El gobierno de Francisco Pérez podrá tener resuelta la paritaria docente cuando -el próximo jueves- se lleve a cabo el paro nacional de las tres centrales obreras opositoras: las CGT de Hugo Moyano y Luis Barrionuevo y la CTA de Pablo Micheli. Esta medida de fuerza -que apunta a lograr una parálisis en la actividad y no prevé manifestaciones- alcanzará niveles de contundencia ya que está impulsada fundamentalmente por los estratégicos gremios nacionales del transporte vial, ferroviario y aéreo 'en contra del ajuste' y por la elevación del mínimo no imponible en Ganancias.
En Mendoza, el paro contará con la adhesión -y la promoción- del Sindicato del Personal de Micros y Ómnibus (Sipemom) que dirige el secretario general de la CGT, Rodolfo Calcagni.
También adherirán la UTA y los camioneros, por lo que no sólo estará afectado el transporte de pasajeros de corta, media y larga distancia sino también el traslado de mercaderías y cargas. El listado completo de gremios que se sumarán a la medida de fuerza lo darán a conocer los organizadores el próximo martes, pero hay que descontar que incluye a ATE (Salud y Administración Central) y a Ampros que ya tienen dispuesta para esta semana 72 horas de huelga entre el miércoles y el viernes. También estarán los judiciales federales, estaciones de servicio y canillitas.
No obstante, el paro del jueves no será de carácter general sino parcial ya que no será convocado por la CGT Mendoza, donde conviven gremios opositores huelguistas con otros alineados en la CGT Caló y la CTA Yasky, de buenos vínculos con el gobierno nacional.
Por eso, se descuenta que en la medida de fuerza no estará el SUTE, a punto de cerrar la primera paritaria estatal de este año y en la órbita de la CTA Yasky. Según las estimaciones de la conducción del gremio docente, el plenario provincial de mañana en Rivadavia superará los dos tercios de los votos de delegados necesarios para la aceptación de la propuesta de aumento de 30,5 por ciento en una sola aplicación y desde marzo. Así se pudo ver el viernes en quince de los dieciocho plenarios departamentales, que se pronunciaron mayoritariamente por la aceptación.
Tampoco participarán el jueves de la medida de fuerza la UOM, Uocra, Frutas Frescas, Petroleros Privados y -seguramente- Alimentación, Comercio y Bancarios, aunque todos quedarán muy condicionados el jueves en su actividad por la restricción del transporte a un 'máximo' del 20 por ciento.
El gobierno de Pérez apuesta a la desactivación de los conflictos gremiales en la órbita pública durante abril. Da por descontado que mañana alcanzará un acuerdo con el SUTE y prepara en Hacienda la liquidación del aumento esta misma semana, a fin de que llegue al bolsillo de los docentes antes de Semana Santa. Igualmente evalúa la convalidación por decreto (a ser ratificado por la Legislatura) del acuerdo alcanzado con ATSA (que terminaría siendo también del 30,5% en una vez y desde marzo) con un techo de 5.500 pesos de suba.
La liquidación se generalizaría entre los trabajadores del régimen 15 (personal de apoyo de la Salud) donde es mayoritaria la afiliación a ATE, con la intención de quitar sustento al actual plan de lucha e intentando reducirlo a un 'paro de delegados'. En principio, el Gobierno buscará mantener la negociación de la Salud pero 'recortada' al régimen 33 de los licenciados en enfermería (mayoritariamente asociados a ATE) y al 27 de los profesionales médicos (ligados a Ampros).