En los últimos días entró en el centro de la polémica la serie de TV "El Tigre Verón", protagonizada por Julio Chávez en la piel de un sindicalista. El programa fue el blanco de una demanda judicial de Hugo Moyano por supuestos "parecidos" entre la historia de ficción y la suya.
El líder de Camioneros apuntó a una supuesta "criminalización" o "demonización" de las actividades del sindicalismo en Argentina. Esto ya que en la miniserie de Pol-K, que se emite por Canal 13, Miguel Verón, líder del gremio de la carne, es el jefe de una asociación delictiva.
Fue el propio Chávez el que salió a responderle. El actor dijo que lamenta "haber herido la suceptibilidad" de los que se enojaron y les pidió "disculpas". Y completó: "Yo no cuento la historia de un sindicalista corrupto; sino de una especie de cacique defensor de su tribu".
Los Andes consultó a gremialistas y representantes de trabajadores de nuestra provincia para que opinen sobre si la serie estereotipa o no la imagen de los sindicalistas.
Para Rodolfo Calcagni, secretario general de Sipemom y aliado de Moyano a nivel provincial, "desde hace tiempo que hay una demonización de los dirigentes" y recordó que el programa "salió en un momento político importante, a tres meses de las elecciones".
Y defendió el accionar del líder camionero: "El compañero Moyano ya actuó en la justicia porque hay mucha similitud entre Verón con su familia".
En el mismo sentido, Gustavo Correa, titular de la Central de Trabajadores de Mendoza (CTA), opinó que "claramente se trata de una mirada negativa" y añadió que "no es casual" porque busca "dejar mal parado" al sindicalismo.
Incluso fue más allá, involucrando al gobierno de Mauricio Macri. "Este es un nuevo esquema de manipulación y estigmatización. No es casual que se haga ahora, mostrando al sindicalismo como 'sucio', cuando son los únicos que no han sido funcionales al gobierno nacional. Les molesta que nos organicemos, que tengamos solidaridad de clase", destacó.
En este sentido, adelantó que desde la CTA elevarán una nota "en repudio, porque pretenden demonizarnos. Es como si saliera una serie en la cual se muestre a empresarios corruptos, manipuladores y extorsionadores. Puede haber, pero no es la generalidad".
Por su parte, Sebastián Henríquez, secretario general del SUTE, dijo que no ha visto la serie pero puso el foco en que hay que analizar "no si es una copia de la vida de alguien, sino cómo se explica la realidad que muestra o si es un conjunto de estereotipos".
Sin embargo, aseguró que "rara vez se muestra la épica de los trabajadores que se organizan sindicalmente para vivir mejor y que son perseguidos. No se muestra la vida de los Agustín Tosco [uno de los protagonistas del Cordobazo], de los grandes ejemplos de dirigentes que expresan una línea de sindicalismo dentro del movimiento obrero".
Desde el sindicato de los profesionales de la Salud (Ampros), Claudia Iturbe eligió diferenciarse del modelo que planeta "El Tigre Verón": "Nuestro gremio siempre se ha caracterizado por modalidades de diálogo y cuando se han hecho medidas han sido totalmente pacíficas y sumando a la población, con servicios a la comunidad sin cortar calles, con panfletería informativa y formativa. No nos sentimos identificados para nada".
También opinó el líder de ATE, Roberto Macho, para quien el problema de que se llegue a una imagen negativa del trabajo de un gremialista "es del propio gremialista. Hay varios casos en los cuales ellos se transforman en empresarios y dejan de estar lejos del trabajador, y persiguen solamente sus propios intereses. Eso lo podemos ver a nivel nacional pero también a nivel provincial", expresó aunque evitó dar nombres.
Y si bien lamentó "que se demonice el trabajo de los gremios o de sus líderes", recalcó que "son los mismos sindicalistas los que se demonizan. Pero esto no quiere decir que todos sean así. Mientras unos manejan sus empresas, nosotros peleamos en la calle como perros por los trabajadores", aseguró.
