La baja del ex Real Madrid y River, la sexta que sufrió Martino en el cierre de la preparación antes de las Eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018, quedó envuelta en polémica y volvió a poner a Higuaín en el ojo de la tormenta. La del Pipita no es una ausencia común y corriente, sino una con mar de fondo. Martino recién tomará contacto con la prensa hoy, un día antes del partido con Bolivia, pero dejó saber que cree en la palabra del jugador del Napoli. El propio Pipita les dijo vía whatsapp a algunos compañeros de la Selección que estaba con vómitos. Pero otros integrantes del cuerpo técnico instalaron por lo bajo la duda sobre cuán cierto es que no estaba en condiciones de venir. “Si fuera titular, ¿se hubiera bajado igual?”, preguntó uno de los colaboradores del Tata. Y otro dejó picando una consulta que también hizo ruido: “¿Higuaín hubiera faltado si no se hubiera lesionado (Ezequiel) Garay, su mejor amigo de todo el grupo?”.
Higuaín ocupa un lugar de privilegio entre los principales delanteros argentinos de todos los tiempos: de hecho, es el sexto máximo goleador histórico de la Selección, con 25 goles en 52 partidos. Después de haber sido titular durante el ciclo de Sabella, pasó a ser suplente con Martino y pelea con Tevez el lugar de reemplazante de Agüero como centrodelantero. Con el Tata perdió ese lugar que tenía entre los once y en los últimos 60 días fue protagonista por dos episodios no deseados: desvió uno de los penales en la definición desde los doce pasos ante Chile, en la final de la Copa América, y poco más de dos semanas después estuvo a punto de pelearse a golpes de puño con un hincha que lo cargó por ese penal errado.
¿Estará Higuaín en la próxima convocatoria, la de la primera doble fecha de las Eliminatorias ante Ecuador y Paraguay? La decisión que tome Martino llegado el momento archivará esta historia como la de una baja más o pondrá sobre la superficie una situación que por ahora sólo genera incomodidades y más de una duda.