Dos aviones sobre la pista del aeropuerto de San Rafael en forma simultánea fue la postal del primer día de más movimiento por el cierre de la aeroestación internacional Francisco Gabrielli por mejoras durante tres meses.
A esto se sumó la gran cantidad de personas tanto en el edificio como en el estacionamiento, e incluso al costado de la ruta nacional 143 -donde se encuentra el aeropuerto- donde debieron parar muchos vehículos particulares.
Ayer, arribaron tres vuelos en el lapso de tres horas al aeropuerto Santiago Germanó, ubicado en el distrito sanrafaelino de Las Paredes.
Habitualmente sólo había un vuelo diario, por lo que se preparó todo para recibir al triple de pasajeros y por consiguiente a un número similar de gente que va a despedir o recibir a los viajeros.
"Resultó todo perfecto", resumió a Los Andes el jefe de base de Aerolíneas Argentinas, Pablo Faure, el despliegue y movimientos de las naves y los pasajeros.
Se esperaba la llegada del primer vuelo a las 14.05, el siguiente a las 14.55 y el tercero a las 16.30. Sin embargo, los vuelos arribaron y se fueron 15 minutos antes de lo previsto.
Aunque se estimaba que la cantidad de gente desbordara los espacios del aeropuerto, no hubo inconvenientes tanto en la sala de espera como en el restaurante. Tampoco hubo quejas de los viajeros.
Por parte de la infraestructura del aeropuerto, todo estuvo en condiciones y el personal trabajó acorde a lo preestablecido. “En cuanto al control del espacio aéreo no hubo inconvenientes, se operó de acuerdo al plan de vuelo existente”, destacó Osvaldo Mansilla, jefe del aeropuerto.
Para ello recibieron refuerzos de personal, dos personas para la torre de control y dos para plan de vuelo. Mientras, Aerolíneas Argentinas también agregó personal para responder a la demanda de mayor cantidad de vuelos.
Una vez que descendían del avión los pasajeros con destino a Mendoza se dirigían a una mesa identificada con cartelería, donde una señorita les entregaba el pasaje de colectivo previa presentación de la tarjeta de embarque.
Afuera, a pocos metros aguardaban los colectivos, identificados con las letras del vuelo correspondiente.
“Es la primera vez que voy a Mendoza, y ayer nos enteramos que teníamos un tramo en colectivo por el cierre del aeropuerto”, contó una turista proveniente de La Plata. Agregó en tono optimista al conocer que tendrían un tramo de tres horas en el ómnibus: “Ahora veremos un poco de San Rafael y de paisaje”.
Ella fue uno de los pocos pasajeros que ayer optaron por tomar uno de los coches del servicio de traslados gratuitos financiado por la Nación.
Si bien se desconoce si los pasajeros optaron por movilizarse en forma particular, ya sea por medio de vehículos de familiares o de alquiler, la realidad mostró que en los dos primeros días, en lo que se refiere al traslado a y desde San Rafael, casi no fueron utilizados.
“Ayer en el trayecto San Rafael-Mendoza vinieron tres pasajeros y se fueron cinco, mientras que hoy en el primer vuelo trajimos sólo una persona y se fueron hacia el norte provincial cinco”, comentó Leonardo Tavagnutti, responsable de la contratación y certificación de servicio, de Intercargo.
“No sabemos si hay desconocimiento de la gente o cuál es la razón, pero los coches continuarán haciendo el servicio en los horarios estipulados”, agregó.
En el aeropuerto el comentario entre taxistas, remiseros y otros prestadores de servicios era el poco uso de los colectivos. “Tal vez se trate de gente de acá (por San Rafael) que aprovechó el tener otro vuelo más”, señalaron.
“También hay personas que decidieron quedarse un par de días para conocer. Yo llevé al centro a una pareja que optó por hacer eso, por ejemplo”, dijo otro.
Piden más micros urbanos y folletería turística
Los comerciantes y prestadores del aeropuerto sanrafaelino coincidieron en señalar -entre otras cosas- un par de falencias relacionadas a la gran cantidad de gente que tendrá la zona durante tres días a la semana hasta principios de diciembre.
Además del servicio de taxis, remises, combis y autos de alquiler uno de los puntos destacados fue la falta de una mayor frecuencia de colectivos urbanos.
“Nos consultan por el horario del ómnibus que pasan hacia el centro, pero hay casi una hora entre uno y otro. Hay personas que llegan en el avión y quieren ir en micro” expresó un comerciante vecino.
Otro punto destacado por la mayoría de los prestadores fue la ausencia de cartelería turística. Al respecto, Lucas Quesada, vicepresidente del Ente Autárquico de Turismo, que se acercó ayer hasta el aeropuerto para observar el movimiento de la primera jornada atípica, dijo que a partir de mañana (por hoy) habrá un stand con folletería de San Rafael.
“La idea es que quien está de paso pueda tener un pantallazo de lo que ofrece el departamento en materia turística”, precisó.
