El descenso en la cantidad de casos positivos de coronavirus registrados en los últimos días, tanto a nivel nacional como provincial, alentó ciertas preguntas respecto de la posibilidad de alcanzar un estado en el cual se deje atrás la transmisión comunitaria. Sin embargo, es apresurado pensarlo, como así también suponer el descenso actual de casos como consecuencia de la inmunidad de rebaño.
“Es posible, sí, pero no se sabe cuándo. Y el cómo va a depender de múltiples parámetros. A la hora de evaluar si hay transmisión comunitaria, si se pueden relajar medidas o no, hay recomendaciones hechas por organismos internacionales y nacionales donde se usan una serie de parámetros para evaluar la intensidad de la transmisión, por ejemplo el número R (Ritmo Reproductivo Básico, concepto epidemiológico que refiere al número promedio de personas expuestas que contagia cada persona infectada), el porcentaje de positividad de los testeos que se realicen, independientemente de la cantidad de testeos realizados, ocupación de camas de terapia intensiva, el tiempo en el cuál se duplican los casos y el número total de contagios”, explicó a Los Andes Alberto Carena, infectólogo del hospital Universitario.
Para tener como referencia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido que es necesario un porcentaje menor al 10% de positividad para entender que hay un control de la circulación del virus. Este viernes se registró un índice de positividad en la provincia de 20, 5%. En Mendoza ha ido bajando paulatinamente desde el pico, que superó el 50% en octubre.
“Tenemos que esperar un periodo de tiempo más prolongado para evaluar el cese de la circulación comunitaria. Nos vamos a tener que acostumbrar a esto por un tiempo hasta que haya alguna forma de llegar a una cantidad suficiente de gente inmunizada, ya sea de forma natural o con una vacuna, y eso evite que el virus se esparza libremente. Todavía falta bastante para poder controlar el virus y poder tener una vida similar a la que teníamos antes”, comentó Carena.
Las autoridades y profesionales sanitarios resaltan que aún se continúa en un estado de transmisión comunitaria y de allí la necesidad de seguir reforzando las medidas en relación a la distancia social, el uso correcto del tapaboca, la higiene de manos, y continuar detectando rápidamente a los pacientes contagiados para poder aislarlos. “Esto es muy importante porque todavía no tenemos una vacuna que nos permita pensar en cortar la transmisión a través de la prevención primaria, la forma que sería más adecuada para cortar la circulación de esta enfermedad que se transmite de persona a persona”, apuntó la doctora Andrea Falaschi, directora de Epidemiología de la provincia.
Todavía hay muchas personas susceptibles de contraer el virus, no hay datos de seroprevalencia locales, es decir, datos sobre la población que se haya infectado y haya desarrollado anticuerpos. Hay un porcentaje de personas que no han consultado o no se han testeado y se calcula que son entre 5 y 7 contagiadas por cada una de las diagnosticadas con Covid-19.
Teniendo en cuenta el número total de infectados reportados, la cifra estimada sería mayor a 260.000 pacientes, lo que representa un 13% de la población total. “No estamos cerca del 60% o 70% de cantidad de personas inmunes que se necesitarían para alcanzar la inmunidad de rebaño”, informó Falaschi. Si bien aún no hay un conocimiento acabado sobre el coronavirus, se calcula que para alcanzar la inmunidad de rebaño se debe tener un 67% de la población inmune .
La inmunidad de rebaño se refiere a la protección indirecta contra la infección que previene a personas susceptibles, es decir, cuando en una población existe una proporción suficientemente grande de personas inmunes.
“El problema que tenemos es que no sabemos qué nivel de protección tiene la inmunidad que genera el virus. Tampoco sabemos cuánto dura: hay reportes que dicen que dura tres a cuatro meses, pero no de por vida, por eso hay gente que lo puede tener nuevamente. Entonces poder predecir cuándo vamos a dejar de tener transmisión comunitaria es difícil”, explicó Alberto Carena.
“Alcanzar una inmunidad de rebaño sin la vacunación sino a través de la inmunidad natural costaría millones de muertes. Sólo se podría alcanzar con una vacuna segura y eficaz, y que sea capaz de inmunizar a más del 60% de las personas. Las vacunas tienen la ventaja de generar inmunidad evitando los casos graves de la enfermedad”, indicó Falaschi, quien recordó que un 5% de los contagiados puede presentar un estado crítico.
“Tampoco podemos hablar de inmunidad de rebaño porque los grupos de riesgo han estado resguardados. Sería muy peligroso pensar en ese concepto y que la gente saliera a intentar inmunizarse con inmunidad natural”, alertó la directora provincial.
La provincia, con la posibilidad del rebrote
“Ponerle una fecha definitiva al rebrote es difícil pero seguramente va a haber un rebrote por varios motivos. Entre ellos, porque todavía existe población susceptible de contraer el virus”, explicó el infectólogo del hospital perteneciente a la UNCuyo, Alberto Carena.
“Que se hable de un posible rebrote, sobre todo durante el próximo marzo, son inferencias que se hacen de lo que ha sucedido en otros lugares, fundamentalmente en países europeos, donde se ha observado el comportamiento de la curva de contagios. Mucho dependerá del comportamiento social. El resurgimiento de la enfermedad será más rápido si las personas relajan las medidas de cuidado sin tener aún la posibilidad de la vacunación”, señaló por su parte la directora de Epidemiología, Andrea Falaschi.