Ayer, poco después del mediodía, bomberos de la Policía de Mendoza, junto a personal de la Escuela de Buceo Aconcagua, dieron en las aguas del dique Potrerillos con el cuerpo sumergido de una mujer.
A pesar de que el cadáver debe ser identificado en la Morgue Judicial, todo indica que se trata de los restos de Concepción Arregui Moreno, la mujer chilena de 59 años, que fuera asesinada por su pareja, Roberto Luis Audano (70).
El crimen fue confesado por el propio Audano y, gracias a los datos que aportó, orientó la búsqueda, tras lo cual fue imputado por homicidio agravado por el vínculo.
La mujer había desaparecido el pasado 5 de febrero, cuando desde el vecino país (donde tiene sus familiares), reclamaron sobre su paradero, mientras que 5 días después se concretó la denuncia por desaparición de personas ante una Oficina Fiscal.
Y si bien Audano siempre estuvo en la mira de la Justicia, su detención se concretó casi un mes después, cuando se encontraron manchas hemáticas en el vehículo de la pareja, mientras que las antenas, ubicaron una señal de su celular en la zona de Potrerillos, aquel 5 de febrero.
En ese momento el hombre reconoció haber matado de un disparo a “Conchy”, como llamaban a la mujer. Esto se produjo en un camping de la zona del dique Cipolletti. Contó que luego trasladó el cuerpo hasta el lago de Potrerillos.
El imputado contó que ató el cuerpo y colocó baldes con piedras de contrapeso para provocar el hundimiento de los restos de Arregui Moreno. Dijo que subió el cuerpo a un bote de goma y luego abandonó el cuerpo a unos 15 meteros de la orilla.
La causa, desde un principio, quedó en manos del fiscal de Homicidios, Gustavo Pirrello, quien este domingo, conocido el hallazgo, se trasladó a la zona.
La búsqueda
Hace unas semanas el hombre, tras ampliar en forma voluntaria su testimonio ante el fiscal, se “ofreció” para marcar el lugar donde se deshizo del cuerpo de su mujer.
Sin embargo, pese a ello, durante todo este tiempo el trabajo de bomberos en el agua y de perros sobre el terreno no pudieron dar con el cadáver.
Debido al viento Zonda, el trabajo sobre el espejo de agua fue suspendido por varios días. Esa búsqueda se intensificó en las últimas 72 horas, inclusive llevó al Ministerio Público este viernes a enviar a los medios fotos y videos sobre el trabajo que se estaba realizando en lugar.
Desaparecida desde el 5 de febrero
Según el testimonio inicial de Roberto Luis Audano (70), había acompañado a la mujer en febrero a la Terminal de Ómnibus de Mendoza para que viajara a Chile. Sin embargo, nunca cruzó la frontera. Días después, Audano confesó el asesinato de la mujer.
La mujer vivía en Luján de Cuyo desde 2014. Desde la investigación descartaron en primera instancia la participación de un tercero en el crimen. Además señalaron que no hay testigos del hecho y que tampoco pudieron encontrar todavía el arma homicida.
“Conchy” tenía comunicación casi diaria con sus parientes chilenos. Tenían un grupo de primos en WhatsApp en el que se contaban las novedades y compartían momentos de la vida cotidiana. El 5 de febrero fue la última vez que ella hizo publicaciones en Facebook y que habló con familiares. A partir de ese momento no supieron nada más de ella.
Tras la denuncia de pedido de paradero radicada en Chile, comenzó la investigación en Mendoza. En sus primeras declaraciones, Audano dijo que el 5 de febrero llevó a Concepción a la terminal de micros de Mendoza con dos valijas para que viajara a Chile y que no tenía pasaje. Pero las cámaras de seguridad nunca ubicaron a la chilena en las cercanías de ese lugar de Guaymallén.
Los familiares de Arregui sostuvieron en ese momento que no era conducta normal en “Conchy”. El misterio se acrecentó cuando la PDI de Chile confirmó que la trasandina nunca cruzó la frontera. Los últimos movimientos en el paso fronterizo Los Libertadores databan de diciembre, cuando Concepción fue al cumpleaños de una amiga.
Concepción tenía 59 años y era corredora de seguros. Sus padres habían fallecido y no tenía hijos ni hermanos. Su familia más cercana eran sus primos y sobrinos, entre ellas dos actrices muy conocidas en Chile (Carolina Arregui y Mayte Rodríguez). Hace cuatro años decidió vender todos sus bienes en el país trasandino y radicarse en Argentina por amor.
La mujer se vino a vivir con Audano a una casa en Las Compuertas de Luján, porque los hijos y nietos del hombre viven en Mendoza. Después de varios años, formalizaron la relación y pasaron por el Registro Civil en octubre de 2016.
Aunque todavía no se conoce con certeza el motivo del asesinato, la Justicia baraja la posibilidad de que haya existido un problema de dinero entre “Conchy” y Roberto Luis Audano. Ambos estaban en proceso de separación y habían construido juntos una casa en Luján de Cuyo. Los investigadores se inclinan a pensar en un móvil económico.
“Él no ha manifestado expresamente qué fue lo que lo motivó a quitarle la vida a Concepción. No lo ha dicho, se limitó a expresar lo que espontáneamente tenía ganas de decir”, había explicado en su momento el fiscal adjunto Gonzalo Nazar.