Ni el diseño de las boletas se salva de la puja política que viven hoy los partidos. Aunque la ley es pareja para todos, los problemas se presentaron justamente entre aquellos que debían ponerse de acuerdo y llevar una propuesta similar, y entre los que quieren ir más allá de lo establecido.
Esta semana venció el plazo y las agrupaciones presentaron sus propuestas. Todos pudieron oficializar sus diseños a excepción del Frente para la Victoria (FpV) que judicializó el pedido de llevar la imagen del fallecido ex presidente Néstor Kirchner. En el resto de los casos, el encargado de dar la aprobación final fue el juez federal con competencia electoral, Walter Bento, quien realizó las observaciones a los partidos según las disposiciones legales.
Dejando la polémica de lado, el denominador común que hay entre las boletas salta a simple vista: fotos grandes, a color y con un papel de mayor gramaje. Así serán las 12 boletas que nos encontraremos los mendocinos en el cuarto oscuro el domingo 11 de agosto, cuando debamos elegir candidatos en las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).
El FPV y su boleta polémica
El FpV es el partido con más cambios a realizar sobre la hora. Tras las resolución de Bento sobre las impugnaciones presentadas al cupo femenino el pasado martes, los justicialistas debieron intercambiar en las boletas a los candidatos por el cuarto y quinto término: Romina Ronda subió en la lista y relegó a Germán Ejarque al último lugar.
Pero el tema no termina en esta observación. En sintonía con los referentes nacionales, los locales diseñaron una propuesta que lleva la imagen de Eva y Juan Domingo Perón por un lado, y la de Néstor Kirchner en otro recuadro. Esta última figura fue rechazada por el juez federal quien argumentó que la imagen del ex presidente no está registrada. Ante la negativa de Bento, el partido decidió apelar a la resolución, por lo que no habrá novedades hasta comienzos de la semana próxima.
La misma polémica tuvo su réplica en los otros distritos nacionales en donde, al igual que en Mendoza, los encargados de objetar al oficialismo desde un principio fueron los partidos opositores. Los argumentos radican en que ningún partido puede llevar fotos de otras figuras ni de referentes nacionales.
Del otro lado, Eduardo Bauzá, coordinador de la campaña y del gabinete, defendió el diseño oficial y justificó que se trata de "íconos que irán en el lugar del escudo" y no de fotos propiamente dichas, situación no permitida por la ley. De todas maneras, algunos opositores no quedaron conformes con las respuestas. "Si es por eso a mí me hubiera gustado llevar la imagen de Adolfo Rodríguez Saá. Estos son los excesos que la ley no debería permitir", señaló el precandidato por Compromiso Federal, Daniel Cassia.
El resto de las listas mantuvo sin mayores consideraciones la propuesta presentada el 28 de junio pasado ante el juzgado federal.
Partidos con más de una lista
El caso aparte lo presentan los partidos que van a las PASO con más de una lista. La ley establece que se deben unificar algunos criterios en el diseño y usar un mismo color y denominación. Es decir, a excepción del encabezado en la boleta, las distintas propuestas de un mismo partido sólo se podrán distinguir por la letra que sigue al número de lista, por los nombres y las fotografías de los precandidatos.
La premisa de tener algo en común puso en el tapete las diferencias explícitas que hay entre los referentes que van por dentro de un mismo partido. Solamente tres agrupaciones llevarán más de una propuesta: la Unión Cívica Radical (UCR), el Partido Demócrata (PD) y el Frente Amplio Progresista (FAP).
En el caso de los radicales, la lista de Fernando Armagnague pidió a la conducción llevar el escudo tradicional del partido a la cabeza de la boleta. Pero el reclamo no prosperó e incrementó el malestar de los disidentes. A la fuerza, las dos listas terminarán llevando el nuevo logotipo de un círculo con la leyenda UCR en el interior.
Por otro lado, el PD intenta sacar rédito a la fractura que vive y que derivó en tres listas para agosto. La novedad preocupó en su momento a la dirigencia del partido, que decidió crear un comité para regular la actividad de los referentes de cada propuesta y aunar los criterios en el diseño de las boletas y de la campaña.
La otra fuerza con más de una propuesta es el Frente Amplio Progresista, en el que se enfrentan sin roces Alberto Montbrún y Gustavo Gutiérrez.
Cada frente o partido debe reunir un mínimo de 1,5 por ciento de los electores, sin importar la cantidad de listas internas que se presenten, para poder participar luego de la contienda electoral de octubre. Esta disposición, traducida en números, significa que cada fuerza mendocina debe reunir aproximadamente 19.500 votos como mínimo.
A su vez, de cada agrupación política que logre el mínimo sólo quedará una lista en competencia luego de las PASO. Se estima que el padrón es de 1.300.000 ciudadanos, de los cuales 30 mil son jóvenes de 16 y 17 años que podrán votar por primera vez.