Una parte del plan de pago que el Gobierno provincial acordó con Asociación Unida Transporte Automotor Mendoza (Autam) para saldar la deuda que mantiene con los empresarios no se cumplió ayer y resurgió la amenaza del sector de cortar el servicio de la noche. Frente a este nuevo tablero, el Ejecutivo salió hoy a garantizar que la plata será acreditada en los próximos días y que multará a los dueños de los coches si no cumplen con las prestaciones habituales.
El ministro de Transporte, Pablo Rousseau, explicó que dentro del compromiso firmado la semana pasada con Autam se especificó que el saldo adeudado quedaba "supeditado a las provisiones financieras del estado provincial". "La provincia tuvo que atender otras urgencias. No es la primera vez que esto pasa y los empresarios saben que siempre terminamos pagando. Nunca se ha cortado la cadena de pago", agregó en declaraciones a radio Mitre Mendoza.
Igual los representantes de Autam decidieron notificar sobre el "incumplimiento del Gobierno del acuerdo firmado el martes 4 de agosto" a la Subsecretaría de Trabajo. Ese día, Transporte "se comprometió a regularizar la deuda que mantiene con las empresas".
"Autam expresa que la falta de pago pone en riesgo la prestación regular del servicio público. Por ello, el sector realiza todas las acciones necesarias para encontrar soluciones a esta grave crisis financiera que atraviesa la Mendoza y evitar interrupciones del servicio que afecten a nuestros clientes", explicaron hoy mediante un comunicado los propietarios de colectivos, quienes mantuvieron una reunión al mediodía para tratar la situación.
El funcionario de Transporte sostuvo que entiende el "reclamo legítimo" de los empresarios, pero se mostró disconforme con la dura postura adoptada por Autam. Le recordó al gremio que no pueden dejar de prestar servicios por tratarse de algo "jurídicamente imposible".
“Desde el Ejecutivo hemos aceptado la necesidad del sector y estamos trabajando para acortar la brecha de la deuda para que no haya inconvenientes. Mientras tanto, ellos deben garantizar los recorridos como corresponde”, dijo Rousseau.
El problema se originó por una deuda que a la fecha supera los 116 millones de pesos, según una actualización de Autam, en concepto de subsidio que el Gobierno provincial le debe a los dueños de micros desde hace meses.
El martes pasado, el Ejecutivo se comprometió a realizar pagos diarios (de 4 millones diarios) y a entregar un adicional (ayer lunes) con el objetivo de ir achicando la millonaria suma. Pero la cancelación de ese adicional de 30 millones de pesos nunca se hizo.
Así fue como los empresarios volvieron a amenazar con cortar el servicio de transporte público que se presta desde las 22.30. Más allá de las acciones tomadas hoy, el sector indicó que sigue en alerta y lo mismo corre para el gremio que nuclea a los choferes de micros (Sipemom), ya que temen que se les recorte horas de trabajo.