LAS TRADICIONES EN LA "LINDA"
El recorrido por las 7 iglesias, tradicional de los Viernes Santos en Salta, evoca además su exquisita arquitectura entre lo colonial, el barroco y el neogótico. En las iglesias de Candelaria de la Viña y la de la Merced, en la capital tras la misa pascual, repartirán chocolates y rosca de Pascua.
Pero como siempre es en las localidades del interior de la provincia donde las celebraciones toman color, por ejemplo en Chicoana -a 47 km de la ciudad de Salta-, se realizará una feria de productos regionales muy atractivos, además la más añeja costumbre, la “Quema de Judas”. En Metán, que llevará a cabo un Vía Crucis con gauchos a caballo. En la Caldera (a 22 kilómetros de la capital) los viajeros podrán prenderse a los circuitos guiados en bicicleta por sitios emblemáticos además de disfrutar de las comidas regionales en la feria popular. En Rosario de Lerma, los vecinos elaborarán una rosca de Pascua inmensa para compartir, luego de la misa. Los días previos, feria de artesanos y deliciosas comidas regionales.
La novedad para esta Semana Santa es que reanuda su periplo el afamado Tren a las Nubes que asciende a 4.200 metros en un recorrido de 434 kilómetros (ida y vuelta) y es uno de los tres ferrocarriles más altos del mundo, que atraviesa vertiginosas montañas de la cordillera de los Andes entre espectaculares paisajes. Es una de las maneras de llegar a San Antonio de los Cobres, donde el taller Thuru Maky-Manos de Barro, donde trabajan 40 artesanos, invitan a realizar artesanías a los viajeros.
EL SEÑOR DE LA PEÑA
En La Rioja hay una enorme piedra cuya imagen y semejanza al rostro de Cristo es objeto, año a año, de visitas de distintas latitudes del país y del mundo. Los lugareños la bautizaron como “el Señor de la Peña. La imagen –en El Barreal Departamento Arauco- emerge aislada en la aridez del páramo circundante, y es objeto de gran devoción desde el siglo XIX y antes también. El dios “Llastay” protector de la montaña y la caza, extendía sus bendiciones de diferentes formas, las que ancestralmente se fueron transmitiendo a peregrinos y promesantes católicos.
En la actualidad el Jueves y Viernes Santos llegan: algunos lo hacen en su coche, otros a caballo y hasta hay quienes llegan a pie, en búsqueda de paz espiritual, invocando la protección, de Cristo, realizando el Vía Crucis, colocando pequeñas cruces y encendido de velas al pie del santuario. El culto consiste en velar al “Cristo” de piedra durante esos días. El número de velas varía según la promesa. Hay quienes encienden diez, veinte y hasta cuarenta velas al mismo tiempo. Alrededor de la piedra hay una pirca que fue construida para poner velas, cruces, ofrendas y flores. Esta pared forma un canal que se rebalsa en pocas horas por el cebo derretido, y por el cual fluye una especie de “río” de aceite. Allí se sitúan los fieles con varios ponchos extendidos para que el viento no apague la lumbre. A veces construyen una pequeña carpa con acolchados y telas, en cuyo interior arden 20 ó 30 cirios.
Casi todos llevan unas pequeñas cruces de cañas que pegan a la piedra con la cera derretida. En una de las paredes del peñasco hay dibujado un crucifijo que casi ya no se ve por la acción del hollín y el humo de las velas. Al atardecer el susurro de los rezos invade el paisaje, otorgándole un ambiente de misticismo y congoja. Entrada la noche, se oyen distintas oraciones y el rosario en grupos, así como otros oficios de la liturgia del Viernes Santo. Alrededor de las doce comienzan a entonar cánticos para recibir, al amanecer, el Sábado de Gloria.
Datos útiles
Cómo llegar: Desde la ciudad de La Rioja se puede ir por ruta 38 y a unos 30 kilómetros una bifurcación señala que se debe girar a la izquierda y recorrer 30 kilómetros por la Ruta Provincial Nº 9 hasta llegar al paraje la Puerta donde se accede a Ruta Provincial 7. A los 12 kilómetros hay un cartel que dice Señor de la Peña. Allí hay que continuar 7 kilómetros más hasta llegar al sitio.
Además: Excursiones guiadas, avistaje del vuelo vigía del cóndor andino; trekking en el Parque Nacional Talampaya, recorrer pequeños pueblos costeños, propician disfrutar de unos días de descanso conociendo maravillosos paisajes y degustar de una gastronomía única y privilegiada en la que se destacan antiguas recetas caseras.
DESCANSO EN LAS TERMAS
En Gualeguaychú, desde el 3 al 5 de abril, habrá una agenda con feria de artesanos y espectáculos de música en el Paseo del Puerto. El espectacular Vía Crucis sobre la Ruta 14, Km l 42, se realizará el viernes a las 17.
Pero las termas homónimas son lo que el viajero busca y no decepcionan. Disponen de 4 piletas termales de agua salada a casi 40 grados de temperatura; 2 de ellas son cubiertas. Para alojarse se pueden elegir cuartos de hotel, bungalows o camping. Pase diario mayores, $ 100; menores de 10 años, $ 70; menores de 3 años, $ 10; jubilados, $ 80. Además, paseos embarcados por los ríos Uruguay y
Gualeguaychú, pesca embarcada, safari fotográfico, senderismo y travesías de kayaks. En el balneario Ñandubaysal, con sus selvas en forma de galería, es posible disfrutar de ñandúes, ciervos, vizcachas y aves de todo tipo.
Termas del Guaychú es un complejo recreativo y de esparcimiento ubicado a 8 km de la ciudad de Gualeguaychú sobre ruta nacional 14 (Km 63,5).
Inserto en un entorno de vasta vida silvestre, permite el contacto con la naturaleza, disfrutar del aire puro y del hermoso paisaje que lo rodea. (www.termasdel guichu.com.ar) Hay promociones otoñales que van desde los $ 580 por persona por noche con todos los servicios y media pensión.
Termas de Federación (termasfederación.com.ar) es un complejo maravilloso con servicios muy cuidados para que los viajeros realmente disfruten de las aguas y del entorno, con piscinas al aire libre, cubiertas y una muy divertida con olas. Adultos $ 110, jubilados $ 60 y niños $ 50. Se suman paseos por las costas, avistaje de aves, kayak, turismo rural y de aventura.
LA LUNA EN LAS CATARATAS
A la majestuosidad de las Cataratas del Iguazú se agrega, por esas cosas del calendario, la Luna Llena como única iluminación en los paseos nocturnos durante Semana Santa. En la Estación Central del tren ecológico comienza el tour en medio de la oscuridad aunque con el guiño que el satélite de la tierra da para agregar misticismo al paraje.
La parada de la Garganta del Diablo es la meta, pero antes, las sombras que se descubren en la selva desnuda a la orillas de las vías, los sonidos de los animales y aves que habitan el parque acompañan hasta la estación en la que se desciende y se camina por pasarelas hasta divisar los velos de novia, esa bruma espesa que cubre las caídas de agua. Paseo a la luz de la luna, $ 400. Entrada Parque Nacional, $ 160.
De camino bien vale una pasada por San Ignacio Miní, la misión jesuítica de los siglos XVI y XVII en la que alrededor de una plaza central se distribuyen la iglesia, la Casa de los Padres, el cementerio, las viviendas y el cabildo, todo realizado en piedra local, el asperón rojo, en grandes piezas. La Reducción Jesuítica San Ignacio Miní, junto con las de Nuestra Señora de Loreto, Santa Ana y Santa María la Mayor fueron declaradas Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco en 1984.
EUR Cuaré es un Parque Provincial que protege cavernas naturales. Sirven de refugio a numerosas especies de murciélagos. Es un sitio de valor histórico y cultural que sirvió de inspiración al escritor Horacio Quiroga.
