En el marco de la segunda edición del concurso que selecciona a diseñadores mendocinos para participar de uno de los acontecimientos de moda más importantes de la provincia, tres marcas fueron las elegidas, entre diez, para representar la imagen del Mendoza Fashion Week 2016. El Mendoza Fashion Week 2016 tiene mucha tela para cortar; de eso no hay dudas.
Como muestra, basta con detenerse en los diseños que presentaron diez diseñadores mendocinos y que conformaron el Semillero de este acontecimiento de moda.
Si bien todos fueron parte de las distintas pasadas de los desfiles de estos días, sólo tres fueron los elegidos –hace más de un mes- para representar la gráfica para la campaña publicitaria de este encuentro, que también reunió a reconocidas marcas nacionales e internacionales. Blac Le Cat, de Julia Ostropolsky y Valeria Simón; Valquiriah, de María Gracia Vilapriño; y Al Raz, de Rocío Azpilcueta conquistaron al jurado, compuesto por expertos en la materia y periodistas de distintos medios locales –entre los que estuvo Revista ClubHouse-, con diseños osados y originales que estuvieron inspirados o en absoluta relación con alguna obra artística.
En esta nota, un repaso en imágenes por todas las propuestas presentadas y el concepto de cada una. Para ver, admirar y elegir el preferido.
DISEÑO SIN ATADURAS, EL CONCEPTO DE ROCÍO AZPILCUETA
Basada en la obra “Esclava del vino”, de su hermano Federico, el vestido estaba realizado a través de nudos, sin costuras, como contrapunto del nombre del cuadro. Eligió un color bien claro para jerarquizar el volumen. A la vez, se puede manejar y cambiar de formas convirtiéndolo en un diseño distinto cada vez que es usado.
MOVIMIENTO Y PROFUNDIDAD EN LA CREACIÓN DE BUDA Y VERDECCHIA
Valentina, la diseñadora de la marca, trabajó junto a la artista Ana Zugasti, tomando como disparador una de sus obras. Una falda tubo de la línea sport, y una remera de red para transmitir comodidad, movimiento y distintas profundidades.
INTERPRETACIÓN DEL GÉNESIS, EL DESAFÍO DE DANIELA FERRI
Tomó como referencia la obra de María Rosa Di Paola para crear su diseño basado en la interpretación del génesis a partir de un juego de colores. Con un marcado drapeado en la falda y una importante cola, optó por el blanco en la mayoría de la prenda para darle espacio a la historia de la vida que todavía no se escribe.
VOLATILIDAD CON IMPRONTA, LA IDEA DE FALCA
La diseñadora María Flores se fijó firmemente en la obra de la artista Gabriela Berría y trabajó una prenda por capas. El vestido recreaba una capa sobre otra capa arriba dejando una marcada impronta en las terminaciones en serigrafía. Como resultado, la obra mostró un mix de jovialidad y madurez.
UN JARDÍN COMO INSPIRACIÓN PARA AGUSTINA BLANCO
Una propuesta osada la de la diseñadora de Lund quien, inspirada en una foto que correspondía a una obra de arte de la artista Verónica Fontana sobre el jardín de la vida, creó un vestido con flores contrastantes al bordó de fondo. Estado de plenitud y felicidad, además de luminosidad, son los conceptos de esta propuesta.
ACUARELAS Y COLORES SOBRE LAS TELAS, DE LAURA RÍOS
La diseñadora y acuarelista Laura Ríos creó un outfit clásico y cómodo para el verano, inspirado en la unión de la naturaleza y los sentidos. Trabajó con acuarelas sobre un crepe rasado japonés y diseñó una blusa suelta y una falda larga con tajos.
FRESCURA Y JUVENTUD, EL CONCEPTO DE VALQUIRIAH
En un trabajo conjunto a la artista plástica Romina Cruseño, la mendocina María Gracia Vilapriño destacó el color y el estampado como protagonistas de las prendas. Le dio preponderancia a la jarilla, como flor emblema de Mendoza y conjugó, además, rayas para la blusa y el pantalón que simula ser falda.
CREATIVIDAD Y SERIEDAD, LA PROPUESTA DE BLAC LE CAT
Inspiradas en la obra del arquitecto mendocino, Gerardo Andía, quien siempre hizo énfasis en casas pensadas desde el bienestar que brindan los espacios, Julia Ostropolsky y Valeria Simón diseñaron un traje blanco de blusa con líneas marcadas, principalmente líneas rectas, y un pantalón con tablas. En ambas prendas prevalece el juego de volúmenes.
SURREALISMO MÁGICO, FUENTE DE CREACIÓN DE LUCIANA POLETINO
Colores estridentes, materiales fuera de lo común y una mirada hacia la obra del artista Matías Peralta fueron la base para esta diseñadora mendocina, que quiso representar una obra escultórica con una técnica de vestido de lycra sublimado y un chaleco de metal unido por ganchos.
ARTE URBANO Y ARQUITECTURA DE MENDOZA, DE LA MANO DE LAURA PICCOTO
Dos fuentes de inspiración: el arte urbano y el arte de la arquitectura de Mendoza para concluir en un diseño moderno y con personalidad. Sobre un vestido corto y ceñido de color gris, las piernas y el torso representan un mural callejero y le dan el aporte de color justo.