Los efectos de la digestión lenta reducen significativamente la calidad de vida de quien la sufre; hinchazón, pesadez, mal genio, cansancio, flatulencias, falta de nutrientes, son sólo algunas de las consecuencias de tener un sistema digestivo rebelde o estar manteniendo malos hábitos alimenticios y de vida.
Médicos especialistas de la prestigiosa Mayo Clinic en Estados Unidos recomiendan:
- Evitar el consumo excesivo de alcohol
- Eliminar el cigarrillo y drogas no prescriptas
- Reducir los niveles de estrés
- Descansar adecuadamente
- Comer en horarios regulares y abundante cantidad de frutas, vegetales, granos integrales y líquidos.
- Realizar ejercicio físico
Mantener una mala o lenta digestión durante mucho tiempo puede desembocar en trastornos crónicos o enfermedades de gravedad por lo que resulta importante poner atención en mejorarla; así mismo, eliminar malos hábitos e incorporar ciertos otros, mejoran significativamente la digestión y tienen un impacto positivo en toda la salud en general.
En caso de sufrir de digestión lenta o problemas gastrointestinales es bueno seguir estos consejos acompañado de un profesional de la salud que identifique la presencia de problemas de mayor gravedad en caso de que éstos existan.
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