Sociedad
Laura Rez Masud en Los Andes: se suma a la programación del nuevo estudio de la redacción
hace 16 horas
Alrededor de un millar de personas, la mayoría militantes de distintos sindicatos, marchó por las calles mendocinas en la gélida tarde del jueves.
Fue la versión local de la convocatoria hecha por las dos CTA y la Corriente Federal de Trabajadores, que a nivel país lidera el mendocino Sergio Palazzo (La Bancaria).
Aunque en este caso, no hubo referentes del gremio de los camioneros, que en el país había iniciado la convocatoria.
Así las cosas, quienes lideraron la marcha fueron, Sebastián Henríquez (SUTE), Gustavo Correa (CTA "de los trabajadores"); Polo Martínez Agüero (CTA autónoma); Sergio Giménez (Corriente Federal de Trabajadores) entre otros.
El recorrido de los manifestantes se inició en San Martín y Garibaldi y culminó en frente a la Legislatura, donde se ubica la carpa de protesta instalada por el SUTE.
Tal vez fue el intenso frío, o tal vez que mucha de la militancia participó en la vigilia por la Ley del aborto (uno de los hechos más celebrados en la marcha y en el acto posterior), lo cierto es que la manifestación fue bastante menos numerosa que en otras ocasiones.
Eso no mermó los encendidos discursos en contra del gobierno nacional de Mauricio Macri y del local de Alfredo Cornejo.
Varios oradores se fueron sucediendo y repitiendo consignas.
Se reclamó la reapertura de las paritarias, sobre todo luego de conocerse los porcentajes de la inflación de mayo. "En Mendoza ya se superó el 16%, ¿qué espera Cornejo para reabrir las paritarias?", se preguntaron.
Hay que recordar que la mayoría de los estatales recibió un 15,7% de suba salarial en tres tramos, y recién con el sueldo de junio cobrarán la segunda parte (de 5,2%).
También se cuestionó la postulación de (el actual ministro de Gobierno) Dalmiro Garay a la Corte, principalmente "por ser el ideólogo de la reforma laboral que perjudica a los trabajadores", se dijo.
Aunque también hubo algunas "chicanas" para el propio movimiento obrero. "Necesitamos dirigentes sindicales que se den un baño de humildad y escuchen a los trabajadores", lanzaron otros.
Más allá de las arengas, el encuentro sirvió para renovar la convocatoria "para el próximo 25 de junio", fecha fijada por la CGT para el próximo paro, el cual "debe ser activo y no dominguero", señalaron varios.
"Ese día debemos ser miles en la calle", pidieron los interlocutores.
