Andrés “Chacho” Peñalva, uno de los dueños de la emblemática tienda de ropa para hombres The Sportsman, falleció a los 89 años. El empresario murió el domingo 6 de octubre.
Chacho era un trabajador incansable y le dedicó su vida a la empresa, que este año cumplió 105 años. Aunque la marca nació en San Juan en 1919, en el 26 Paulino Peñalva abrió una sucursal en Mendoza sin imaginar que se convertiría uno de los clásicos de la provincia.
Su socio José Gil, quedó a cargo de la sucursal sanjuanina. Décadas después, la disolución de esa sociedad se concretó con la venta del local de calle San Martín y Entre Ríos.
Aunque tenía ascendencia española, Peñalva era más mendocino que el vino. Estudio en la facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Cuyo y se recibió de contador.
En 1975, cuando falleció su padre Paulino Peñalva, Chacho se hizo cargo del negocio familiar. Poco a poco, con un buen manejo de la publicidad y otras estrategias The Sportsman se convirtió en la tienda insignia de la moda masculina.
Chacho Peñalva seleccionaba personalmente cada prenda, desde trajes y camisas hasta accesorios y calzado, para asegurarse de que cada cliente se sintiera como un gentleman.
Su atención al detalle y su dedicación a la excelencia; así como el gran cuidado por el área comercial y la publicidad hicieron que la tienda se convirtiera en un punto de referencia para los hombres que buscaban vestir con distinción
Fue pionero en introducir marcas internacionales en la ciudad y en crear una conciencia sobre la importancia de la elegancia y el estilo en la vida cotidiana. Su huella puede verse en la forma en que los hombres de Mendoza se visten hoy en día.
“Chacho fue un visionario que entendió que la moda no era sólo ropa, sino un estilo de vida”, afirma su hijo Gonzalo Peñalva. “Su legado es más que una tienda, es una forma de vida que sigue inspirando a los hombres de Mendoza”.
Hacia 2006 los Peñalva idearon su propia marca de ropa premium: Piedravlanca , que corresponde a la traducción lineal del apellido, Peña es Piedra y Alba es: blanca, aunque dejaron la V original.
En 2008, después de 63 años en San Martín y Entre Ríos, TS se mudó. El local gigante pasó a ser uno más pequeño en San Martín casi Catamarca.
“No fue fácil -recuerda el dueño- pero teníamos problemas con los mil quinientos (sic) sobrinos de nuestro socio Gil, así que vendimos esa esquina, les pagamos y su parte nos quedamos con la marca”, contó a Los Andes.
Andrés Peñalva también fue un hombre comprometido con la comunidad de Mendoza, y la sociedad y sus problemas. Tuvo una participación activa en la economía argentina como uno de los fundadores de la Fundación Mediterránea, en la que aportó sus conocimientos desinteresadamente no sólo para la institución sino para el desarrollo de la provincia y el país.
The Sportsman despidió a su dueño
En las redes sociales de la marca publicaron un sentido mensaje dedicado a la memoria de Andrés “Chacho” Peñalva.
“Honramos la memoria de Andrés “Chacho” Peñalva, cuyo legado perdura en la historia de The Sportsman.
Su espíritu visionario, su dedicación a la excelencia y su conexión y empatía con cada una de las personas que forman parte del equipo son valores que siempre permanecerán con nosotros.
Todos aquellos que tuvimos el privilegio de conocerlo lo recordaremos siempre con mucho cariño y lo extrañaremos”.
