Al menos 15 civiles, entre ellos ocho niños, fallecieron y otra treintena de personas resultaron heridas en los casi 40 bombardeos efectuados en las últimas horas por aviones de combate del Ejército sirio en más de una decena de localidades de la teórica zona desmilitarizada de Idlib y la vecina provincia de Hama, en el noroeste de Siria, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Sobre esta región está en vigor un alto el fuego mediado por Rusia y Turquía para proteger a los rebeldes desplazados y sus familias tras los avances de los dos últimos logrados por el Ejército sirio con el apoyo de Moscú.
Con el paso de los meses, sin embargo, la zona se ha convertido en un hervidero de grupos de oposición armados y yihadistas atrincherados que han llevado al Ejército sirio a lanzar una nueva ofensiva en la que Rusia ha reducido su apoyo para no alcanzar a las fuerzas turcas destinadas en las proximidades, ralentizando el avance de las fuerzas de Damasco.
Los bombardeos de las últimas horas han alcanzado al menos 16 localidades diferentes. Tres de los niños han muerto en Ariha y los otros dos, en Kafr Oweid.
El ataque más grave tuvo lugar en Ariha, donde fallecieron 11 civiles, entre ellos siete niños. Después, otros tres efectivos de rescate murieron por un bombardeo ruso en el norte de la provincia de Hama. Un octavo niño falleció en un bombardeo del Ejército sirio en Kafr Oweid (Idlib).
Según el recuento del Observatorio, con sede en Londres pero con una red de informantes en Siria, al menos 822 civiles han muerto desde el inicio de la ofensiva sobre Idlib, el pasado mes de abril, entre ellos 216 niños y 151 mujeres. Desde la firma en febrero del alto el fuego, el número de civiles muertos es de 1.108, entre ellos 298 menores de edad y 215 mujeres.
Imagen conmovedora
Una imagen está dando la vuelta al mundo. Se trata de la lucha desesperada de unos menores por salvar la vida, algunos de ellos son hermanos. La escena, captada por un fotógrafo local tras un bombardeo, muestra el momento dramático en que quedan las víctimas colgadas a varios metros del suelo. La pequeña Riham, de cinco años, falleció poco después.
En la imagen se ve a Riham reteniendo como puede por la camiseta a Touka, de siete meses, mientras que Dalia, parece estar atrapada bajo los escombros del edificio afectado por el bombardeo. Un poco más arriba, un hombre observa el desespero de los niños y abrumado parece gritar.
Los hechos se produjeron el miércoles pasado en Ariha, una ciudad de la provincia siria de Idleb. "Touka y Dalia están estables", afirmaron fuentes del hospital donde se encuentran internadas.