Si Carlos Thays se levantara de su eterno y merecido descanso y viera por un instante el edificio que se está construyendo a metros de la rotonda de los Caballitos de Marly, seguramente pondría el grito en el cielo… literalmente. ¡Y no es para menos! : el edificio allí colocado (que será centro de monitoreo de las cámaras de seguridad) es una mancha disonante en el paisaje pintoresco y equilibrado del lugar, ése que con tanta destreza y oficio él supo diseñar hace ya 120 años. Protestaría y con razón porque si algo cuidan los arquitectos paisajistas es el tema de las visuales y las perspectivas.
Qué necesidad de ponerlo aquí ¡!!- diría enojado Carlos - si pudiera haber estado allá atrás, hacia el oeste en medio del bosquecillo… y no encajado entre mis hermosas palmeras!
¡Qué necesidad de ponerlo aquí exclamaría Thays - sobre la senda peatonal … tapando la visual hacia la avenida de los plátanos y ocultando completamente la graciosa Estación del trencito del Parque!
¡¡Qué necesidad de usar materiales y formas tan contrastantes con el estilo bucólico y pintoresco del lugar!! -exclamaría ya angustiado el pobre-. Es que no saben en el siglo XXI que hay que respetar el contexto, que es necesario y agradable para la lectura del lugar mantener la armonía.
"De buenas intenciones está sembrado el camino al infierno" -reza el refrán-. Colocar cámaras de seguridad en el Parque es una excelente propuesta en el marco de obras de puesta en valor del Parque y nadie -ni siquiera Thays me atrevo a decir- se opondría a tan acertada obra.
El tema es que no debería perjudicar, como lo hace, el paisaje y los bienes culturales del sitio. Desde el punto de vista funcional no hay ninguna razón para que esté allí sobre la línea, tapando visuales y tan tan visible.
Parece que hubiera sólo una expresa voluntad de mostrarlo.
El Parque San Martín ha sido declarado Parque Histórico (Decreto Provincial 2307/17) y podría aspirar a una declaratoria nacional por ser uno de los parques artificiales más importantes del país.
Es un bien cultural con una altísima valoración social por parte de todos los mendocinos pero también por el resto de los argentinos. Pero es también un símbolo, que excede su papel de ser el espacio recreativo y cultural más importante de Mendoza: es la representación del triunfo de la acción civilizadora del árbol, las acequias, el agua sobre un medio árido.
Es un bien en su conjunto que contiene otros muchos bienes culturales, edificios, obras, sitios, esculturas, monumentos conmemorativos, fuentes, especies vegetales, todos y cada uno susceptibles de valoración y protección.
Por ello, y en reconocimiento creciente de su valor, ha sido objeto de protección especial, primero como Área ambiental urbana protegida en 1996 y luego como Parque Histórico en 2017.
Esta normativa, así como la Ley de Patrimonio de la Provincia, obligan al Estado provincial a cuidarlo y a garantizar que las intervenciones y obras que se realicen en el Parque deberán estar aprobadas por la autoridad de aplicación de la Ley 6034 y su decreto Reglamentario 1882/2009.
Haciendo una síntesis y para finalizar ¿qué es lo negativo y lo positivo de lo sucedido, que permita aprender de la experiencia?
Lo negativo:
1- Se eludieron los controles previos que la obra requiere por hallarse comprendida en un área cultural protegida con legislación vigente. Seguramente el Consejo del Patrimonio no habría autorizado esta localización para el edificio.
2- La comunicación entre áreas de gobierno ha sido deficiente y si bien los procedimientos y mecanismos para la protección de los bienes culturales está contemplada, en la práctica no se cumplen.
3- El edificio estaba proyectado en un sitio adecuado a 80 o 100 m más al Oeste en medio de un grupo de árboles. Allí se hicieron las bases y luego sin razones fundadas se decidió desplazarlo a este lugar.
4- La Municipalidad de la Ciudad de Mendoza no ha exigido aprobación previa de la obra edilicia y colocación del cartel de obra reglamentario al momento de iniciar los trabajos
Lo positivo:
1- Se están encarando las obras para la colocación de cámaras de seguridad en todo el parque
2- El edificio del centro de monitoreo es de una estructura factible de ser desarmada y trasladada al sitio primigenio (hacia el Oeste) donde ya están realizadas las bases. Es decir estamos a tiempo de evitar una obra en un sitio erróneo y puede aprovecharse el material invertido.
3-Hemos aprendido que el Patrimonio es de todos y que las leyes existen y todo ciudadano puede exigir su cumplimiento.
Pensemos que Carlos Thays puede vernos… esperemos que esto tenga final feliz y pueda estar orgulloso de los herederos de su obra.