Sergio Massa inauguró su segundo intento presidencialista tras permanecer casi un año en silencio. Está convencido de que esta vez la grieta entre el kirchnerismo y el Cambiemos se puede romper, porque a su criterio la sociedad está cansada de los errores del pasado y de las mentiras del presente.
Y afirma que para cumplir ese cometido es que surgió el Grupo de los Cuatro, que integra con los gobernadores Juan Manuel Urtubey y Juan Schiaretti y el senador Miguel Pichetto.
El líder del Frente Renovador descartó que este relanzado peronismo federal vaya a compartir una PASO con Unidad Ciudadana, aunque dijo que quiere sumar a kirchneristas como Rafael Bielsa y a macristas como Emilio Monzó, y a otros espacios provinciales como el Movimiento Popular Neuquino (MPN) o el socialismo santafesino, con el que ya están en conversaciones.
-¿Está agotado el plan económico del Gobierno o puede mejorar la situación?
-No es el plan del Gobierno, es el plan del Fondo Monetario para garantizarse cobrarnos la deuda. No es un plan para poner en marcha a la economía argentina.
-¿Pero cómo se sale sin la ayuda del Fondo?
-Fue un gravísimo error ir al Fondo. La Argentina tenía 110 mil millones de dólares blanqueados de argentinos en el exterior que hoy tienen una baja tasa de rendimiento.
Vos podías haberles dicho que vinieran y que en lugar de pagarles el 3,5% o el 4% les pagabas el 6%, pero que trajeran la plata a la Argentina. Lo que hizo este gobierno es permitirles blanquear la plata pero para dejarla afuera, y encima pagan pocos impuestos mientras el tipo que está acá produciendo tiene presión impositiva récord en la región. Si nos toca gobernar, vamos a rediscutir la totalidad del acuerdo con el Fondo.
-¿Teme un estallido? ¿Cree que el Gobierno termina el mandato?
-Toda la dirigencia, si de verdad ama a la Argentina, tiene que contribuir a la paz. Pero eso debe venir de un brazo extendido del Estado cuidando a quienes no pueden pagar la luz, porque los precios de los servicios fueron al demonio; o a quienes se están quedando sin trabajo o a quienes van a la góndola del supermercado y se encuentran con situaciones gravísimas.
Y nosotros tenemos que tener firmeza para ponerle límites a un plan que nos lleva al fracaso y mucha inteligencia para mostrarle a la sociedad argentina que hay una alternativa de oposición que puede llevarnos a un modelo de desarrollo. Muchos dicen que hace 70 años que la Argentina no tiene superávit comercial ni superávit fiscal ni tipo de cambio competitivo. Es mentira. El equipo de Roberto Lavagna, Aldo Pignanelli y Martín Redrado, tuvo superávit fiscal y comercial y resultado primario positivo durante tres años. Y representa el pensamiento económico de nuestro espacio.
-A ese equipo lo condujo Néstor Kirchner...
-El resultado empieza en 2002 (gobierno de Eduardo Duhalde). Y no es atributo de una persona, sino de una idea, y esa es la idea de país que tenemos que construir.
-¿Qué le hace pensar que esta vez es factible romper esa grieta que no se rompió en 2015 ni en 2017?
-Que la sociedad por un lado está con tristeza por las mentiras, la insensibilidad y el fracaso del gobierno de Macri; esa gran parte de la sociedad que creyó que la Argentina podía vivir un cambio, que finalmente fue una suma de mentiras que no se cumplieron. Y por otro lado, que sabe que del pasado tenemos que aprender de los errores, para no volver a cometerlos.
-Es decir que es imposible que ustedes vayan a una PASO con Cristina.
-Esa es una discusión absurda. Lo primero que tenemos que plantear es qué idea de país representamos. La gente no sigue competencias electorales, sino que quiere saber cómo va a hacer para pagar la luz, tener trabajo, que su hijo vaya al colegio y no lo tenga cerrado porque hay explosión de gas, falta de luz o paro docente.
-Pablo Moyano espera que usted vuelva al PJ. ¿Cómo hay que interpretar eso?
-Tenemos que articular con todos los sectores del mundo del trabajo. Y a ellos debemos sumar a la economía popular, un sector que hoy no está tenido en cuenta en la idea económica de país de este gobierno y es clave, porque representa ese 30% de la economía informal.
-¿El objetivo de la mesa de los cuatro es representar a las mayorías?
-La mesa de los cuatro es el primer paso. Tenemos que bañarnos de humildad, generosidad y amplitud para que esa mesa sea de 40, no de 4.
-El límite es el kirchnerismo y Cambiemos.
-Ese es un paradigma del pasado. Yo a Rafael Bielsa, que es kirchnerista, lo quisiera en mi equipo, y a Emilio Monzó, que es de Cambiemos, también. Tengo otros diez ejemplos de tipos valiosos.
-¿Cómo puede calar esta alternativa peronista en Mendoza, gobernada por Cambiemos y con un kirchnerismo potente?
-En Mendoza gobierna Cambia Mendoza, que es algo más que Cambiemos y que tiene sectores que a nivel nacional claramente no apoyan a Macri, como el Frente Renovador o Libres del Sur. Creo que en algún momento esa contradicción va a aparecer. Hay dirigentes peronistas e intendentes del peronismo muy valiosos a los que hay que ir a abrazar y fortalecer.