Brasil se quedó a las puertas de volver a jugar unas semifinales del Mundial de básquet después de 28 años al perder ante Serbia por 84-56, en un partido en el que los balcánicos fueron muy superiores, sobre todo tras el descanso, este miércoles en Madrid.
El genial base serbio Milos Teodosic fue el verdugo de Brasil, al anotar 23 puntos, incluidos tres triples y 10/10 en tiros libres, siempre en momentos determinantes.
El triunfo balcánico es fruto de su superioridad en todos los aspectos del juego: los pivotes fueron superiores (42% de los puntos logrados desde la pintura) y los triplistas serbios acribillaron a Brasil tras la pausa.
Los brasileños, que soñaban con volver a una semifinal mundialista tras 28 años ausencia, no tuvieron ninguna opción ante una selección a la que vencieron en la primera fase, pero que ha demostrado desde que han comenzado los cruces, que son un equipo muy serio, prácticamente sin fisuras, y con jugadores, como Teodosic o Bogdan Bogdanovic, a los que no les tiembla la mano cuando deben decidir partidos.
Serbia se jugará un billete para la final del domingo el próximo viernes (20h00 GMT, Palacio de los Deportes de Madrid) ante el ganador del España-Francia, que se disputa este miércoles.