Las principales organizaciones mundiales del sector (OMT, IATA, OACI, WTTC, entre otras) decidieron activar un Grupo de Trabajo sobre Viajes y Transporte, que supervisará la situación de la enfermedad y proporcionará información relevante.
Así y junto con la Organización Mundial de la Salud insistieron que el riesgo de transmisión del Ébola durante los traslados por vía aérea es bajo. “A diferencia de infecciones como la gripe o la tuberculosis, no se transmite respirando el mismo aire que una persona infectada.
Requiere el contacto directo con sangre, secreciones, órganos u otros fluidos corporales de personas o animales vivos o muertos infectados, exposiciones todas ellas improbables para el viajero medio”.
Del mismo modo el riesgo de que un viajero se infecte por el virus durante una visita a los países afectados y desarrolle la enfermedad tras su regreso es muy bajo, aun cuando la visita incluya viajar a zonas en las que se hayan registrado casos, aclararon.
De la misma manera el riesgo de contagiarse en un vuelo es casi nulo, si no se tiene contacto con los fluidos del enfermo.