas del año que se inicia. La consultora internacional dio a conocer los resultados de su tradicional encuesta de fin de año, que marcan que para 2022 en el mundo hay un menor índice de optimismo y esperanza que en 2021, debido a la persistencia de problemas económicos y los miedos asociados a la pandemia.
“En Argentina también decrecieron las expectativas favorables en relación al año anterior y la caída es más pronunciada que a nivel global”, indicó Voices!, la consultora encargada de llevar adelante esta investigación en nuestro país. A nivel general, la encuesta mostró que el 38% de la población piensa que el año que viene será mejor que el que termina, mientras que el 28% espera que sea peor y el 27% anticipa que será igual o similar a 2021. Esto significa que entre el fin de 2020 y el de 2021 hubo un crecimiento acelerado de la cantidad de personas en el mundo que son pesimistas respecto de lo que ocurrirá en su economía, un leve crecimiento de los que creen que seguirá igual y una baja considerable en los que son optimistas hacia el futuro inmediato.
Índice de esperanza
El índice de esperanza de la Argentina quedó por debajo de los de sus vecinos de la región: el de Colombia es 29, el de Ecuador 33, y el de Perú 30. Son los únicos países sudamericanos relevados en la encuesta. Por otra parte, Voices apuntó que en la Argentina “se advierte una baja de expectativas positivas: 47% a fines de 2020, 38% en la última medición”.
“Al analizar las perspectivas según los distintos segmentos sociodemográficos de nuestro país, se detecta que el optimismo desciende a medida que va aumentando la edad de los entrevistados, en los polos opuestos se detecta que el 47% de los más jóvenes aguarda un año mejor, guarismo que baja al 28% entre los mayores de 65 años. Es interesante también destacar que el optimismo se incrementa en el estrato socioeconómico bajos, donde alcanza un 41% (contra 37% en el nivel socioeconómico alto y 36% en el medio)”, dijeron desde la mencionada consultora.
Dato alentador
Sin embargo, un dato alentador es que la benevolencia está aumentando a nivel mundial. Ese es uno de los hallazgos clave del informe. “La gran sorpresa fue que a nivel mundial, de manera descoordinada, ha habido aumentos muy grandes en las tres formas de benevolencia sobre las que se pregunta en la Encuesta mundial de Gallup”, dijo a CNN Travel John Helliwell, uno de los coautores del informe.
La donación a la caridad, ayudar a un extraño y el voluntariado están en aumento, “especialmente la ayuda a los extraños en 2021, en relación con antes de la pandemia o 2020, en una cantidad muy grande en todas las regiones del mundo”, remarcó Helliwell, quien es profesor emérito de la Escuela de Economía de Vancouver, Universidad de Columbia Británica.
En la misma línea, Jeffrey Sachs, otro de sus coautores, reportó a la agencia AFP: “La lección que se saca del informe, en estos diez años, es que la generosidad entre las personas y la honestidad de los gobiernos son cruciales para el bienestar. Los dirigentes mundiales tendrían que tomarlo en cuenta”.